Josh sabía que Fernández era un cobarde y no dudaba que el médico se marcharía aquella misma noche del país. De repente, su móvil empezó a sonar y al ver quién era no tardó en contestar. -Cariño, ¿todo bien por la empresa? -preguntó Josh y percibió que Aline tenía la respiración acelerada. -Josh, te llamo para avisarte que tengo que coger un vuelo hoy mismo a Rio de Janeiro. -contó Aline con mucha prisa. -Pero cariño, se supone que no tendrías que viajar hasta el sábado y por eso iba a acompañarte. -dijo Josh confundido. -En un par de horas tengo que viajar a Suiza para la conferencia y sabes que no puedo faltar. -Lo sé Josh, créeme que esto también me ha pillado por sorpresa, pero es Ivanna no se encuentra bien de salud y no podrá viajar. Tenemos mucho trabajo que hacer para organizar

