Sirviendo a Dos Amos
El agente Rossi terminó la llamada en el celular que sostenía con una sonrisa y se giró para observar a un joven de alrededor de 28 años vestido con jeans y sudadera negra con tatuajes en el cuello y brazos quien miraba al exterior del gran ventanal de un loft en el centro de la ciudad del Dragón. Desde ahí, se podía ver el gran hotel que iba a ser el lugar donde se realizaría la conferencia de las comunidades.
- Me informan que la Guía Allen llegó con su equipo y ya se encuentra en el domo. - le dijo al joven.
- Mantente alerta con sus movimientos y los de su gente. No des nada por sentado con esa mujer. - le ordenó sin volverse - En dos días se iniciará la conferencia y todo seguirá conforme a lo planificado.
- Todo lo que solicitó ha sido preparado, jefe. - le dijo - Sólo falta que me informe que harán el resto de los equipos para facilitarles el trabajo.
- No tienes que saber lo que harán los demás. - advirtió el joven - Solo has lo que te ordeno y podrás tener el ascenso que quieres y el resto del dinero que te ofrecí ¿No he sido generoso contigo desde que trabajas para mi?
- Por supuesto, jefe. - dijo Rossi de inmediato - Muchas gracias por valorar mi esfuerzo.
- Sigue así entonces... - le dijo serio - No tientes a tu suerte...
- Si, señor... - le dijo girando sobre sus pies para salir del lugar dejando al joven observando la entrada del hotel y las vallas de seguridad.
Tenía un plan y se aseguraría de que los que le habían hecho daño pagaran por todo.
El Comedor del Domo
Rin miró a Noah inquieta y aferró su mano mientras caminaban hacia el comedor común del domo. Zack caminaba a su lado con una expresión extraña y se había vuelto silencioso, cambiando por completo su actitud.
A medida que se acercaban, la gente reunida en el pasillo, atentos a la llegada de la G3 y su grupo, comenzaron a murmurar entre ellos. Claramente se podían escuchar los comentarios asociados a Zack y su deslealtad contra su guía y cómo ahora estaba con otra guía con vínculo de segunda oportunidad. Otros hablaban de su peligrosidad y lo letal que era al pelear.
- ¿Qué tanto venías antes? - le preguntó Seth con una ceja alzada caminando tras Davies y Jasper quienes lideraban el grupo acompañados de Aoto y Riku.
- Venía con Cassis seguido, ya se los dije...- su voz era tensa - La última vez fue cuando salí del ala médica tras el desafío. Cuando diste esa entrevista. Estuve algunos días.
- Creo que tu encanto permanece, chico. - bromeó Jasper - Que bueno no ser el único que se mete en problemas ahora.
- ¡Jasper!- regañó V. - Compórtate.
- Si quieren puedo comer en la habitación... - comenzó a decir el esper y Anthea se detuvo de golpe haciendo que chocaran con ella.
- Vuelve a decir eso y te golpearé. - le dijo, girándose con los ojos brillantes y la bruma flotó a su alrededor - Nunca bajes la cabeza ante mi ni a ningún meta humano. Seguirán mis comandos y protegerás a tu compañera con Noah, lo mismo que hace Jasper con V. Son mis esper...
Las estelas de Anthea se hicieron visibles y se extendieron por el pasillo tocando a los presentes quienes se llevaron la mano al pecho, incluyendo a Aoto y Riku. V. y Rin y Noah, ya más familiarizados con sus habilidades, controlaron el choque con respiraciones pausadas para disminuir la frecuencia cardiaca.
Zack y Jasper se giraron para verla y se acercaron a ella cuando les extendió las manos una vez que Seth asintió, siguiéndola al interior al tiempo que pasaban entre los que ya estaban inclinados o de rodillas tratando de respirar o controlar la opresión del pecho.
- Vamos V. - le dijo Seth con una sonrisa - Te escoltaré. Vamos, Noah, escolta a tu compañera.
- Maestro...- dijo Riku en un jadeo.
- Han ofendido a mi equipo. No voy a interceder. Zack, Jasper y Noah son mis esper también. El que los ofenda, me ofenderá a mi.
Noah lo miró, conmovido. No esperaba una actitud tan directa, pero no quería que el domo les tuviera miedo.
- Maestro, - le dijo el gemelo - neutralice el aura de la G3. Ya aprendieron la lección.
Seth se giró sorprendido.
- ¿Quieres que los libere si acaban de insultar a tu hermano?
- No todos son como ellos. El G2 y Riku... otros sólo estaban esperando vernos llegar...
- Entiendo... Lo haré porque lo pide uno de mis esper...
Una vez que habló, sus ojos brillaron y su aura los rodeó extendiéndose junto a la bruma de Anthea, la que lentamente fue cubriéndola, permitiéndoles levantarse y respirar. Aoto y Riku se incorporaron mirando al esper con asombro.
- No se sorprendan, Anthea es mi compañera y las estelas que usó son un milésimo del poder que tiene. Que su gente no vuelva a desafiar a mi equipo o seré yo quien los arrodille. - les dijo señalando a un guía quien cayó al instante de rodillas al suelo.
- ¿Cómo puede controlar a un guía? - preguntó Aoto impactado.
- Puedo controlarlos a todos... - dijo Seth con una sonrisa burlona mirando a Aoto liberando más aura y extendiéndola cada vez más lejos y cada uno fue cayendo de rodillas.
- Seth, somos invitados... Recuérdalo. - intervino V. con los ojos brillantes.
El esper abrió la palma y retrajo el aura hasta que se dispersó completamente.
- Mis disculpas...- les dijo educado - Tengo poca tolerancia a los imbéciles...
Seth caminó hacia el comedor escoltando a V. quien le sonrió, seguidos de Aoto y los demás hasta el lugar donde Anthea, Zack y Jasper los esperaban.
- Veo que te luciste de nuevo, Seth. - dijo Jasper haciendo lugar para V. y los Grant mientras el esper se sentaba frente a ellos junto a su compañera y a su lado Riku. Aoto se sentó junto a Anthea.
- Tu compañero no sigue el protocolo... - mencionó Jasper a Riku con curiosidad.
- ¿El esper debe estar a la izquierda de su guía en todo momento? - les preguntó y Seth asintió - Ahora que lo menciona, no hemos seguido ese protocolo desde hace años. Estamos pocas veces en un mismo lugar.
El joven alzó una ceja con sorpresa y Riku se encogió de hombros.
- Ambos tenemos mucho trabajo y actividades diferentes. Tal vez se deba a eso...- mencionó con tranquilidad.
- Han estado juntos por mucho tiempo...
- Si...
Algo en la voz de Riku hizo que Zack y Rin levantaran la cabeza y se miraran entre sí y el esper advirtió el gesto por lo que se enderezó con rapidez.
- Pediré que traigan las bandejas aquí. No demoraré. - les dijo el esper levantándose con una sonrisa - Con la cantidad de gente reunida hoy no alcanzarán a comer la comida caliente.
Zack lo observó marcharse. Había algo diferente en Riku.