01 de Diciembre de 1814, Londres.
Esa mañana sentía que iba a ser un día muy ajetreado con su familia, ya que todos sus hermanos se encontraban en la mansión, al igual que su madre. Algunos no solían levantarse temprano, pero procuraban compartir el desayuno en familia, puesto que todos tenían sus cosas que hacer durante el día, y cuando iban a un baile también trataban de asistir todos si estaban en la ciudad. Así pues, Benedict se dispuso a bajar al comedor y no le sorprendió haber conseguido la estancia vacía, no le dio mucha importancia y se sentó en la cabecera de la mesa, los sirvientes ya estaban por doquier llevando las bandejas de comidas y bebidas.
‒ Buenos días, querido ‒ su madre fue la primera en aparecer, cosa que tampoco le sorprendió, después de él su madre era la person
