Lazos de sangre 2

CAPITULO 18

POV DANTE

Esta mujer cada vez me sorprende más, ver lo linda que se está comportando con mis hijas me hace muy feliz, pues sé que a su lado estarán protegidas y segura, ella y sus hermanas son mujeres muy fuertes que son capaces de acabar con cualquiera que quiera atacar a su familia y hacerles algún tipo de daño, la admiro por su valentía y por como maneja las situaciones que la afectan directamente a ella o a su familia, me gusta la unión que hay entre ellos, yo por ejemplo tengo años sin ver a mi madre y pues mi padre murió cuando cumplí quince años, mi familia era muy humilde y por eso me encaminé en esto, mi madre se decepciono tanto al enterarse que me dijo que yo estaba muerto para ella, que solo tiene un solo hijo y es mi hermano Leandro, del que no se nada, la última vez que lo vi tenía solo seis años, creo que lo veo a hora y no lo reconozco pues ya debe de ser un hombre de veintitrés, todos los días le escribía cartas a mi madre para saber cómo estaba y pidiéndole perdón, le mando dinero constantemente al principio no lo recibió, pero al ver que no tenía como sacar adelante a mi hermano lo acepto para sus estudios y para que fuera un mejor hombre y no tuviera que hacer cosas tan horribles que lo atormenten como yo.

Mi madre es una mujer muy religiosa, muy creyente de Dios, por eso no acepta las cosas que hago, la verdad daría todo lo que tengo por volver a estar en sus brazos, por saber que es un abrazo de amor de tu madre, pero no me atrevo a buscarla una vez más, pues me da miedo ser rechazado y que me termine de lastimar más, ella ya tiene más de cincuenta años, ella fue madre muy joven, y según las fotos que tengo se conserva muy bien, es una mujer muy hermosa y respectada.

Salgo de mi burbuja de pensamientos y veo como mis hijas han dejado a Lucia, sonrió al verlas tan felices, las palabras fuertes que le dije a mi cuñada me dolieron mucho, pero no le permitiré tratar mal a la mujer que amo, ella no tiene ningún derecho de meterse en mi vida. Ahora escucho lo que les dijo a mis hijas y salgo muy enojado a detenerla antes de que se marche, pues dijo que iría a visitar la tumba de sus padres.

La sostengo fuerte del brazo.

- ¿Cómo pudiste llegar a pensar que tendría una relación contigo, que serias mi esposa? Eso es absurdo, pues solo te veo como mi cuñada, jamás me fijaría en ti como mujer, eres la hermana de mi difunta esposa, ¿Cómo crees que pasaría eso, y por qué involucraste a las niñas así? No puedo entender lo que te pasa -interrogo.

-No…tu…

-No, tu, habla de una vez, pues creo que no hay escusas para eso, hablabas de traicionar la memoria de mi esposa y tú eres la que lo hace pretendiendo ser lo que no eres, porque solo eres la tía de mis hijas, nada más, que eso te quede claro -digo furioso.

-Yo siempre te he amado, desde antes de que te casaras con mi hermana, además recuerda que yo fui quien los presento -dice llorando.

-Sí, tú lo hiciste, pero jamás habíamos sido nada, ni siquiera amigos, solo teníamos una persona en común, eso no significa nada, entiéndelo.

-Sí, lo sé, pero mí amor por ti siempre ha estado ahí, no te olvide y no te olvidare jamás, cásate conmigo, nadie te hará más feliz que yo, conozco todo de ti, de las niñas, seremos una familia feliz -dice desesperada e intentando abrazarme.

Me zafo de ella y le pido que se valla de mi casa, que no quiero que viva más con mis hijas y menos conmigo. Ella llora y dice que no tiene a nadie más en el mundo, pero sé que es mentira, pues tiene un hermano mayor, y más sobrinos, además de tías y primos, le paso mucho dinero y hago que se retire, ella amenaza con que esto no se quedara así y con hacerle daño a Lucia, pero no sabe con quién se metería si lo intentara.

Subo a la habitación de mis hijas y veo que aún siguen jugando a maquillar a Lucia.

-Amor, veo que mis muñecas te dejaron…

-Hermosa papi, esta hermosa mi nueva mami -dice Pauline. Puedo ver que Lucia se afecta por sus palabras, incluso yo sentí un nudo en la garganta al escuchar a mi hija hablar así, sé que su madre les va hacer falta toda la vida.

-Podemos hablar un momento en privado en un baño mientras me desmaquillo -pregunta Lucia.

-Claro amor, donde quieras y cuando quieras -digo en forma coqueta. Puedo ver que es algo serio por la expresión de su rostro.

La llevo a mi habitación y entramos al baño, siento algo de tensión en el ambiente.

- ¿Por qué me mentiste con respecto a la muerte de tu esposa? -pregunta un poco confundida.

Mi corazón se acelera de solo pensar en la respuesta, pues es algo que me duele en lo más profundo de mi alma y corazón.

-Es que es algo que no me gusta recordar, fue un trauma muy fuerte para mis hijas y para mí, verla consumirse y tu sin poder hacer nada, por más dinero que tengo, no pude sanar su enfermedad, verla deteriorarse de esa forma y recordar cómo fueron sus últimos días, como cambio su aspecto físico fue muy fuerte, muy doloroso. Cuando nació Pauline, descubrimos a las dos semanas que mi esposa tenía cáncer en los huesos y ya estaba muy avanzado, hizo muchos tratamientos hasta que ella al verse tan mal tomo la decisión de morir en la casa y no dejar que sus últimos días fueran sola aparatada de sus hijas en un hospital, ella me pidió que encontrara una mujer buena y fuerte, una mujer que fuera buena con las niñas y sobre todo que nos amara a nosotros no al dinero, pues todas las chicas con quien he salido siempre se han interesado en mi riqueza y no en mí, o en mis hijas, por eso no había traído a ninguna aquí, hasta que te encontré y mi vida cambio para siempre, ahora soy feliz porque estas a mi lado y al verte que te llevaste bien con las niñas eso me hace aún más feliz y dichoso, sé que a ellas también, Lucia, tu llegaste a dar alegría a mis días, y los de mis hijas, pues con solo unos minutos de conocerte ya te quieren y a tus hijos sin conocerlos también, las conozco y sé que por eso quieren verlos -expongo mi pasado delante de ella y lo que pienso de como mis hijas y yo nos sentimos.

Verla llorar a mi lado me deja ver lo hermoso de su corazón, pero me preocupa que todo esto pueda afectar de una forma u otra nuestra relación.

-Dante, admiro lo que sientes por tu esposa, pero siento que aun la amas y respeto eso, pues admiro que lo hagas, no puedo pensar con claridad ahora, la salida con las niñas la haremos después, te prometo que en cuanto sepa lo que me pasa y termine esta confusión en mí, te buscare, tus hijas son hermosas y créeme, me encantaría ayudarte a criarlas y que tú me ayudes a criar a los míos y conformar una gran familia, pero aunque no te quieras dar cuenta, tienes que dejar ir a tu esposa, siento que ella estaría presente en nuestra relación siempre y no quiero que me compares con ella, no pretendo competir con su recuerdo, lo siento, espero puedas entenderme y créeme, te amo, te amo demasiado, que por eso prefiero hacerme a un lado para que no te confundas y termines haciéndote daño, pues yo no soy ella, soy Lucia -dice y sale del baño dejándome sorprendido por lo que piensa, mi cabeza aun no procesa sus palabras y me quedo como una estatua sin hacer ningún tipo de movimiento.

Cuando por fin reaccionó ya no está, se ha ido de la casa y no contesta su teléfono. Pienso en cada cosa que dijo y quiero decirle que no es como ella lo piensa, yo amo el recuerdo de mi esposa, pero no la amo a ella, pues ella ya no existe, por eso no hay con quien competir, no sé si ella quiera escucharme, sé que esto le ha dolido mucho y no quiero ni pensar en perderla por un mal entendido, llamo a la nana de las niñas y le pido que las cuide, que les diga que Lucia no se sintió bien y que la lleve a casa, ellas estaban muy ilusionadas con conocer a los niños y pasar una tarde con Lucia.

Salgo solo en mi auto, pues le pedí a los guardaespaldas que no me sigan, ella salió caminando así que la encontrare rápido si me apresuro, después de unos minutos la veo caminando como algo distraída, se ve muy afectada. Me acerco en el auto a ella y le p**o para que suba, ella me mira confundida.

-Creo que fui clara contigo, de que necesito tiempo, déjame procesar esto por favor -dice alterada.

Su carácter es una de las cosas que más me gustan de ella, tiene un carácter muy fuerte y se enoja con mucha facilidad.

-Sube al auto, necesitamos hablar -digo.

-No subiré a nada, déjame en paz, quiero pensar y estar sola, entiéndelo y respétalo -señala molesta.

-Amor, no seas terca o subes o me bajo y te subo -digo riendo.

-No te atreverías -dice retándome.

Me bajo del auto y la tomo en mis brazos en forma de costal, ella me pide que la suelte y grita con rabia, la subo al auto y se queda mirándome con desprecio.

-Te dije que lo haría, no me mires de esa manera, tú lo quisiste -indico defendiéndome.

Su mirada es de furia, sé que tiene ganas de matarme y yo quiero matarla a besos y caricias, siento temor de besarla y que ella me rechace, sé que esta confundida y lo mejor es aclarar esto de una vez, no soporto esta tensión entre nosotros, esta mujer me ha enloquecido en muy corto tiempo, siento que nada sería igual si ella me faltara.

-te llevare a un lugar muy especial, solo mantén la mente y el corazón abierto -señalo.

Conduzco hasta una casa grande y hermosa que compre hace muy poco.

-Es una casa hermosa, además es muy grande -dice después de mucho tiempo sin pronunciar palabra.

-Esta casa la compre para ti y para mí, es el hogar donde crecerán nuestros hijos -explico.

-Mira Lucia, siempre soñé con tener una familia grande, una mujer que me llenara por completo, antes de viajar a Italia la compre, por que dije que en ese lugar encontraría a la mujer de mi vida con la cual compartiría todo y la amaría hasta mi vejez, y te encontré a ti, Lucia, mi destino es amarte, mi destino es quererte hasta el día de mi muerte, en ti encontré el amor nuevamente, no hay punto de comparación, Carina fue muy importante en mi vida, jamás olvidare lo vivido con ella, no te lo negare, pero aun así, ni por ella llegue a sentirme de esta manera como lo hago contigo, en ti encontré algo distinto, una mujer que con solo ver sus ojos cautivo mi corazón, me enamoraste con solo una mirada, con solo una expresión de tus ojos, ese día vi en ti tristeza, vi a una chica que quería gritar pero no se atrevía, por eso te pido que no compares mis sentimientos por ti, Carina está muerta y para mí solo es un hermoso recuerdo, pero tú eres mi presente y mi futuro, jamás lo pongas en duda nena, te amo de una forma, que esa simple palabra no lo describe, y quiero pedirte perdón si en algún momento te hice sentir incomoda hablando de mi difunta esposa, pero te prometo que no volverá a pasar -expongo todo delante de ella, no dice nada, solo escucha y veo lagrimas salir de sus ojos.

-Por favor, dime que me crees, porque no tengo idea que más hacer para no perderte.

-Claro que te creo, y quiero que sepas que te amo, que todo lo que me dijiste es lo más hermoso que mis oídos han escuchado, gracias por esto, gracias por tu amor, y ya no tengo ninguna duda, ¿quieres casarte conmigo? -dice y me quedo sorprendido sin poder contestar por unos minutos a su pregunta que me tomo por sorpresa pero que regocija mi corazón con una alegría inmensa.

-Yo…claro que quiero casarme contigo amor, pero hubieras dejado que te lo dijera yo y te diera tu argolla -digo entre risas, pues no quepo de la alegría. Se lanza en mis brazos subiéndose a horcadas en el auto, y me besa con esa pasión que nos caracteriza a ambos, es algo loco, pero terminamos haciendo el amor en el auto, fue lo más delicioso y la mayor adrenalina que he sentido, pero no me arrepentiría nunca y lo repetiría mil veces si es con ella.

Después de tan deliciosa faena, vamos a la mansión donde está su familia e hijos, nos damos un baño juntos, le avisamos a su familia la noticia de nuestro matrimonio, todos se sorprende por el poco tiempo que llevamos juntos, pero nos felicitan, Lucia hace una pequeña maleta con las cosas de los bebes, y ropa para ella, porque pasaremos varios días juntos para que los niños se adapten y conocernos mejor.

Llegamos a casa y las niñas nos reciben muy felices, cargan a los bebes de Lucia, ellos les sonríen y juegan con ellas, la tarde se pasa rápido, hicimos un picnic, jugamos en la piscina, en los columpios. La tarde fue de una familia feliz, me siento pleno y dichoso pues tengo lo que siempre he soñado, unas hijas maravillosas, unos hijos adoptivos que amare como a las mías y una mujer que amo con mi vida. Ahora mi única prioridad es proteger a la familia de mi futura esposa, pues los ayudare a dar con el paradero de Vladimir para deshacernos de esa basura y no haya más peligro.

Esta noche le tengo preparada una sorpresa especial, encargue un hermoso anillo para el compromiso no quiero que a mi esposa le falte nada, es el anillo más hermoso que mis ojos han visto, costo una fortuna, pero para mí eso es como quitarle tres pelos a un gato, ese anillo solo se verá hermoso en sus manos.

Nos despedimos de los niños y los llevamos a sus camas a dormir, los bebes esta semana cumplirán su primer año y quiero también hacer una fiesta nunca antes vista en el mundo…