Se encogió de hombros. "No sé. Nunca he estado allí."
"Entonces, ¿quién te está mirando esta noche?"
"Abuela. Ella vendrá pronto."
Nunca había conocido a un niño de seis años tan sensato como Jack Bledsoe. Si hubiera oído su voz por teléfono, podría haberlo confundido con alguien mucho mayor. Tenía un ligero acento, pero nada que ver con el de su madre. Sin embargo, parecía que hablaba algo de su vocabulario.
"¿Primer año en la escuela?" Le pregunté.
—No. Segundo. Voy un poco por delante de algunos de los otros niños.
"No me sorprende", me reí entre dientes.
"¿Qué haces?" preguntó.
Dirijo el departamento de obras de la ciudad. Nos aseguramos de que el agua, el alcantarillado y las carreteras estén en buen estado. Intenté hacérselo fácil.
"Mamá trabaja para la abuela. Es una especi
