Una oferta tentadora, no necesitaba tanta seguridad económica, la vida era difícil pero vivíamos bien, sin embargo.
No puedo negar que la mayor tentación venía del hombre frente a mi.
Nathaniel había realizado sus estudios y se había graduado hace varios años, no antes de convertirse en un guerrero de alto rango a los 19 y ser el general de la armada del pais.
La mano derecha de su tío era su padre hace tan solo 4 años cuando el tomó su lugar y entonces lo conocí.
El uniforme azul índigo resplandecía bajo la luz del sol, su perfil extremadamente duro pero que cuando estaba solo era suave y relajado. Tan atractivo qué no había persona en el país y quizás fuera de él que no le conociera y deseara. Parecía siempre ser astuto y perspicaz, aquel día así como ahora, me habían llamado a la oficina.
"El mejor guía de batalla, nadie en toda esta escuela puede hacer lo que él, algo nunca antes visto, ahora esta realizando sus estudios en creación y ensamblaje"
Me miró con condescendencia, sonrió con amargura.
"pedí un guía de batalla, esta cosita pequeña puede siquiera soportar entrar en la cabina de batalla"
Creo que fue mi respuesta lo ubicó qué lo convenció. "un hombre que se preocupa del tamaño es realmente algo, hay estudios sobre ello, con terapia todo se puede" levanté mi puño haciendo barra.
En estos cuatro años aprendí muchas cosas, Nathaniel es un hombre muy típico, nada demasiado sorprende respecto a otros alfas de su rango dominante, con un instinto fuerte, por su trabajo mucho autocontrol en batalla y…
Le gustan los niños frágiles y lindos.
Un hombre que puede armar un guerrero en 10 minutos y se mete a un laboratorio 20 hrs al día es imposible que le guste, por más omega dominante qué sea, por más bonito que otros lo cataloguen. Solo importa si es un chico tierno y débil.
Yo no entraba en esa categoría para entrar en su radar y solo fui el compañero perfecto para entrar en batalla con él.
No fue hasta que conocí a Rubí qué comprendí eso, incluso en mitad del entrenamiento, todo era dejado a un lado si Rubí necesitaba jugo, salir a comer o ir de compras. Aquel chico de más de 27 qué actuaba como un bebé, qué se retorcía en sus brazos y lo acariciaba. Todos lo sabían, por eso cuando escuché la propuesta me negué. Pero bajo las amenazas comencé a ceder.
La sola idea era bastante tentadora, quizás si pudiera entrar en su vida bajo una lente diferente.
-esta bien pero las condiciones las pondré yo-respondí finalmente.
Nathaniel sonrió. El director y su madre me pusieron cara fea - 3 años, un matrimonio de 3 años, si en ese tiempo no concebimos un cachorro o él consigue alguien más que quiera, firmaremos el divorcio, no quiero arreglos monetarios, prefiero trabajar por mi dinero, en todo caso nadie en el imperio puede superar mis habilidades en el campo, solo habrá otra condición ninguno de ustedes puede interponerse en mi camino sea cual sea el tema, no quiero que intervengan, si lo llegan a hacer habrá seguros. -
-no puedes pedir eso, un hombre que se prepara para tener hijos no puede hacer trabajo de campo-
-entonces conformece con sus rangos bajos y baja coincidencia, es simple, no estoy loco, si llegara a tener un bebé no trabajaría en el campo de batalla, solo seguiría con mi trabajo de diseño -
Los mire - bien, si mis condiciones no les gustan - interrumpieron rápidamente.
-¡no! Estamos de acuerdo, eres muy astuto y bastante cuerdo, me gusta -
-bien, quiero el acuerdo bajo la firma del emperador, me tomo muy en serio mi futuro, una redacción sin trampa, no quiero hostigamiento ni espectáculos, mis conversaciones bajo la ley son todas grabadas, enviadas a un regulador y analizadas, luego se aseguran, si hacen algo contra mi voluntad incluso sus amenazas serán expuestas al público, así que es mejor vayan con cuidado, ahora tengo trabajo, encarguense del resto-
Salí de la oficina luego de una reverencia, fue hasta varios segundos después que los pesados pasos salieron para seguirme. Me detuve al final del pasillo y logre verlo, con el nudo entre las cejas, como leopardo qué quiere matar.
-¡porque aceptaste! - lo analice.-sabes bien que tengo una pareja, no tengo intención de engendrar contigo, jamás, escúchame bien, jamás -
Me miró con su pecho subiendo y bajando, mire a sus espaldas y lo jale a la vuelta del pasillo donde tenía una vista perfecta de la puerta de la oficina.
-nathi-dije a modo de regaño - ¿Crees que es lo que quiero? Me amenazaron, no tengo familia, no soy rico, no tengo altos intereses apenas soy un estudiante - dude - no tengo interés en un matrimonio, finge mejor, no me meteré en tus asuntos, tres años pasarán volando, no tenemos que hacer nada, solo no meternos en la vida del otro-
¿Quién iba a pensar en ello? Que esas palabras serían mi peor martirio.
…
La palabra union puede conllevar a muchas cosas, una unión laboral, una unión de mutuo acuerdo sobre un gusto, un matrimonio. No fue hasta tres meses después de la incómoda conversación de oficina qué se llevó a cabo la boda, mi propia abuela no podía creerlo y aunque a regañadientes, la lleve conmigo a vivir una vida que no soñariamos.
"no te acostumbres abuela, nos iremos en solo 3 años, esto es temporal"
La familia de Nathaniel hizo una hermosa casa con jardín en los terrenos del palacio, cómoda con un sirviente muy joven.
Fue hasta dos meses después de la boda, qué comenzó.
Nosotros seguimos trabajando como compañeros y en esa casa nada se hablaba si no era sobre lo mismo, Nathaniel me trató todo el tiempo como un roomie, nunca cruzamos el umbral de la habitación del otro. Hasta ese segundo mes.
-¡estás feliz ahora! - no entendí lo que dijo cuando entró al taller, sus ojos por un momento flaquearon, parecía haber visto algo que amaba pero luego solo volvió a su voz sería sumergido en la ira. Todo lo que había trabajado por semanas fue tirado al suelo haciéndose añicos. Me encogí en la silla y nuevamente flaqueo retirando su mano un instante - se fue… Eres feliz verdad, rubí me contó todo, que te gustaba, crees que no me iba a enterar, por eso aceptaste el arreglo, creías que algún día me iba a fijar en ti -
-No… No entiendo que dices, nunca he hablado con tu pareja-y no mentía. El era muy receloso con el chico.
-¡no me mientas! El fue el primero en decirlo o jamás me entero, fuiste a decirle que se aleje de mi porque me case… -
Se tambaleó, afirmó su mano sobre los cristales rotos de las pipetas, la sangre escurrió por el escritorio de madera antiguo y también sobre la plancha metálica - nathi, estas sangran¡! - encogí mi mano cuando lanzó un golpe hacia ellas.
-no me toques ¡felicidades! - sonrió con furia - pero escuchame, reitero mis palabras, jamás, escúchame bien - enfatizó - ¡jamás! Me fijaré en ti, un omega qué trabaja como un guerrero, ¿crees que podrías gustarme? Nunca te daría una segunda mirada siquiera, nunca fijaría mis ojos en ti ni siquiera perdido en el alcohol o el instinto, nadie lo haría, a los hombres no les gustan las personas así, toscos y fuertes, quién querría tener a su lado un chico que es como tu, puedes parecer un omega por fuera pero tu personalidad no encajaría con nadie, nadie se fijaría en ti-
Lo miré sin expresión, recogí lo poco de dignidad qué me quedaba y me marché bajo su descolocada mirada, casi arrepentido.
Los siguientes meses fueron así, cada vez las conversaciones disminuyeron, nada diferente a mi vida anterior, el cumpleaños fue con mi abuela y su sirviente.
El día de su cumpleaños, el primero, lo espere con un pastel enorme hecho a mano junto a la cocinera pero fue arrojado frente a los dos al cesto de basura, al día siguiente la cocinera fue despedida y tuve que encargarme de la comida de ahí en adelante.