Amor abnegado

Un hombre y una mujer de la clase media baja de una ciudad cualquiera se unen para engendrar a una niña que llegara al mundo para tener su propia historia. El un hombre alto de aproximadamente 1,75 metros de altura, tiene un tono de piel marrón, un color muy claro, sus ojos son oscuros muy llamativos a la vista. Posee más de 20 años de experiencia trabajando con sus manos, es muy hábil, se desempeña en labores textiles, solo la gente de mucho dinero y poder de su país puede contratar los costosos servicios de la empresa que tiene como empleado a este noble hombre. Ella una mujer que mide 1,65 metros de altura, un tono piel mucho más claro que su esposo, es blanca pero no rubia, sus ojos son marrones muy claros que cautivan a diario a su hombre. Ama de casa, se desempeña en los agotadores trabajos diarios que hay en un hogar común. Lavar la ropa, cocinar a la hora, mantener limpia la casa, atender a su esposo y las otras cosas que esta ardua profesión conlleva. Se casaron cuando ambos tenían 18 años - muy jóvenes- comentaba la gente que los rodeaba. A pesar de los comentarios negativos que surgieron tras su unión dedicaron sus vidas en sagrado e inseparable matrimonio. El deseo de tener hijos surgió al tiempo, ella siempre tomó medicamentos para no quedar embarazada, después de tantas conversaciones junto a su atento esposo decidió parar la medicina y quedar a Merced de un embarazo en este caso muy deseado. Una noche cualquiera, buscando tan deseada maternidad, en la privacidad de su habitación, con unas ganas de desbordantes por procrear, mantuvieron relaciones y sin saberlo por fin aquel vientre estaba empezando a formar aquel feto deseado. Luego de 2 meses empiezan a aparecer los tan anhelados síntomas de una mujer embaraza, ella muy ansiosa se realiza una prueba de embarazo, al cabo de un día busca los resultados, en vez de abrir ella sola aquel blanco sobre espera a su amado para abrir juntos tan esperado resultado. Después de una larga jornada laboral el esposo llega a casa, abre la puerta y dice -Mi amor ya llegue Escucha la voz del hombre de su vida, sale al comedor con una bata rosada, muy larga que le llega a las pantorrillas, trae con sus dos manos un sobre su abdomen un sobre blanco. Sonriendo lo mira, con ojos llenos de ansias. No hace falta que el pregunte de que se trata pues su instinto paternal le indica que es el sobre que le dirá si tendrá la dicha de ser papá o tendrán que seguir intentando. -Ven siéntate vamos abrirlo juntos -dice ella Suelta sus cosas en un mueble, camina a la mesa, se sienta, con las manos sudorosas, el paladar reseco, sin poder decir una palabra, hace un gran esfuerzo y dice - ÁBRELO -Tengo mucho miedo -le responde Tomando sus manos frías con un tono de voz agradable le menciona -Tranquila todo estará bien Ella temblando toma el sobre con sus dos frías manos, abre el sobre, saca la hoja que hay dentro, le estira en la mesa sin leerla y suspira - AAFFF- Su esposo le dice - Leelo y dime si seremos padres- Coloca la hoja frente a su cara y unos cuantos párrafos más abajo del membrete hay unas letras negras que dicen + EMBARAZO Al leerlo se sonroja, salen suaves gotas de sus ojos que caen en la mesa que mojan el sobre. Son lágrimas de alegría. Por fin serán padres. El la abraza muy fuerte mientras le susurra al oído - Seremos padres mi amor- Se dan un beso cargado de tantos sentimiento, un beso como el que nunca se han dado, ni cuando escucharon decir - Los declaró marido y mujer - No, ni cuando eso, es algo mucho más profundo. Abrir aquel sobre será un momento que quedará grabado en sus memorias por siempre, un momento único, que le contarán una y otra vez a la criatura que viene en camino. Por todo el mundo más de 200 millones de personas ese mismo día también recibieron la noticia que serían padres, pero para muchos de ellos no será un momento tan lindo y emocionante como lo fue para esta pareja. Un gran grupo de estos individuos no lo esperaban, mantenían relaciones sin protección y cuando reciben una noticia como esta lo catalogan como un embarazo no deseado, podemos decir que en esta condición es una mala noticia. Existe otro gran grupo que aunque tampoco lo esperaba siempre deseo un hijo pero no podían embarazarse por circunstancias médicas, pero pasó, es una gran sorpresa, una buena noticia, un hermosa bendición. Sea del modo que sea las perejas que decidan tener un hijo empezaran un proceso para que al final traigan al mundo a UNA PERSONA MÁS. Que también vivirá y verá las cosas crueles y horribles que vemos a diario en este mundo. Después de mencionar esta gran realidad sigamos conociendo lo que sucederá con este embarazo.