Capitulo1: Enma (Comienza el juego)
Fecha: 12/02/18
Enma
Toda mi vida fue simple y en gran parte aburrida; pocos amigos, pocos puntos a favor ... Siempre quise mejorar y ser el mejor en algo. No me importaba en qué, solo quería sentir que mi vida tenía algún sentido, esos eran mis pensamientos más comunes, pero no podía llegar a decir que me iba mal en la vida, en mi caminar por la calle saque de mi pantalón mi teléfono celular para así cambiar de canción, pero de pronto el sonido de mi celular interrumpió mis pensamientos. Había una llamada de un número desconocido xx-xxx-xxx-xx. Respondí
- Felicidades acabas de ser elegido para participar en un gran evento exclusivo para personas como tú, agradecemos de ante mano su colaboración - Aquella voz se hizo escuchar en cuanto responder la llamada.
- Disculpe señor no tengo tiempo para esto ¿podría ir al grano? - Dije con cansancio por haber respondido a una llamada de este tipo.
- Todo a su tiempo, las reglas son simples - Dijo aquella voz del otro lado de la línea.
1- Matar está permitido.
2- Enamorarte estará prohibido.
3- No puedes involucrar a personas ajenas al juego.
4- Las alianzas son válidas.
5- Rendirse es una opción.
6- Una vez que pierdas en los juegos de Dios, perderás los recuerdos del evento y esos momentos pasados en el juego serán remplazados por otros.
7- El ganador podrá tener dos premios: lo que su mente más quiera y lo que su corazón más desea.
8- Pierdes si eres gravemente herido, si decide rendirte, si eres asesinado o rompes la regla 2 o 3.
9- Se les fueron asignados habilidades que les ayudarán a ganar el juego y se tienen libertad en su uso pero serán suprimidas una vez termine el juego.
• Sin más que decir, damos comienzo al juego.
Luego de esa rara llamada que parecía ser una broma sin sentido me dirigí a casa tras un largo día de escuela.
Hace un tiempo abandoné el basquetbol al darme cuenta de que no avanzaría y como ese, dejé otros entretenimientos.
Solo deseo encontrar algo que haga mi vida más interesante, sin tener mucha atención a mí alrededor, de pronto, noté que alguien me seguía, logrando darme cuenta debido a que su caminar seguía el ritmo de mis pasos aun cuando disminuía o aumentaba el paso.
Para despistar tomé mi celular y en un intento nulo de que notaran mi comportamiento como algo natural, vi algo extraño que me aprecia en la pantalla. Era una aplicación que tenía gran notoriedad en la pantalla de inicio.
No recordaba haber descargado alguna aplicación en los últimos días. Ésta tenía el nombre de juguemos a ser Dioses, así que al momento de hacer click en ella apareció lo que se notaba como una imagen de Google maps pero esta tenía unos contornos verdes con las que era muy difícil el notar los detalles de las calles. Lo que captó mi atención fue que en ese mapa o radar el centro era yo, y a una distancia corta aparecía otro punto que al tocar daba algunos datos.
• Sujeto: Marco, Habilidad: control del fuego azul, Edad: 18 años
Marco
Es apenas el primer día del juego y ya me encontré con un jugador además de mí. Su nombre por lo que dice el radar de búsqueda es Emmanuel, tiene 17 años y tiene el control de una habilidad que captaba mi atención. Llegó la hora de empezar con la fiesta.
Enma
Cuando vi que el sujeto comenzaba a seguirme, a propósito hice que diera conmigo en un lugar apartado, mi primera opción fue una fábrica abandonada y en cuanto pasé por la puerta rota de la entrada, pude notar que aquel sujeto rápidamente me siguió el paso para luego ir corriendo hacia mí siendo envuelto en una luz azul que emanaba de sus piernas y manos.
Marco
El sujeto evitó mi golpe con gran dificultad, parecía estar sorprendido pues sus pupilas lo demostraban pero por mi parte yo tenía una enorme curiosidad de ver el manejo de su habilidad siendo que él ya había visto la mía, lo que le daba una ventaja en estrategia. Evitó una y otra vez mis golpes, cuando ya estábamos en el centro de la fábrica yo ya había lanzado varios de mis golpes.
– ¿Por qué no me muestras tu habilidad?, esta pelea no será justa si solo esquivas – Mis palabras no parecieron importarle. Su mirar pasó a ser uno dudoso y respondió a mi pregunta.
– ¿Habilidad?, No tengo idea de que quieres decir con eso, eres una persona extraña que me siguió hasta aquí y ahora busca problemas. Supongo que tengo que agradecerte porque hiciste de mi día aburrido y lamentable a uno ligeramente emocionante – Respondió con un respirar pesado debido al cansancio causado por esquivar mis ataques sorpresa.
Sabía que estaba diciendo la verdad pues la forma en la que me lo dijo era una sincera. Él no sabía de su habilidad pero sin duda alguna era un jugador, esta pelea la podía ganar pero algo me decía que ganarle de esa forma no sería justo. No había regla que me evitara tomar ventaja y dejarlo fuera de combate. O matarlo. No, eso no, no iba tomar ventaja de algo como eso. Bajé los brazos y apagué las flamas de mis pies y manos.
– Escucha Emmanuel, este es un juego del que supongo ya estás enterado, mi habilidad es la del fuego, apenas lo descubrí hoy y pensé que los demás jugadores como nosotros ya estarían en combates – Explique postergando nuestra confrontación, el me miro algo amigable y me pregunto algo fácil de esperar.
– ¿Cómo puedo saber cuál es mi habilidad y cómo usarla? – Preguntó.
– Es fácil, basta con la aplicación que se te fue instalada al momento de que empezó el juego – Le mostré mi celular y abrí la aplicación de juguemos a ser dioses. En la pantalla estaba la opción de "datos personales" y allí decía mi habilidad, que era el fuego así de cómo usarla.
Emma
Me sorprendió cuando Marco ya no quiso pelear y en lugar de eso me estaba ayudando a entender el juego, yo también abrí la aplicación en mi celular y en mis datos personales decía mi habilidad que era.……………………………………………………………………………..……..el rayo.
Luego de una rápida explicación, Marco me decía que él podía materializar su habilidad de fuego con solo pensarlo o imaginarlo, pero antes de eso se tenía que activar el poder desde la aplicación en el celular. Ese seguro era para evitar que las cosas se salieran de control con las habilidades.
Sin tiempo que perder desde el celular puse la opción que me daba el abrir la habilidad que en mi caso era el rayo.
Calmé mi respiración y mi pulso, pensé en chispas o rayos que salieran de las palmas de mis manos, pero no ocurría nada más de un simple hormigueo en ellas, me desesperé y perdí la concentración, mi habilidad era muy difícil de controlar.
Marco
Emmanuel no podía materializar su habilidad, lo que lo hacía un blanco fácil para los demás jugadores. Él siguió tratando de materializar su poder pero sin tener éxito.
– Oye ¿qué pasa si me rindo? – Su voz interrumpió mis pensamientos, lo dijo con un enorme cansancio, al parecer su intento de materializar su poder lo había dejado cansado.
– El hombre que nos invitó al juego dijo que si te rendías perderías en el juego y también perderás los recuerdos del evento – Fue mi rápida respuesta.
Si él se rindiera en ese momento el juego continuaría con los otros 6 jugadores y conmigo. No sé por qué, pero tenía la esperanza de que él fuera mi aliado en el juego y así al menos podría llegar más lejos en el juego que si estuviera solo. En fin, si él quisiera rendirse yo no iba a detenerlo.
– Hay dos premios, algo sobre el corazón y otro sobre la mente, ¿significa que podré tener dos deseo que mis emociones elegirán por mi si gano? – Cuestiono viendo hacia mí mientras resbalaba sudor por su frente debido a su agotamiento.
– Así es, pero toma en cuenta que esto es una guerra y no un simple juego, estarás arriesgando tu vida – Advertí los riesgos.
– Eso significa que si gano podría, no sé ¿resucitar a alguien? – Su cuestionamiento me sorprendió, no tenía idea de que su deseo fuera tan grande. Yo esperaría fama, fortuna y buena suerte, pero él aspira algo más.
– Supongo que podrías, pero para eso tienes que continuar con el juego y usar tu habilidad – Fue mi respuesta.
– Entonces daré lo máximo solo por esa persona que espero volver a ver – Emmanuel susurro apenas logrando ser escuchado, en cuanto dijo eso, una sonrisa se mostró en su rostro y sus manos hicieron un ruido chillón que dieron paso a dos flashes de luz color azul que provenían de las manos de Emmanuel. Él no se rindió, él tiene la determinación de ganar. No sé si hice lo correcto en ayudarle a entender el juego porque ahora él era un rival con mayor poder.
Enma
Este juego era lo que estuve buscando todo este tiempo. Los rayos aunque pequeños, ahora podía sentir un poder jamás antes sentido, todo se lo debía al juego y a Marco.
Lo que voy a decirle será algo sincero y es algo que estaré esperando con ansias.
– Oye Marco, las reglas dicen que las alianzas son válidas. ¿Te gustaría tener una alianza temporal hasta que solo quedemos tú y yo? – Sugerí sabiendo que no me volvería a topar con otro jugador que me ayudara de la misma forma a como lo hizo Marco, el me miro con dudas y sudor en él, No sé si eran nervios o algo parecido, pero en señal de aprobación me extendió la mano.
El trato está hecho y nuestro saludo lo comprobó. De nuestras manos en el aire unas chispas emanaron involuntariamente de la mía y un fuego frío de color azul de la suya. En nuestros teléfonos apareció una notificación que dijo alianza Marco / Emmanuel.
- Es un gusto tenerte como aliado Emmanuel - Dije durante el saludo.
- Por favor, puedes llamarme por lo que hacen mis amigos, soy Enma - Respondió sonriendo de una manera amigable, siendo esta alianza no llamada nos volvía amigos.