– Zeus, despierta. … – Zeus, despierta ahora. … ¿Acaso habían tenido tanto sexo como para no sentir absolutamente nada? La irritación en Themis se había acabado. Elevó su mano haciendo que la cama se elevara un poco y luego la inclinó haciendo que ambos cuerpos golpearan el suelo sin aviso previo. Un gruñido y un gritito no tardaron en escucharse en cuanto tocaron el suelo duro. – Qué mierda, quién se atreve a… La mirada de un enojado Zeus se alzó con la intención de castigar a quien lo haya despertado de esa forma brusca, sin embargo, se encontró con nuestra mirada desprovista de cualquier sentimiento, lo sabía, Themis ya no le dirigía ninguna mirada de amor incondicional y eso pareció confundir a Zeus, quien luego miró su propio cuerpo y luego volteó a mirar el cuerpo desnudo de He

