—Quiero besarte, Emma... Desde hace mucho tiempo... Y no me quedé satisfecho con ese tonto beso de la olla.— Es sincero. Ella cierra los ojos y vuelve a abrir los mismos. —Jay...— Titubea. Está esperando encontrar alguna mueca de burla o algo que le diera la pauta de que él no esta hablando de verdad. No obstante, en cuanto clava, nuevamente, su mirada en su rostro se da cuenta de que él no está bromeando de ninguna manera. —Necesito volver a hacerlo, miss universo.— Pide tragando saliva, con una mueca de dolor en su rostro. Su acercamiento se hace cada vez más oportuno, para darle la pauta de que lo que está diciendo es la verdad, y que sí ella no hace algo al respecto, lo más probable es que comience a besarla sin su consentimiento. Por más que ahora mismo está esperando justamente

