CAPITULO 03

2537 Palabras
Astaroth... No puedo evitar dejar escapar una sonrisa al escuchar el modesto sonido que emiten los tacones de Dara, sé que es ella pues es la única que no sé detiene en el mostrador donde se encuentra Doris para anunciarse. Sus pasos son firmes y confiados me la imagino caminando sobre el mármol del pasillo con esa seguridad que la caracteriza atrayendo la mirada de los curiosos. Luego de nuestro divorcio nos hemos vuelto muy unidos, llevamos una relación un tanto divertida y agradable, para mí ella siempre será mi patito feo y el juego de las propuestas pecaminosas entre nosotros nunca pasará de moda. "A mí me encanta poner a volar mi imaginación sin necesidad de explicar que es un juego y a ella le Fascina poder rechazarme de mil maneras diferentes, sin el sentido de la culpa". En ese momento abre la puerta sin tocar pues sabe muy bien que es justo lo que estoy esperando que haga. —¿En serio As? Otra vez estás viendo porno en la oficina. —Dice en voz alta para que la escuchen, mostrando una perfecta y blanquisima sonrisa. —Llegaste justo en el momento indicado cariño ya viene mi parte favorita. —Le respondí en forma picara señalando mi polla y haciéndole una invitación para que se siente sobre mis piernas. —Tendrás que ofrecerme algo más apetecible para que me siente allí querido. —Sonreí ante su ingeniosa respuesta, mientras cerraba la puerta detrás de ella y yo seguía con nuestro juego. —No sabes lo que te pierdes patito, soy un hombre exitoso, bien parecido, enérgico y con un apetito s****l incontrolable. —Dije acentuando ésta última frase y moviendo mis cejas de arriba abajo, ella se sentó frente a mí y sus labios estaban algo curvados, no quitaba sus ojos de los míos, podía ver el destello de diversión en estos. —No sabía que el gran Astaroth Lennox estaba tan desesperado por algo de compañia, deberías registrarte en una de esas páginas de línea caliente y tal vez consigas algo de sexting que te ayude... —Dijo con tono morboso y yo no aguanté más dejando escapar una fuerte carcajada. —Muy bien patito por esta vez ganaste, a qué debo el honor que estés en mi oficina.. —Ella sonrió para luego estirar su mano y entregarme un folder.. —Sabes que estoy haciendo reclutamiento para la dirección de Marketing dentro de Har&Lex, estoy en busca de algo fresco y nuevo As. —Si, si lo recuerdo y te apoyo en eso, pero no entiendo que es lo que te preocupa. —Tengo una persona en la mira para este puesto y quiero asegurarme que cuando ésta llegué se sienta cómoda y que tú también lo estés.. —Se veía un poco nerviosa, no veo porque tanto misterio con respecto a la persona. —Muy bien me encargaré de eso, el verdadero peligro no es conmigo Dara, si se trata de una chica guapa será con Baltazar, pero lo mantendré alejado así que no te preocupes. — Ví que seguía tensa sus ojos vacilaban por decirme algo, no entiendo su actitud. —As, sé que no le va a pasar nada por Dios, no es por eso que estoy así me gustaría hablar contigo sobre Juno. —Ves ya salió el peine sabia que estaba rara, dejé lo que estaba haciendo y adopte mi postura de negocios. —Dara creo que te lo he dicho más de mil veces, lo que pasó con Juno ya fue hace mucho, déjalo estar... Ella y yo no somos compatibles no quiero entrar en su vida y complicarlo todo.. —Dije las palabras, pero la verdad es que si me moría por saber de mi hermosa ninfa. En este tiempo no les permití a ninguno de los dos hablarme sobre este tema, pues sería muy difícil para mí contenerme y no ir a buscarla. Juno apenas está comenzando la vida y yo no podía truncarsela con mis problemas existenciales no es justo para ambos, ella necesitaba viajar, conocer chicos de su edad, salir con amigas y divertirse no estar lidiando con mi doble vida. A pesar de que le pedí que avanzará y buscará un chico de su edad sentía miedo de saber que siguió mi consejo, porque en todos estos años mi mente se quedó atascada en el recuerdo de la noche en que la hice mía y en que por un instante fue mi mujer... "Por eso prefería mantenerme alejado". —Veo que entrar en la vida de una mujer no es tu fuerte, pero bien que entrar en sus camas si se te hace fácil y no me mal interpretes no te juzgo pero estás bien tonto As... "No digas después que en todos estos años no traté de contarte". —Su tono era de molestia había fallado nuevamente con el tema de Juno, pero era lo mejor en estos momentos no creo ser bueno para nadie, mis demonios pesan demasiado. Ya lo hice todo mal con Dara en el pasado... "Si acaso en el futuro tuviese una nueva oportunidad de amar, me gustaría hacerlo bien" —Es un riesgo que voy a tomar patito. —Le dije y dí el tema por zanjado, viendo como ella dejaba escapar un fuerte suspiro. ****************** Suena el despertador como cada mañana, luego de mi rutina diaria de cardio me preparé un café bien cargado y me dispuse a revisar mi móvil, cómo todo los días Martha mi ama de llaves se encarga de mi desayuno mientras confirmé los pendientes de mi agenda para el día de hoy tratando de adelantar trabajo. Una vez me encuentro en Har&Lex pasé directo a los ascensores, las puertas están por cerrarse pero las detuve al visualizar una pequeña chica en recepción, llevaba puesto un traje gris que la hacía lucir muy bien, mis vista no se apartaba de su figura, ella parecía estar concentrada en su móvil, estaba de espaldas y mis ojos se deslizaron de inmediato hacía sus piernas un poco más allá del dobladillo de su falda. "Se ve deliciosa" aclaré mi garganta y me sentí extraño por los pensamientos repentinos que surgieron en mi, le dí otro vistazo a su trasero mientras que las puertas se cerraban y me gustó la forma en que se moldeaba su atuendo, parecía hecho a su medida.. > Dejé el morbo con la chica y una vez que estuve en mi oficina me dediqué a mi labor. —Doris por favor cancela mis citas hoy, atenderé a unos proveedores y estaré en el taller probando la nueva máquinaria. —Le dije por el teléfono a mi asistente. —Muy bien Señor Lennox. — Rodé mis ojos por tanto formalismo, Doris llevaba años trabajando conmigo, le había pedido que me llamara por mi nombre pero ella insistía en no hacerlo. —Doris otra cosa... ¿Que sabes de las entrevistas para el departamento de Marketing y digitalización? Dara habló contigo sobre eso. —Era una posibilidad que la pequeña chica viniese de parte de Dara, hace una semana ella me notificó que tenía en la mira una persona para este puesto. —No señor, la señora Dara dejó Instrucciones a Melissa Warren en Recursos humanos sobre las personas que optarán por el puesto pero sólo eso, hoy en la mañana salía de viaje junto al señor Johnson no me dió fecha de regreso, ya tendría que consultarlo con su asistente. —Mi ceño se frunció de inmediato Dara salió de viaje como es eso posible, no me informó nada. —¿Un viaje? Te dijo hacia dónde. —Pregunte de inmediato. —No sabría decirle señor, sólo se que es algo familiar está bajo estrés y quiso unos días libres. —Esta bien, continúa con tu trabajo después me comunico con ella. —Es extraño que ni Marcus o Dara me notificarán, pero supongo que desean pasar un tiempo en familia. —Ok señor. Después de eso mi día se redujo de tal manera que no me fijé en nada más, supongo que la hora de almuerzo ya pasó hace mucho, decidí subir a mi despacho para organizar mis cosas por un momento sentí curiosidad de ir hasta las oficinas de RR HH, para obtener información de la pequeña y muy sexy Oompa-Loompa pero lo descarté pues sería muy raro. Creo que nunca nadie me ha visto por allí. "No sé ni siquiera porque pensé en ir hasta allá". Veo por los enormes ventanales las nubes grisáceas me apresuro para salir antes de que comiencen las precipitaciones, Doris hace más de una hora que se marchó, no me importa trabajar hasta tarde en Har&Lex pero hoy iré hasta Inccubus así que saldré temprano, es muy probable que Marcus dejara todo listo en manos de Ronnie pero nunca está de más echar un vistazo. Al hacer mi trayecto para llegar a mi auto me tope con Erika Gill y me sorprendió mucho verla después de nuestro desastroso encuentro. —Señorita... Erika no pensé encontrarla por aquí. —Mis ojos se pasearon por su rostro y ¡Diablos! Todo su maquillaje estaba corrido parecía que tenía frente a mí un panda bebé. No me mal interpreten Erika es una mujer hermosa pero justo ahora parece recién follada.. "Y que follada le dieron" porque hasta su cabello estaba algo desordenado, traté de no hacer ningún comentario pues ya tenía fama de ser un desgraciado, no quería que su odio por mí se intensificara más. —Señor Lennox, sólo vine a traer un informe de cartera a finanzas, ya voy de salida. — Respondió con mucha formalidad, relajé un poco mi gesto sin que se notará lo incómodo del momento. —Esta bien me parece perfecto yo también voy de salida si quieres te llevo. —Ella negó con su cabeza lo que para mí fue un alivio pues no estaba seguro de limar las asperezas entre nosotros, prefería mantener distancia. —Ando en mi auto no te preocupes, pero igual si me puedes acompañar hasta el. — Asentí dándole paso por cortesía hasta el ascensor. Sólo me toma cinco minutos llegar hasta mi auto así que no me molestó aceptar la propuesta de Erika, voy sumergido en mis pensamientos, cuando soy interrumpido por el choque de un cuerpo. —¡Ay Carajo! Solo esto me faltaba, disculpe señor venía entretenida y no lo ví... —Dijo aquella chica mientras se agachaba para levantar sus cosas que volaron por el aire, automáticamente imité su acción para ayudarla. —Tranquila, también fue mi culpa venía distrai... —Mi vista quedó fija en esos preciosos ojos que tanto me atormentaban. Mi boca se abrió ligeramente pero tardé varios segundos en pronunciar su nombre debido a la impresión. —Juno.. —Su mirada estaba fija en mí, en sus ojos no había sorpresa pero si estaba un poco consternada luego voltea la vista hacia Erika y su expresión cambió a una de molestia frunciendo su ceño por unos segundos.. —Es bueno saber que el Señor Astaroth Lennox aún recuerda mi nombre.. —Su tono de voz no fue para nada amable, al observarla bien me dí cuenta que era la misma chica de está mañana.. Me sorprendió mucho su cambio se veía distinta a lo que yo recordaba, con curvas acentuadas que la hacían ver mas madura, indudablemente estaba preciosa y yo me quedé sumergido admirando cada detalle de su rostro, sobre todo sus pequeños y carnosos labios. —P-pero.. ¿Cómo haz estado? Porqué estás aquí nadie me dijo que habías regresado. —Dije con mi voz entrecortada y algo de ternura, ignorando su actitud poco amable. —Vine a una entrevista. ¿Acaso Dara no te lo dijo?. — Mis ojos se abrieron de forma exagerada. "Ésto era lo que Dara quería contarme". Me quedé en silencio unos segundos y allí lo entendí todo el viaje inesperado por motivo de descanso no era más que una huida... ¡Qué cobardes! "Sólo se marcharon porque sabían que Juno llegaría a mi empresa" Esto es obra de la patito estoy seguro... Sin darme cuenta solté un suspiro que se extendió más de lo previsto, apreté mi mandíbula mientras asimilaba el hecho que de verdad la tenía frente a mí. —No estoy aquí por ti, ni siquiera sé cuánto tiempo me quedaré en el puesto, así que ni te preocupes porque no voy a molestarte.. —Me quedé estupefacto por su reacción a la defensiva, pero luego recordé a Erika y su desastrosa imagen. —Juno no es lo que piensas yo... — Tomó sus cosas con una velocidad impresionante. —Que te jodan Astaroth.. No me interesa hablar contigo.. —No me dejó decir ni una sola palabra, mis ojos no se apartaban de su figura que cada vez era más lejana. ¿Que pasó con ese pequeño ángel lleno de timidez y pureza? — Ojalá hubiese un botón de reinicio... Para comenzar todo justo donde lo habíamos dejado esa noche. ¿Parece ser que Juno también me odia? "Que suerte la mía" la comisura de mis labios comenzó a elevarse... Mientras que una llama en mi pecho que creía extinta se encendió, seguido de una sensación de déjà vu. "Ésto ya lo había sentido una vez" La adrenalina fluía por mi venas y los vellos de mi cuerpo se erizaron por completo, no pude esconder la sonrisa lobuna que se formó en mi rostro.. Esa rebeldía y su resistencia hacía mí, me excito en gran manera, haciéndome sentir vivo. —¿Estas Bien?. —Pregunto Erika con una expresión seria en su rostro mientras observaba la misma dirección por dónde Juno se había ido. —Estoy más que bien... —Dije mientras recuperaba el aliento. Más tarde en el Club mi mente estaba un poco retraída, pensaba en mi pequeño angel. Cuando la conocí era una chica guapa pero ahora se veía deslumbrante su cabello castaño caía sobre sus hombros su piel pálida y rostro redondeado le daban un aire tan natural, irradiaba belleza y para mí era perfecta, sólo deseaba besarla de nuevo, sentír su piel, su aroma. ¡Joder! estaba ardiendo por ella. Bajé la mirada fantaseando con que la chica que se encontraba arrodillada ante mi fuese ella, tomé aire y me obligué a concentrarme en lo que estaba haciendo, las exhibiciones en Inccubus eran parte del entretenimiento, dí un sorbo a mi bebida y me percaté de lo seca que estaba mi garganta, muchas veces disfrutaba mirar y hasta podía unirme a ellos si quisiera pero sería una tortura pues mi mente y mi cuerpo anhelaban estar en otro sitio. Me levanté lo más rápido que mi cuerpo me lo permitió, abroche mis pantalones sin importar que la chica estuviese en plena felación, le hice seña a cerbero para que se encargará del lugar por está noche. Lo había decidido.. Juno regresó a mí y sin importar cómo, está vez no la dejaría escapar, sonreí al recordar esa mirada furiosa llena de coraje y un escalofrío recorrió mis abdominales, haciendo que mordíera mis labios con fuerza para retener el deseo incontrolable... "Esto será muy divertido mi pequeño angel"
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