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515 Palabras
Una semana después.
Estaba mas que nerviosa, esta tarde conoceria a Damian, quien seria Thomas.
Después de tantas investigaciones por parte de Steven habia aceptado mi loca idea.
Solo un par de semanas como pareja y después una rotunda separación.
Mi oficina se sentia pequeña, daba vueltas por toda ella.
-¿Estas lista?- no supe en que momento entro Steven por la puerta de mi oficina y con Amelie en brazos, la cuál se había adaptado tanto a Steven que apenas se apartaba de ella, lloraba como si no hubiese un mañana.
Y reconocia qur Steven hacia un magnifico trabajo con ella.
-No, estoy algo nerviosa- admiti.
-Lo se, pero estare ahi contigo- en cierta manera Steven y yo terminamos en algo tipo como una amistad.
Habiamos salido un par de veces esta semana y conversamos más de lo normal.
Mensajes de texto, llamadas, charlas en el jardin entre demás actividades.
Ya era como mi mejor amigo.
-¿Crees que debamos irnos ya?- mire mi reloj de mano.
-Aún es temprano, tranquila todo saldra bien- apreto mi hombro en señal de apoyo.
Solo pude ver sus ojos y pensar en la calma que transmitían.
Todo fue silencio hasta que Amelie desperto y lo mas probable es que tuviese hambre.
-Le doy de comer y nos vamos- dijo sentandose en el sofá del fondo.
Justo donde descansaba cuando tenia un dia estresado.
Aunque últimamente todo era mas relajado.
-Dame, te ayudó- vi como trataba de preparar el biberón.
Tome las cosas y comence a prepararlo.
-¿Has pensado en casarte algún día?- su pregunta me tomo por sorpresa.
-¿A que te refieres?- no es que no entendiera la pregunta si no como si me plantease que me casara con Damián.
-A eso simplemente el hecho de casarte...-
-Si tratas de preguntar si le propondre matrimonio a Damian estas equivocado en cierto caso de que la Trabajadora social lo solicite descartare totalmente la idea ya vere que hacer en ese momento- respondi tranquila.
-Ya veo- tomo el biberón y se lo dio a la pequeña.-Solo me preocupo, tu padre debe de hacerlo y el me lo transmite- sonrió.
-Si, entiendo a mi padre ha pasado por mucho y que solo me tenga a mi como familia me hace sentir mucha responsabilidad hacia el...- y sin pensar agregue -Aunque ahora tu y Amelie forman parte de nuestra familia-
Fui consciente del valor y peso que tenian mis palabras.
¿Se sentiria de esa forma Steven para con nosotros?
Solo esperaba que si.
-Gracias- dijo de repente sacandome de mi trance.
-¿Por qué?- lo mire.
-Por aceptarme en tu familia, eso es bueno, casi no paso tiempo con la mía y estar con ustedes me gusta- una sonrisa se poso en su rostro.
-Igualmente a ti, por venir a alegrar todo- y era verdad habia pasado tanto tiempo en casa con una rutina que justo ahora se rompia y podia ser libre de ser yo.
Una chica extrovertida, joven y con una ideas poco usuales.
Y con algo creciendo dentro de ella....
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