Natasha respiraba con rapidez mientras tiraba al suelo cada prenda que había guardado con tanto cuidado en la maleta, su corazón latía con fuerza, impulsado por una mezcla de furia y desesperación, al principio estaba dispuesta a trazar un plan para escapar fingiendo que iba a casa de su tía, pero al saber que por culpa de Alexei su padre le negaba ir a Sicilia, le causo mucho más coraje. Después de arrojar la última prenda, se quedó un momento mirando la maleta vacía, como si fuera un símbolo de su resistencia, luego, se enderezó, pasó una mano por su cabello y salió de su habitación. Con pasos decididos, bajó las escaleras, a medida que lo hacía, su mente trabajaba frenéticamente, pensando en su próximo movimiento, había decidido que no podía quedarse en su habitación esperando el próxi

