Estaba en la sala de espera del ginecólogo, Mónica se veía feliz, y el estaba por demás fastidiado. No hubiera querido venir en ningún momento, pero ella fue demasiado insistente, además se negaba rotundamente a interrumpir el embarazo.
Estaba muy molesto, eso nunca fue algo que quisiera, era cierto que pensó en un hijo, pero Elizabeth siempre dijo que no era el momento.
El médico estaba retrasado con la consulta, por una supuesta urgencia y él estaba desesperado por irse, tenía asuntos que atender, si esto no se movilizaba rápido quizás tendría que dejar a David ocupando su lugar.
David, lo sustituía en muchas de sus labores cotidianas porque nunca quiso involucrarse en cuestiones de altos mandos a pesar de ser su mano derecha. Nunca se quejaba de tener que hacer de chófer, ir por el s
