CAPITULO I
MINHYUK…
Me encontraba un día más en la oficina lleno de mucho estrés a causa del trabajo, ante todo soy uno de los empresarios más importante de Corea Del Sur, pero más que eso estaba desesperado. Tenía conmigo una ardua desesperación porque los días siguen pasando y yo aún no podía tener a Ji Woo en mis manos, Esa hermosa chica que me volvió loco desde hace un tiempo. Pero el problema es que ella se hace la difícil, la conocí un día en un bar al que fui con mis amigos. Desde el día en que la vi no he podido sacarla de mi cabeza.
Por otro lado JI WOO _
Durante varios días cada vez que salía me sentía súper incómoda e insegura, era muy extraño, pero algo en mi mente me decía que alguien me estaba siguiendo; sin embargo al voltear nunca estaba nadie ahí, me preguntaba si quizás era el estúpido de Minhyuk, sin embargo decidí preguntarle y negó ser él ofreciendo incluso ayuda con sus guardaespaldas. Cosa que claramente no acepte, ya que sería un pretexto más para que insistiera con que fuera su mujer.
¿Se preguntarán de qué hablo?, pues para no dar tantas vueltas les contaré un poco sobre mí y el estúpido Minhyuk…
Yo soy PARK JI WOO nací en Latinoamérica, pero mis padres y toda mi familia es coreana, antes de nacer mi padre tuvo que trasladarse a Latinoamérica por asuntos de trabajo y con ello fue que nací en dicho lugar exactamente en Colombia, dure los primeros 5 años de mi vida en ese lugar hasta que mis padres se divorciaron y tuve que venir a Corea con mi padre, se preguntaran y mi madre?, la verdad no lo sé ni me importa esa mujer me dejó tirada, se fue y jamás he sabido de ella. Actualmente tengo 19 años y trabajo en un bar. Lo cual me ayuda para poder pagarme mis estudios y tener que comer, pues mi padre con el paso del tiempo se volvió un alcohólico inútil que solo se queja por el abandono de la que se supone es mi madre.
Por otro lado hace unos dos meses trabajando en el bar conocí a ese chico LEE MINHYUK mi dolor de cabeza, un día cualquiera entra él con sus amigos a los cuales ya conocía, JAY, MARK, WOOJIN. Todos eran súper conocidos por ser de los hombres más ricos del país y por supuesto no podía faltar el que era el líder de dicho clan de galanes con miles de billetes, nada más ni nada menos que MINHYUK uno de los empresarios más importantes de COREA DEL SUR por no decir que el más importante y rico. Este hombre a sus 28 años era el dueño de varias empresas de tecnología y autos de lujo.
Tenía el poder suficiente como para tener controlado a casi todo el país y ni qué decir de su temperamento posesivo y orgulloso, desde el día en que llegó a este bar no me quita los ojos de encima y ha vivido insistiendo en que quiere que sea su mujer. Según él está enamorado de mí y soy la chica perfecta para él, hasta el punto de que dio la orden de que yo sea la única que atienda la mesa donde se sienta él con sus amigos. Pagando el triple por ello, mi único beneficio aquí es que ahora gano más en este mugroso bar solo por soportar su presencia.
JI WOO _
era viernes por la tarde ya daban exactamente las 4:00 pm luego de salir de mis clases decidí tomar el transporte hacia la casa aunque la universidad no quedaba tan lejos de donde viva estaba muy cansada para caminar y sabía que al ser viernes sería un día más que pesado, pues era este el día en el cual el bar solía ser más visitado incluyendo los sábados y sí claramente tendría que soportar al arrogante de Minhyuk más de la cuenta.
Llegue a mi casa y al entrar encontré a mi padre tirado en el sofá; este hombre cada vez está peor no hace nada con su vida ni ayuda en nada, todas las noches sale a tomar y nunca me doy cuenta de a qué hora llega hay días que ni siquiera lo veo, desde que cumplí 13 años no se hizo más cargo de mis estudios ni nada que tuviera que ver conmigo, se la pasa simplemente tomado y gritándome cada vez que podía. Para él yo era la culpable que mi madre se haya ido y lo deje solo, entre y me dirigí a la cocina para preparar algo de comer; sabía que si mi padre despertaba y no encontraba algo comenzaba a insultarme y hasta pegarme. Así es ese hombre que decía ser mi padre más de una vez me había puesto una mano encima dejándome incluso morados en el cuerpo.
Terminé de preparar todo y recogí el desastre que este hombre tenía, tardé más o menos hora y media en ordenar todo. Ya eran casi las 6:00 luego de comer subí rápido y me arregle para estar lista antes de irme al bar pues tenía turno a las 8:00 pm, aunque a esa hora no había mucha gente tenía que tener todo listo para cuando el ambiente empezará tornarse pesado de lo contrario sería un caos atender a los clientes y más estando Minhyuk ahí presente, una vez lista mire la hora y aún faltaban 40 minutos. El bar quedaba cerca como a unas 5 calles para ser exactos por lo que me iría caminando hasta dicho lugar, decidí poner una alarma para despertar 10 minutos antes y tomar una corta siesta…
En el bar…
Ya hace media hora que había llegado al bar, mientras caminaba como de costumbre sentí que alguien me seguía por lo que trate de apresurar el paso, realmente cada vez estaba más asustada, aunque a veces intentaba convencerme de que solo eran ideas mías todo era muy extraño y realista. Trate de quitar esos pensamientos por un rato y concentrarme en el trabajo, pero no sé que era más preocupante si el sentir que me vigilaban o el hecho de que ya iban a dar las nueve de la noche y ni Minhyuk ni sus amigos aparecían, no es que me importe mucho si ese idiota viene o no. De hecho un día que no venga sería un completo día de paz para mi ser, pero como no todo puede ser perfecto, verdad? Si justamente venían entrando Jay, Mark y Woojin. Pero y Minhyuk… que raro que este no viniera con ellos, siempre estaban juntos y lo más raro es la hora en que llegaron. Desde que el insoportable se obsesionó conmigo ellos se presentan en el bar luego de salir de sus trabajos, por lo regular llegan incluso antes que yo muchas veces. No le di más vueltas al asunto y me dirigí hasta su mesa para ofrecerles algo de tomar, de igual manera si no lo hacía la señorita Ross vendría y me obligaría, ya que atenderlos a ellos es mi trabajo exclusivo por decirlo de alguna manera.