Es un idiota ¿Cómo fue capaz de tratará obligarme a tener sexo con el? Que idiota, si lo hemos hecho, ¿pero ¿Cómo unas 2 veces? Y es algo incómodo. Bueno, en fin, en parte sé que podría estar poniéndome los cuernos con la tal Lea, así que, porque yo no podría hacerlo con Hades, creo que aún no se ha ido. Salgo de mi habitación y bajo las escaleras lo veo sentado en el porche. Siento el horroroso olor a cigarrillo. Me siento al lado de él y él me mira de soslayo y bota el humo.
-Eso va a matarte
Digo yo mirando hacia el frente
-De algo nos tenemos que morir no?
-Si es cierto, pero eso aumenta la probabilidad de que te den muchas enfermedades y que te mueras antes de la edad que deberías
-Piensas mucho las cosas, si fumo es mi problema, y lo hago cuando me siento estresado
-Y porque estás estresado?
Me mira y sonríe un poco, como siempre
- Siempre eres así?
- Así como?
- Que te metes en la vida de los demás y lo cuestionas todo
- No me meto en la vida de los demás H, solo es curiosidad
- Bien como digas
- Bueno igual si te molesta mi presencia, me voy, no debí haber bajado -Me pongo de pie- y no me interesa tu vida Hades es tan insignificante como la de los demás
Me volteo para entrar y él me agarra de la muñeca. Se pone de pie y me besa. Yo me despego de él al sentir el sabor tan desagradable del cigarrillo. Hago cara de seco y él se ríe. Cala en el cigarrillo y echa el humo en mi cara. Yo al respirar toso y también me rio, lo miro a los ojos y me pierdo.
- ¿Te gustan?
Me despabilo
- ¿Mm?
- ¿Que si te gustan?
- ¿El que?
- ¡Los ojos niña! MIS ojos
- Ahhaha nop, parecen verde caca
Él me mira como si estuviera loca y yo me rio un poco
- Eso es mentira
- ¡Ahh! ¡¿Y te ofendes?! - Suelto una carcajada y él suelta una risa es una risa no es una sonrisa, es una risa ronca y espontánea- ¿Es acaso eso una risa Hades? El chico serio riendo
Se pone serio y voltea los ojos
-Bien está bien lo siento muchachote... Oye ¿de dónde eres?
Me mira poniéndome atención
-De aquí, ¿por qué?
-Jmmm no parece
-Y tú, italiana
-Pues sí.
Nos quedamos en silencio mirando al cielo, el tira el cigarrillo al piso y lo aplasta. Tengo sueño, bostezo y él voltea a verme.
-Oye, ¿siempre te da sueño? Duermes mucho
Lo miro raro
- ¿Y tú como sabes eso?
En su cara parece como si le fuese pillado algo, que te traes H
- Es que, siempre tienes cara de sueño, solo eso
Voltea hacia otro lado y se cruza de brazos, parece que estuviese mintiéndome.
- Jmm no te creo, pero bueno ya que si tengo sueño.
- Bien, vamos
- ¿Vamos?
- Si vamos
Veo la calle sola y cuando volteo ya está agachado cogiéndome de las piernas para cargarme en su hombro como costal.
- ¿Oye qué haces?
- Te llevó a mi cuarto
- ¿¡Que!? - Me sonrojo un poco y me impresiono - Oye H, tienes un buen culo
Siento las sacudidas de su risa
- Ya eso lo sabía
- ¿Entrenas algo?
- Mm....- Silenció- no, pero me gusta ejercitar mucho, es liberador
- Mmm ya. Voy a vomitar.
- Ya llegamos
Me baja y me pone en los escalones de la entrada de su casa. No sé porque no me opuse a esto
- Hades
- Por Dios y ahora?
- Tengo sueño
- Bien, vamos
Me coge de la muñeca y me arrastra escaleras arriba, abre la habitación y veo la cama, corro como puedo a ella y me tiro. Ah que sabrosa. Cierro mis ojos y allí quedo
H P.O.V
Bien no sé porque la traje aquí, no dejo que se queden, ni si quiera tengo sexo aquí. ¿Qué está pasándome? ¿Qué está pasando? Bien necesito salir a hacer negocios. Le doy una mirada y salgo ya listo con mi ropa de correr y mi bolsa deportiva llevando la mercancía en esta. Corro por las calles hasta llegar al bar de Manny y entro, el guardia de seguridad ya me conoce así que me deja pasar; en cuanto entro veo a varias chicas tanto empleadas como solo visitantes mirándome con lujuria. Calma señoritas
-Hola Candy y Manny?
-Hola amor, está en su oficina, ya sabes negocios
Se acerca a mí y me besa y yo le correspondo, Candy es exquisita, rubia unas buenas tetas unas piernas infinitas, pero ya lo nuestro no dio para más. Fue mi algo como mi novia. Por suerte son muy intensas. Llego a la puerta roja y entro sin tocar veo a una chica frotándose con él y yo solo carraspeo para llamar su atención, la señorita se voltea asustada y se levanta me mira y me repasa, se relame los labios y sale.
- ¿Que tal muchacho?
- Tu mercancía
Le tiro la bolsa de drogas en su mesa
- Muchacho dime que no la has cambiado
- Sigue siendo igual Manny
Abre la bolsa y luego saca un paquete lo rasga, saca un billete y echa el contenido en este, yo solo lo miro serio. Lo inhala y echa la cabeza hacia atrás
- ¡Hu!
Se levanta de su gran sillón saca un buen fajo de billetes y me lo entrega, bien es lo acordado, me largo.
- Muchas gracias, hermano
-De nada, y llámame cuando te haga falta, ah y no soy tu hermano
-Calma, calma, oye chico no te gustaría una nena...
-No, no puedo hoy, gracias
Salgo y veo a Candy esperándome, viene a mí y me vuelve a besar y yo también a ella, agarro su nuca y le beso el cuello. O tal vez si Manny, aunque Candy no es una prostituta de aquí ni trabaja aquí, me la comeré joder claro que lo haré.
Ella me hala de la mano y nos lleva a una de las habitaciones, esto es sin preparación, solo quiero desatar esta abstinencia que tuve hoy, me bajo el pantalón y ella me pone un preservativo, y comienza a chupármela, yo tomo su cabello la alzo y la tiro en la cama la pongo en cuatro, no me gusta besarlas mientras tengo sexo, y la embisto sin piedad, bien muy bien.
Ella grita y jadea mi nombre yo solo pienso en los labios regordetes que me sacan de mis casillas. Joder voy a venirme, doy una ultima estocada y me vengo. Me quito el preservativo lo tiro a la basura y me voy escuchando a Candy decirme que me quede. Pero no, no me quedo a dormir con nadie. Aunque creo que hoy será la excepción.