LA DIOSA LUNA

MI ÚNICO AMOR

CAPÍTULO SEIS.

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MI ÚNICO AMOR.

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^•ﻌ•^ฅ?ฅ^•ﻌ•^ฅ Narra Neferetฅ^•ﻌ•^ฅ?ฅ^•ﻌ•^ฅ

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Hemos pasado esta última semana más juntos, ir y venir no es problema, pero para ser precavida siempre tomo caminos diferentes.

Vernos a diario nos ayuda a conocernos mejor, ya que varias horas al día pasamos hablando y soñando con poder estar juntos y todas las cosas que podremos hacer. Esperar ansiosa al amanecer, llegar a su lado, besarnos, hablar sobre nosotros, besarnos, y hablar, es simplemente perfecto. Hemos hecho muchos planes en tan poco tiempo, pero soñar en grande me hace feliz en todo momento, en especial porque en todos ellos estamos juntos.

Este tiempo ha sido suficiente para lograr que separarnos cada día sea más difícil, cada vez necesito más de él, y mis sentimientos han crecido tanto que se han fortalecido; En este momento estoy segura de mis sentimientos por Ricardo así que hoy estoy preparada para entregarme al amor, a este vampiro que calma mis latidos con solo sentir sus manos en las mías.

Estoy un poco nerviosa pero es algo que quiero hacer, mi padre ha estado tan ocupado últimamente que ni siquiera me presta atención, él cree que todo el día la paso encerrada en casa; No se imagina nada ya que siempre huelo a tierra y menta porque la sembré en el patio, mi padre jamás imaginaria que el aroma que está en mi es del hombre del que me eh enamorado tan profundamente que si algo le pasara moriría solo de tristeza; Y no quiero imaginar algo así ya que jamás pasará, mi padre puede ser muy gruñón pero jamás mataría a un vampiro. Hemos sido como familia desde siempre con la otra especie y aún confío en mi padre y que dentro de él, vive el mismo padre que me vio crecer.

Pasa la mañana en la casa y yo estoy preparándome para este día que será tan especial para ambos, por fin nos entregaremos uno al otro; Sonrío al pensar en eso y por fin llega la hora. Entre mi ropa tengo un lindo vestido rosa claro que era de mi madre, lo arreglé para que se ajuste bien a mí. Y siendo honesta, la esencia de mi madre desapareció hace mucho tiempo, y entre los hilos se queda solo mi aroma. Cepillo mi cabello, sujeto solo la parte de arriba y me doy unos golpecitos suaves en las mejillas para darles algo de color. Salgo en camino al bosque y veo pasar a mi amigo Lupe detrás de un árbol, y en dirección a su casa; No lo había visto desde ... el plan fallido, el primer día del ciclo solar; El peor de mis cumpleaños sin duda. Y sin dudarlo decido ir tras él rápido antes de partir.

— ¡Mi amigo, mi amado y bello amigo! — Lo abrazo tan fuerte de lado con una gran sonrisa, pero él tiene una cara de desagrado y molestia juntos, para nada le hace feliz mirarme e intenta soltarse pero no se lo permito.

— ¡Déjame! Ya no eres mi amiga — Creo que aún está molesto.

— Siempre seremos amigos — Le sonrío y lo suelto buscando su mirada que es negada, claro que no me rindo.

— ¡Casi muero! Si tú padre me hubiera capturado ahora no estarías riendo si no llorando sobre mi cadáver — “Que dramático" Pienso mientras pongo los ojos en blanco.

— Mi padre jamás te haría daño, pero en fin, me voy a mi casita y luego te veo — Lupe me mira y entre cierra los ojos intentando descifrarme.

— ¿Por qué no me has buscado si ya pasaron tres semanas? — Me pregunta, yo solo le sonrío y niego con la cabeza.

— Porque estaba castigada — Le digo sin poder evitar sonreír, y él levanta una ceja pues sabe que le miento.

— ¿Enserio? — Cuestiona y me alejo despacio sin darle la espalda.

— Solo estaré en mi casa encerrada sin salir al mundo cruel, ya ves que es peligroso y podría cortarme o caerme y lastimarme ... algo de mi bellísimo cuerpo — Le digo señalando todo mi cuerpo de cabeza a pies y él solo me mira con cara de decepción.

— Mañana iré a verte sufrir encerrada en tu casa — Me dice Lupe antes de entrar a su casa, y yo... regreso de prisa a la mía y cierro bien la entrada para que a nadie le quede duda de que estoy aquí; Salgo corriendo hacia el patio de atrás donde el bosque comienza.

Me siento totalmente preparada para este día, mi bello vampiro no espera lo que voy a darle hoy; Corro por el bosque y me siento feliz, incluso siento que mis pies no tocan el suelo. Y me detengo un segundo para quitarme el vestido, transformándome en lobo para correr aún más rápido con el vestido en el hocico; Me siento libre de esta manera, desearía poder aullar pero mi padre me encontraría de inmediato.

Mis pies se mueven tan rápido esquivando los árboles hasta que comienzo a oler la menta, ahora puedo reconocer su aroma tan fácil; Y es que se ha vuelto tan único, un aroma que solo yo puedo identificar para poder diferenciarlo entre todo el bosque. Y que lo veo al fin.

Él ya está ahí esperándome con los brazos abiertos bajo la sombra de los árboles, y sin dudar, me lanzó hacia su cuerpo delgado; Cayendo con un lobo en sus brazos, recibiendo varias lamidas de mi parte y él ríe sin poder evitar terminar lleno de baba de lobo.

— Tranquila mi lobita bella ¿Por qué hoy estás tan efusiva? — Me quito de encima y me voy a vestir detrás de un gran árbol, lo hago ya que había notado que se sonrojaba cuando me veía desnuda; Supuse que era normal ya que los vampiros no terminan perdiendo la ropa ya que no se transforman en nada. Regreso rápido a él y puedo notar que sus ojos son cada vez más oscuros, cada día pierde ese tono azul oscuro pero puedo ver todo el amor que tiene dentro, yo solo ... lo abrazo tan fuerte que se sorprende. — ¿Tuviste un buen día? — Sonríe mientras me pregunta, pero respondo besándolo, me pierdo en esos labios que ahora siento que eh besado muy poco en estos días y siento sus manos pasar por mi espalda.

— El mejor día de todos — Respondo pues no podría ser más perfecto, platicamos un poco mientras caminamos de la mano bajo las sombras hasta que nos acostamos cerca del tronco del gran árbol que nos oculta muy a menudo; Junto a él crece una pequeña flor que queda justo entre nosotros, Ricardo mira la copa que se menea muy suave con la brisa, y yo lo miro a él. Me levanto un poco y me acerco para aspirar profundamente su aroma en el cuello, por alguna razón la esencia del cuerpo se concentra más ahí.

— ¿Qué haces? — Pregunta mientras sonríe.

— Tu aroma hace que todas mis preocupaciones desaparezcan — Me acerco un poco más y lo beso muy despacio hasta que él se levanta y se acuesta sobre mí. Trago saliva y mojo mis labios antes de soltar una frase que hace que su mirada cambie.

— Te amo — Mi piel se eriza y mis músculos se tensan al notar el silencio que fue muy breve, pero me pareció eterno.

Él mira toda mi cara y luego me mira a los ojos fijamente; Se acerca hasta mi oído y siento su aliento caliente rozando tras mi oreja haciendo que un cosquilleo recorra toda mi espalda hasta la pierna haciendo que esta se encoja.

— Te amo — Susurra y se aleja para mirarme de nuevo, mi cuerpo se destensa y mi corazón late tan rápido, siento que se saldrá de mi pecho; Lo tomo del rostro con ambas manos y lo beso, mientras con mi cuerpo le digo que estoy preparada para entregarme a él y no volver a separarme nunca por lo que me resta de vida, siempre seré su loba... sin importar nada.

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