Capítulo 36

2286 Palabras

Tras salir del hospital y encontrarse con todas las personas que permanecieron fuera esperando a que despertara, Timoteo se sintió mitad culpable y mitad avergonzado. Girando su rostro, Teo observó a Dominic con un suave sonrojo abordando sus cachetes. —Yo... ¿Todos estuvieron esperando por mí? —preguntó tímidamente. Sonriéndole a su dulce chico, Dominic apretó suavemente su mano y empujó sus dedos entre los de Teo para entrelazarlos. —No tienes que preocuparte por eso. Ellos sólo están haciendo su trabajo de protegerme —calmó. —Eso no me hace sentir mejor —suspiro—. ¿Cuánto tiempo estuviste esperando fuera de la habitación? —No las suficientes. Y hubiese esperado todo el día de ser necesario —aseguró. Deteniéndose frente a su automóvil, esta vez el alfa dominante abrió la puerta tra

Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR