Ella me miró y pude ver emociones contradictorias.
Pensé que ya estaba acabado por pensar que mi mamada había terminado.
Pero finalmente Summer lo miró e hizo pucheros: "Caramba, esperaba ser el número 1".
Negué con la cabeza lentamente, temeroso de que me mordiera el pene.
Ella frunció el ceño y dijo: "Bueno, si tu pene no fuera tan jodidamente grande".
Me reí al darme cuenta de que mi miedo podía pasar.
Ella me miró y me dijo: "Pero no te preocupes, planeo ser el número 1".
Y con eso volvió a la mamada. Intentó varias técnicas intentando llegar más profundo, pero siempre llegaba al mismo punto antes de que le entrara la arcada.
Pero eso no la detuvo en su tarea.
Summer empezó a cambiar de técnica: desde intentar hacerme una garganta profunda hasta usar sus manos para trabajar mi pene, acariciándolo. Luego lo combinó todo.
Trabajó tan duro que obtuvo su primera recompensa. Mi pene empezó a supurar líquido preseminal. Al verlo, probó su primer bocado, mirándome mientras lamía el líquido preseminal.
Eso inició un frenesí.
Ella redobló su esfuerzo.
En poco tiempo estuve a punto de correrme.
Summer vio que las venas de mi pene se me marcaban y se me pusieron rígidas. De un solo golpe, me la llenó hasta el fondo justo a tiempo para que mi semen le corriera por la garganta.
Mi dedo del pie se curvó mientras mi orgasmo inundaba mi cuerpo.
Summer levantó la cabeza con sus labios firmemente envueltos alrededor de mi polla, extrayendo lo último de mi semen.
Me quedé recostado, disfrutando del placer que Summer me trajo. Lo último que vi de Summer antes de que se levantara fue mostrarme el último trocito de semen en su lengua. Luego cerró la boca y la volvió a abrir como si estuviera haciendo un truco de magia que solo ella podía hacer. Demostrándome que disfrutaba de mi sabor.
Summer miró a Kelly al terminar y vio que seguía dormida. Después de dos juegos previos, Kelly seguía dormida.
Summer se levantó y se sentó en mi regazo con sus brazos alrededor de mí, "Entonces, ¿pasé?"
Respiré: "Joder, sí que pasaste".
Se agachó para susurrar: «Sabes increíble». Se apartó y sonrió: «Bueno, viendo cómo demostraste tu resistencia, creo que tenemos un acuerdo mutuo de beneficios, ¿no?».
Asentí.
Ella sonrió, "Bien". Miró a Kelly antes de mirarme a mí, "¿Entonces crees que estoy calificada para entrenar a Kelly?"
Tragué saliva antes de asentir. Summer sonrió: «Si acepta mi ayuda. Y puede que necesite tu ayuda, ¿estás dispuesta a ayudarme?».
La miré a ella y luego a Kelly antes de volver a mirarla. "Sí, supongo".
Summer sonrió: «Bien». Luego se acurrucó contra mí y susurró: «¡Qué ganas de que llegue la segunda ronda!». Me acarició el pecho con los dedos: «Tengo planes para ti, amigo».
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Subí a la cocina a buscarme algo de comer. Por alguna razón, el drenaje de un líquido me da sed, pero como era casi la hora de comer y no tuve tiempo de desayunar, tenía un hambre voraz.
Me preparé un sándwich BLT con el tocino que sobraba de mamá. Por alguna razón, nunca podemos guardar tocino en casa mucho tiempo... junto con otros alimentos. Como fresas, sirope de chocolate, crema batida, leche, huevos y otros. La mayoría de la comida es porque la comemos más rápido de lo que la compramos. La otra es... bueno, ya entiendes.
Había preparado mi BLT con un tazón pequeño de ensalada y media manzana cortada. Estaba terminando la primera mitad del sándwich cuando Kelly salió del sótano, dio un portazo y subió corriendo las escaleras.
Unos segundos después, Summer se acercó y me miró. Miré la pantalla y le pregunté: "¿Hablaste con ella?".
Summer me miró y asintió. Miró mi mesa y se acercó: "¿Dónde está mi almuerzo?".
Señalé con el pulgar en dirección al frigorífico: "Ahí dentro tendrás que hacerlo tú mismo".
Summer hizo un puchero, pero se encogió de hombros y entró en la cocina. Regresó al cabo de unos minutos con la ensalada y unas zanahorias.
Nos sentamos a comer en silencio. Después de terminarme el sándwich, pregunté: "¿Vas a ir a buscarla?".
Summer habló con la boca llena de ensalada: "No, voy a dejar que digiera lo que hablamos. Está un poco enojada porque hablé con algunos de sus ex diciendo que invadí su privacidad".
Me burlé: "Eso dice la chica que se jacta de amar a los hombres".
Ella inmediatamente dijo, "Correcto".
Luego volvimos a comer en silencio. Después de un rato, por supuesto, limpié el desastre del almuerzo y volví a bajar a ver la tele al sótano.
Oí que alguien entraba en la habitación detrás de mí y esperaba que fuera Summer quien entrara. No esperaba a Kelly.
Kelly entró y se sentó a mi lado con un bufido. La miré y le dije: "¿Estás bien?".
Kelly me miró con furia y dijo: "No me gusta que tú ni Summer se metan en mis asuntos".
Genial, va a empezar una pelea, que es lo que intentaba evitar. Aun así, la miré y le dije: "¿Qué esperas de mí, Kel? Te pasas con los chicos más rápido que yo en cambiarme la ropa interior. ¿Tienes idea de con cuántas chicas he estado? Seis". Excluía a Summer porque aún no habíamos tenido sexo oficialmente. "Cuéntalas, Kel. ¿Qué tramas?".
Kelly se cruzó de brazos: "19".
La miré y le dije: "Exactamente. No voy tras las chicas como si fueran caramelos desechables. Tampoco estoy buscando activamente. Has pasado por 19 chicos, Kel. Me preocupa. No quiero que te enfermes por no poder conservar a un chico. Quiero que encuentres a un chico y que ambos seáis felices".
Kelly mantuvo sus brazos cruzados, pero vi que una lágrima comenzaba a formarse, así que continué: "Y la única forma en que puedo hacerlo es averiguar cuál es el problema, porque esta no es la primera vez que un chico elige a otra chica en lugar de ti, así que obviamente no son ellos. Eres tú".
Ella todavía dijo: "Pero si hubiera ido a casa de mi ex para pedirle información, podría haberte dicho. Te lo he dicho todas y cada una de las veces".
Dije: "Sí, pero eso es desde tu punto de vista. No desde el de ellos. Yo", aclaré, "tuvimos que acudir a las fuentes. ¿Y sabes qué nos dijeron las fuentes?"
Ella negó con la cabeza. Continué: "Sin ánimo de ofender, Kel, pero eres un pez muerto en la cama. No lo digo por ser cruel, pero esas son palabras, entre comillas, usadas. He aprendido no de una, sino de tres fuentes diferentes que tu juego necesita mejorar mucho".
Una lágrima cayó de su ojo: "¿Y qué esperas que haga al respecto?"
Me incliné hacia adelante y le pregunté: "¿Qué dice papá sobre descubrir qué es lo más importante que nos inculcó? ¿Qué hace la perfección? Sin esto, te estás perjudicando".
Otra lágrima cayó por su rostro, "Forma".
Continué: "Exactamente, y la única manera de que salgas de este bache es trabajando en tu 'forma'. Por eso le pedí a Summer, tu mejor amiga, que te ayudara con esto".
Kelly se secó las lágrimas de la cara. "¿Entonces ustedes dos sólo están haciendo esto para ayudarme?"
Asentí: "Te quiero como a una hermana, Kel. Y quiero ayudarte, pero no sé por dónde empezar. Además, Summer está dispuesta a ayudarte. Así que, ¿por qué no aceptas la ayuda y te recuperas para que puedas quedarte con un chico en lugar de echarme de la cama cuando pasa algo malo?".
Kelly mantuvo los brazos cruzados y permaneció en silencio por un rato.
Después de lo que pareció una eternidad, Summer entró y se acercó con cautela a Kelly: "¿Estamos bien?"
Kelly miró a Summer y se le veían los pensamientos en la cabeza. Finalmente suspiró: «Sí, estamos bien, Summer». Me miró a mí: «Y gracias por tu preocupación, Gabe». Volvió a mirar a Summer: «¿Sigue en pie la oferta de ayuda?».
Summer sonrió: "Por supuesto".
Kelly le sonrió a su amiga: "Genial, ¿por dónde empezamos?"
Summer se sentó a su lado y le dijo: "Bueno, primero tenemos que descubrir cuáles son tus verdaderas fortalezas, cariño. Y tienes que ser honesta en todo".
Kelly se secó la lágrima de la mejilla y asintió con una sonrisa. Summer sonrió: "Entonces sube a tu habitación lejos de Gabe. Estaré allí en breve y comenzaremos con tu entrenamiento".
Kelly sonrió y se levantó. La vi intentar escapar, pero rápidamente adoptó un paso lento y entrecortado, recordando que sus piernas eran de goma.
La vimos irse. Al irse, Summer me miró y sonrió. Se inclinó y me hizo creer que venía a darme un beso o algo así. En cambio, se detuvo a mitad de camino, me bajó la sudadera y los bóxers y miró hacia abajo. Se inclinó, besó lo que quedaba y dijo: «Volveré a buscarte luego». Me levantó y salió de la habitación.
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Capítulo 3
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Las chicas pasaron el resto de la tarde arriba. Supongo que Summer estaba interrogando a Kel para ver qué podía y qué no podía hacer exactamente en cuanto a sus habilidades en la cama.
En ese tiempo pude hacer un buen ejercicio cardiovascular en el estudio junto con algunos ejercicios básicos, además de ver un poco más de mi anime.
Era casi la hora de cenar cuando volvieron de su conversación. Vi que Kelly aún parecía tener las piernas torcidas por su intenso entrenamiento, pero tenía una mirada que ya había visto antes: frustración extrema. La sola mirada casi me hizo reír, pero logré contenerme.