ahhhh

1457 Palabras
POV DANIEL —Amigo ¿Cómo sigue Ana? Acabo de llegar a la empresa y mi amigo me estaba esperando, inmediatamente, me pregunta por mi esposa, yo estoy mal, pero mi mujer está destrozada. —Esta mal, yo solo vine a firmar unos documentos y me voy, no la puedo dejar sola, mi suegra está con ella, pero el que debe estar con ella soy yo. —Si amigo apoyarla, no la dejes y si la dejas encargarla con Monserrat, que no le quite el ojo de encima. —Monserrat ya no está en la casa. —¿Cómo? ¿Y eso por qué? ¿Ya nació su bebé? —No, ayer le dije que se fuera. —¿POR QUÉ DANIEL? —Porque cuando llegamos Ana se puso muy triste al ver la barriga de Monserrat, no voy a permitir que nadie haga sentir mal a mi mujer. Iván me mira desconcertado y molesto. —Daniel estás mal, no puedes ir por todo el mundo despidiendo gente y corriendo los de tu casa, solo porque se entristece Ana, sé que es difícil, pero Monserrat no tiene la culpa, además en el mundo hay muchas mujeres embarazadas ¿Qué piensas hacer? —No es lo mismo Iván, de las mujeres que hablas no viven en mi casa, Monserrat vive en mi casa y todo el tiempo está en contacto con Ana, lo que mi mujer necesita es paz y Monserrat roba toda posibilidad de que Ana tenga paz Mi amigo está molesto, pero no me importa, MI MUJER, MI ESPOSA , es quien está sufriendo y no pienso anteponer a nadie, ella es lo más importante. —Mira Iván, Monserrat ya se fue y no hay vuelta atrás, además le di una buena liquidación, podrá vivís muy bien unos meses, tendrá a su hijo y podrá cuidarlo por un tiempo sin necesidad de trabajar. ——Ay amigo, creo que hay veces que tú amor por Ana te ciega, pero en fin, como siempre me lo dices, yo no soy nadie para meterme o no entiendo de esto porque nunca me he enamorado. —Así es. —Mensaje entendido, haz lo que quieras, con tu permiso, espero Ana mejore pronto. Iván sale algo decepcionado de mi oficina, pero no me importa Yo decido ir a casa a ver a mi mujer. —Amor. —Dime —¿Dónde está Monserrat? No la he visto y se me hace extraño, necesito hablar con ella ¿Sabes? Se ha convertido en mi mejor amiga, este tiempo que hemos convivido he conocido a fondo y es una mujer muy inteligente. —¿Será? —No seas grosero Dani. —No soy grosero, dime, si es tan inteligente ¿Por qué se fue con ese tipejo, dejando todo por él? —Por qué se enamoró. —Esa es una excusa barata, tu y yo nos amamos desde que nos conocimos y lejos de dejar todo, decidimos ser más responsables, para poder estar juntos y poder darle un futuro a nuestros….. Me quedo callado de golpe, los ojos de Ana se llenan de lágrimas inmediatamente, yo me maldigo en silencio ¿Cómo puedo ser tan imbé***.? —No llores mi vida, no llores, perdóname. Ella sonríe tristemente, se limpia las lágrimas y me responde: —No te disculpes, un día tendremos todos los hijos que soñamos, te prometo cuidarme y poner todo de mi parte para que todo salga bien. Y volviendo al tema, no puedes hablar a la ligera de las personas, no sabes qué pasó en realidad, además tu vida y la mía, son tan distintas a la de Monserrat, sus recursos, su educación y su entorno no tiene nada que ver con el nuestro ¿Sabías que sus padres murieron y ella trabajaba y estudiaba? Y ¿Sabías qué ese hombre la golpeaba, la encerraba y al final la boto porque se consiguió otra? ¿Sabías que ella se fue a vivir con él porque él después de enamorarla le dijo qué se casarían y harían un negocio y muchas promesas más que ella Reye, la única petición por el momento era qué dejara la universidad, se fuera a vivir con él y siguiera trabajando, para ahorrar gastos y poder juntar todo el dinero posible para lograr sus metas más pronto? Dani te aseguro que tu no sabías todo eso, y no te culpo, tampoco es tu obligación saberlo, solo no juzgues antes de saber las cosas ——Tont*** no tengo nada que perdonar, solo no hables por hablar, el hombre que se gane el corazón de Monse, será muy afortunado y ahora dime ¿Dónde está Monse? Y ahora ¿qué rayos le digo? —Dani, por favor habla. Mis labios están sellados, no sé qué decir y es que creo que si fui un imbécil, las palabras de Iván resuenan en mi mente y creo que mi mujer sufrirá con mi decisión, tendré que hablar —Daniel Zarate Peña HABLA AHORA MISMO ¿Ella está bien? ¿Su bebé? —Tranquila mi vida, Monserrat está bien, pero la despedí N puedo guardar secretos con mi esposa, se va a enojar, pero tengo que decirle todo. —¿QUÉ? ¿POR QUÉ DANIEL? ¿QUÉ FUE LO QUÉ OASO? ESPERO NO ME HAYAS ECHADO LA CULPA DE LO QUE ME PASO. —No, yo jamás hice eso, mira cálmate mi vida, yo la despedí porque vi lo triste que te pusiste al ver su barriga abultada, yo…. —¿La despediste por mi? —Yo…. —Vamos inmediatamente por ella, Daniel , Monserrat está a punto de dar a luz y tú….. eres un insensible, no tenías derecho…. Ella….ahhhh Mi mujer llora amargamente y a mí me duele el alma, me da miedo que me pase algo. —Ya mi vida, ya, tranquila, mañana por la mañana iremos por ella, por favor cálmate y perdóname, ahora descansa, recupérate está noche y mañana será otro día, yo mismo iré por ella. —Vamos ahora No puedo, ni siquiera sé dónde vive, le voy a preguntar a Gustavo, él le llevo sus pertenencias. —No, descansa, tu estás convaleciente, no quiero que nada te pase, por favor, permite que yo mañana la traiga. Me levanto y voy por unas pastillas que le recetaron para calmar sus nervios. Ella se niega por unos minutos, pero al final sede y después de unos minutos queda profundamente dormida. Mañana traeré a Monserrat de vuelta. POV MONSERRAT Me siento muy mal, creo que tengo fiebre, me duele todo el cuerpo y no me puedo levantar, pero lo tengo qué hacer, tengo que ir al médico, no puedo tomar nada qué no me recete el médico, porque puedo dañar a mi hijo o, tal vez ya es momento qué nazca. Yo quería ir a regresarle su dinero a Daniel, me dio demasiado, tal vez se equivocó, pero no podré, decidí dejarlo muy bien guardado y primero atenderme, ya será otro día. Me doy un baño, rápido, siento que me voy a caer, pero tengo que salir de aquí, cada vez me siento peor. Voy bajando la escalera y me tengo que detener del barandal. —¿Qué te pasa muchacha? Te ves mal. —Ayy doña Tere, me siento muy mal. Doña Tere se acerca a mí y me toma de un brazo para ayudarme a bajar —Dios mío Santo, estás ardiendo en fiebre muchacha. Yo le voy a contestar, pero……. POV DOÑA TERE Ay por Dios, Monse se acaba de desmayar, está muy mal. —¡¡¡RAUL!!! ¡¡¡RAUL!!! AYÚDAME. Mi esposo sale inmediatamente, decidimos no levantarla, porque si se golpeó la cabeza, no pude detener su caída, llamamos a la ambulancia y cuando llegó me fui con ella al hospital, no pude quedarme a esperar que el médico me dijera como estaba Monse, no soy mala persona, de verdad que yo quisiera estar con ella pero, yo estoy a cargo de mis tres nietos, dos van a la escuela y otro es un bebito, mi esposo se irá a trabajar en una hora, así es que con toda la pena del mundo me voy, solo deje dicho lo poco que se de ella. Espero les sirva de algo la información, me da mucha tristeza está muchacha, pero no puedo hacer más por ella. POV MONSERRAT. Ayy Dios, un dolor espantoso me trae de regreso a la conciencia. —Ahhhhhh —Señora tranquila, necesitamos hablar con usted. —¿Qué pasa? —Señora… —el médico hace una pausa algo larga y eso me da mala espina —señora usted traía fiebre muy alta, llegó inconsciente y…. Señora hicimos un ultrasonido y su bebé, su bebé está muerto
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