Katerina escucho, sabe que es verdad, están en diferentes países, es complicado todo. No quiso profundizar, mejor dejará que todo fluya como debe de ser. Además, debe de contar con Aidan para hacer ese cambio. —Ya sus dormitorios están listos. —Gracias, madre. Darren, ¿Quieres mudarte a mi casa? —No me queda de otra, mis órdenes son, ser tu sombra. —No es para tanto, me sé defender sola. —Eso dicen todas y a la hora, un cabrón las somete. Perdón por la expresión. —todos sonríen. Darren se encarga de ir por las maletas, junto con Gaspar, quien recogería la ropa de Katerina, ella regresó a la empresa. Al entrar a la oficina, un malhumorado Camilo la ve con ojos de asesino. —Por fin llegas, ¿Dónde está tu amante? —Si consideras ofenderme, te doy la mala noticia que fracasases. Enfócat

