EL AMOR LLEGO CONTIGO

Amaia caminaba de la mano de Octavio iban hacia el elevador del hotel, seria la primera vez que tendrían sexo, eran novios y aunque Amaia habría aceptado casi desde el principio, Octavio se comportaba respetuoso y aunque también deseaba tener sexo con ella, quería esperar ya que tenia ideas conservadoras, pero esa noche durante la fiesta, el baile los besos, el aroma de Amaia decidió dar el siguiente paso y tener sexo con la mujer que lo había conquistado desde que la vio entrar aquella noche al bar, Amaia había decidido esperar a iniciar su vida s****l primero debido a una desilusión amorosa y después con el anhelo de encontrar al hombre que fuera capaz de moverle su mundo y cuando llego acompañada de sus amigas a las fiestas del pueblo no se imaginaba que ese hombre lo encontraría en un mundo diferente al suyo al entrar al bar vio a un hombre alto varonil de aspecto rudo y después de cruzar miradas y ser invitada a bailar percibió su aroma no solo su perfume, fue un aroma que jamas había olido en alguien mas, al tocar su mano mientras bailaban y la otra mano en su espalda supo que con el quería dejar de ser virgen, aunque fuera solo el encuentro de una noche seria capaz de atreverse, y hoy estaban subiendo a su habitación del hotel, iba nerviosa exitada ese hombre le provocaba ml cosas, varias noches se había ido a dormir y sus sueños habían sido húmedos y aunque no tenia experiencia s****l entre platicas de amigas, información y películas románticas, esperaba que ese día llegara pronto al llegar a la habitación Octavio cerro y solo prendió unas lamparas, se quito el saco y corbata veía como Amaia lo miraba y sus ojos brillaban, se acerco la beso sin medida la sujeto con fuerza de la cintura, Amaia se acerco aun más al cuerpo de Octavio, no tenia experiencia pero era apasionada lo había heredado de ambos padres, su seriedad no decía mucho de como era realmente y Octavio creía haberla descifrado, poco a poco se fue dando cuenta la pasión que Amaia le ponía a lo que deseaba, cuando se acerco a ella con la intención de conocerla se dio cuenta que Amaia no era una mujer de una noche, que había mucho mas por explorar y hoy seria su mujer aunque el ya lo había decidido casi desde el principio, no sabia si Amaia quería serlo completamente, que aunque sabia que lo deseaba, su carácter y la forma de comportarse lo confundían, estaba seguro que ella no era un mujer para vivir en un rancho, aun así estaba decidido a no dejarla ir por otro lado Amaia sabia que Octavio era un hombre de racho que si bien no creía en el matrimonio si era un hombre de hogar, ella no buscaba un matrimonio y menos cambiar su forma de vivir, el deseo había llegado en esas vacaciones y se negaba aceptar que también el amor lo había encontrado allí VAYAMOS AL PRINCIPIO... Amaia llego de vacaciones al rancho de su tía Luz con sus amigas de clase Teresa e Hilda con quienes estudiaba para veterinaria y su mejor amiga Emma, fuero invitadas por su tía Luz a las fiestas del pueblo, antes iba regularmente pero con la escuela tenia años que no asistía, aunque no habían estudiado para veterinaria zootecnia les interesaba ver las exposiciones de caballos y ganado después de los abrazos y comer las chicas se fueron a cambiar, querían asistir un rato a las fiestas que había de noche incluyendo el baile, se habían comprado ropa para la ocasión, Amaia llevaba una falda corta de mezclilla con blusa de botones blanca y botas vaqueras color café, sus amigas iban en algo similar, aunque las chicas iban acorde al evento era notorio que no eran del pueblo ni de los alrededores, el tío de Amaia las dejó en la puerta de un bar donde se presentaban bandas y cantantes, pasaría por ellas más tarde Entraron sorprendidas nunca habían asistido a un lugar así, todos los asistentes las observaban las chicas no pasaban desapercibidas, todas eran bellas y una de ellas en especial llamó la atención de un hombre alto bien parecido que se encontraba en una mesa junto con otros hombres, era Octavio Villaseñor, observaba atento la esbelta y delineada figura de Amaia con piernas bien torneadas que la minifalda dejaba ver, de cabello obscuro piel color bronceada, labios carnosos y ojos misteriosos, la chica había logrado cautivarlo, uno de sus amigos mencionó -quieren conocerlas? Una de ellas es sobrina de mis patrones -invítalas con nosotros y cuidado con la chica de labios rojos no se le acercan entendido? el joven se fue directo con las chicas y Amaia miró hacia la mesa, ya había cruzado miradas con quien la miraba, Octavio dirigió un saludó con sonrisa que Amaia no correspondió y que solo miró fijamente, después de unos minutos llegaron junto con el chico a la mesa -buenas noches! Saludaron todas excepto Amaia que solo sonrío -ellas son Teresa, Hilda, Emma y Amaia sobrina de mis patrones, y ellos son julio,Pedro,Octavio y yo Saúl Cada una se fue sentando frente de cada uno de los hombres unos casi de la misma edad y otros mayores, Amaia fue la última en buscar donde sentarse y lo hizo al lado de Octavio el hombre que le había llamado la atención desde que cruzó la puerta -quieren tomar algo? Preguntó Julio quien sería el mejor amigo de Octavio Todas las chicas pidieron algo pero Amaia dudo -quieres algo especial Amaia - algo si alcohol, tendrán ? Octavio llamó al mesero y pidió una bebida que esperaba le gustara Las chicas fueron invitadas a bailar y Amaia se quedó sentada junto a Octavio, el mesero llegó con la bebida Amaia observó y probó un poco antes de tomar con confianza -es lo único que se vende aquí sin alcohol, espero que te guste Amaia Amaia no lo miro y solo tomo un poco antes de contestar -si, está bien nunca la había probado -soy… -Octavio lo se, puse atención Octavio sonrió levemente, la chica entre la seriedad mostraba interés y al escucharla ahora también le gustaba el tono de su voz -Amaia bailas? -no se bailar este género, si me enseñas? -por supuesto, vamos! Llegaron a la pista y Octavio llevaba Amaia de la mano, la puso frente a él, puso su mano en su espalda sin invadir su espacio y Amaia se acercó un poco más e inhaló su perfume, disimulo que estaba nerviosa aunque su corazón latía fuertemente, si Octavio la invitara a tener sexo ella aceptaría de inmediato, con nadie más había deseado tener intimidad, Octavio dirigía Amaia en el baile y entre la musica y el contacto de los cuerpos, ella reflexionaba sobre el impulso de tener sexo sin conocerlo, era un hecho que estaba interesada y deseaba conocer mas acerca de él, termino el primer baile y sin soltarla le dijo el odio -mentiste acerca de no saber bailar -aprendo rapido -nos vamos a la mesa o seguimos bailando? -seguimos bailando bailaron tres piezas mas hasta que Amaia apretó su brazo para llamar su atención -pasa algo? -me canse y tengo sed la tomo de la mano fueron a una barra y Octavio pidió bebida sin alcohol, sin soltarla de la mano pregunto -te quedaras algunos días? -como sabes que estoy de paso? -es obvio nunca te he visto y no creo que seas de algún pueblo cercano -me vestí de acuerdo al lugar, tan notorio es? -te falto una texana y estarias completa -oh no pensé en eso -te prestaría la mía pero te quedara grande, te conseguiré una si es que te quedas mas días Amaia solo sonrió levemente y al recibir su bebida le pregunto a Octavio -es seguro tomarla? solo tomo bebidas cerradas Octavio entendió a que se refería, tomo la bebida la probo y después la puso en la boca de Amaia, sin dejar de mirar fijamente a esos ojos expresivos, ella acepto y dio un trago sin dejarlo de ver y observo como el mordisqueaba sus labios -confias en mi Amaia ? -mis tíos saben con quien estoy y donde, aun así tomo mis precauciones -te gustan los caballos? -los amo! -mañana habrá una exposición te gustaría ir? -esta en los planes de mañana con mis amigas y prima -entonces te veré mañana? -no lo se...como te busco? -busca los caballos de don Isidro se acercaron sus amigas para decirle que ya las buscaban -gracias por el baile! -fue un placer bailar contigo, te veo mañana? -si coincidimos se despido con una ligera sonrisa, se alejo dejando a Octavio con mas preguntas que repuestas, solo sabía que le agradaba y la buscaría para conocerla, lo había dejando cautivado y quería descifrar a esa chica de ojos expresivos y labios tentadores