Querida Chelsea:
¿Cómo asimilo que no tengo una vida a tu lado?
¿Cómo te explico que no te abandone?
He pasado todos estos meses escribiéndote cada día, para mantener vivo el recuerdo de tu maravilloso amor por qué mientras más me sumerjo en este mundo de destrucción, más me olvido de mi vida anterior, y me niego a olvidar cada mínima cosa de ti.
Puedo estar lejos de ti, no poder sentir tu calidez, pero no podré sobrevivir sin tus recuerdos porque son los que me darán fuerzas para seguir manteniéndome con vida y así volver a encontrarnos, luego de terminar con toda esta situación.
Sepas que abandonarte nunca estuvo en mis planes, sin embargo, no podía perder el tiempo despidiéndome tampoco quería asustarte, por eso me fui sin decirte un adiós.
Cada día te extraño.
Cada minuto quiero ir a tus brazos.
Cada segundo pienso en ti.
Quiero regresar, pero no puedo, aún tengo que terminar con lo que empecé para que puedas vivir sin temor. Pondré al mundo arder solo para que puedas estar a salvo porque esta vez nadie podrá hacerte daño, de eso me encargare, limpiare el mundo para ti.
Ver el mundo desde este lado me ha hecho cuestionarme muchas de mis decisiones mientras sufro al recordar lo sucedido culpándome por permitir que vivieras algo atroz. Sin embargo, en este mundo es normal que suceda algo de esa magnitud y eso me da repulsión.
El mundo es cruel.
Pero en medio de tanta oscuridad, alumbras mi caminar.
Eres quien da sentido a mi vida, resistiré por ti.
Espero leas mis cartas y descubras mis motivos por lo que tuve que marcharme aunque no he recibido un mensaje de tu parte, tengo la esperanza de que me perdonaras porque entenderás la magnitud de la situación.
Te amo.
Siempre te amare, Chelsea.
ATTE: ANCEL.