
Juliana despierta cada día en la misma casa, con el mismo desayuno, y el mismo noticiero anunciando el fin del mundo.El virus Ojo de Caín ha consumido a gran parte de la humanidad, pero ella cree que está a salvo entre esas paredes.Hasta que comprende que está viviendo una mentira y que solo debe respetar tres reglas:1- No tomes la medicina.2- No abras la puerta.3- No los mires a los ojos.Con la llegada de Zane, descubrirá que el verdadero enemigo no está afuera, si no en su mente.No los mires a los ojos... Porque en el momento en que lo hagas… Ellos entrarán.
