Ella mira hacia atrás y mira a Rubén, le hace señal que lo haga sin miedo, ella no tiene más opción y se lanza, Ana la agarra en el aire pero ambas caen al suelo, sin querer el peso de Alicia lastima el brazo de Ana
— ¡Mi brazo!— dice Ana agarrando su brazo y Alicia la ve preocupada mientras que apenas Rubén se encuentra escalando el muro
— ¿Estas bien?— pregunta Alicia preocupada pero Ana no puede responder por el dolor que tiene— ¡Dime algo! No te quedes en silencio
—No te preocupes, solo tengo un poco de dolor— dice Ana pero su rostro dice lo contrario
Rubén termina de bajar y ve que Ana no se encuentra bien y corre hacia a ella apartando a Alicia
— ¡Ana que paso!— dice preocupado Rubén
—No te preocupes, solo me golpee un poco pero el dolor pasara
Rubén toca el brazo de Ana y ella se queja de dolor porque no lo aguanta, es allí donde Rubén entendiendo que el brazo de Ana se salió y tenía que volver a poner en su lugar
—Ana… Lamento decir esto pero debemos poner el brazo en tu lugar, para que deje de doler o al menos no duela tanto
—Haz lo que tengas que hacer
Ana cierra los ojos y Rubén toma el brazo de ella y lo deja en su lugar, Ana empieza a derramar lágrimas por el dolor pero no quiere gritar para no hacer ruido, Rubén la abraza y la acaricia, Alicia solo ve y se siente mal porque por ella esta así, mira a los lados y siente la presencia de alguien
—Creo que debemos irnos, siento la presencia de alguien— dice Alicia mirando a los lados
—Alicia tiene razón, debemos irnos o nos podrían ver
Rubén ayuda a levantar a Ana y los tres se alejan de aquel lugar, caminan por todo el bosque y parece que no hay salida, los tres se sienten cansados y se detienen en un árbol, Alicia se sigue sintiendo culpable a ver a Ana que trata de no verla
—Lo siento Ana… Estas así por mi culpa— dice Alicia sin mirar a Ana para no sentirse mal y Ana solo sonríe
—No te preocupes, ya mi brazo estará mejor, no te sientas culpable—Dice Ana con una sonrisa sabiendo que Alicia se siente culpable por algo que no fue su culpa
— ¿Cómo puedes sonreír estando así?
— ¿Verdad? Debo estar loca para sonreír aun teniendo dolor
—Podemos intentar buscar a un médico Ana— Dice Rubén pero Ana niega rápidamente— ¿Por qué? Crees que llegaras a un lugar estando así
—Deja el drama Rubén, aún tengo mis piernas y puedo caminar, debemos de alguna manera salir de este bosque
— ¿Y qué hacemos con Alicia? Ella aun no recuerda, no me digas que aun así la llevaremos con nosotros, es un peligro ¿Y si nos lleva con su grupo de manifestaste? Hay si estaríamos en peligro
—Yo confió en ella, a pesar que no tiene los recuerdos estoy segura que encontraremos una solución entre todos
Alicia solo se queda callada y Rubén siguen molesto por la paciencia de Ana, el nota que a los lejos se ve una casa y sonríe porque significa que tiene esperanza para al menos no quedar en la calle
—Veo una casa desde aquí, podemos intentar ir, aunque…
—¿Aunque qué?— dice Ana mirando a Rubén
—No creo que Alicia quiera venir con nosotros— dice el cruzando los brazos
—Estoy segura que Alicia quiere venir con nosotros así que no te preocupes Rubén ¿Verdad Alicia?
Alicia mira alrededor y no tiene más salida>Piensa Alicia a ver a Ana
—Supongo que no tengo más opción que ir con ustedes— dice cruzando los brazos
— ¿Viste Rubén? Ahora no tienes excusas, Alicia se une a nosotros— dice Ana alegremente
—Está bien, me equivoque por esta vez, mejor vámonos hasta que nos encuentren
Rubén levanta a Ana y ella solo sonreí a ver a Alicia, mientras tanto Alicia simplemente sigue seria, camina hacia la casa y Rubén le hace señal a Alicia para que toque la puerta porque él no puede soltar a Ana, ella tuerce los ojos y toca la puerta y espera que abran, a la primera nadie abre la puerta a pesar que las luces están encendidas
—Toca las veces que sea necesarios, estoy seguro que debe ver alguien en esta casa— dice Rubén mirando a Alicia
— ¿Me estás diciendo que hacer?— pregunta Alicia molesta por la actitud de el
—No me malinterpretes, lo digo con buena intención, no me ataques
Alicia vuelve hacer un segundo intento, y nada, hasta que hace su tercer intento y sale la misma señora que Ana y Alicia habían conocido cuando estaban huyendo de la casa, y Ana a verla la reconoce rápidamente y se asusta y no sabe cómo reaccionar, mientras que la señora con una sonrisa los ve
—Disculpe la demora, una anciana como yo camina un poco lento— dice la anciana sonriendo— ¿Qué les puedo ayudar? Parecen estar perdidos
— ¿Es usted la misma abuela que nos ayudó? Me recuerda— pregunta Ana
La anciana no puede revelar su identidad todavía>Piensa la abuela a mirar a Ana
—Disculpe señorita, pero la mente de una anciana como yo no es muy clara, si nos hemos visto, lamento por no recordarte— dice la abuela sonriendo
—Abuela, necesitamos para quedarnos esta noche y casualmente vimos su casa, sé que somos desconocidos, pero debemos hacerlo ella se encuentra lastimada del brazo— dice Rubén refiriéndose a Ana
— ¡Oh no! Pobre niña, pasen, yo tengo medicamentos para ayudarla
—Gracias abuela— dice Rubén
Los chicos entran a la casa mientras Ana tiene sus dudas, al entrar a la casa es igual como la primera vez que entraron Ana y Alicia, Ana se preocupa que se una clase de embrujo o algo parecido, mientras que Alicia mira alrededor y siente conocida la casa>Piensa Alicia, pero lo que no sabe es que la anciana puede leer su mente y sonríe a escuchar los pensamiento de Alicia, Rubén ayuda a Ana a sentarse en la silla
— ¿Usted vive sola señora?
—Claro, mis hijos viven lejos ahora solo quede sola
—Entiendo… ¿Y cuál es su nombre?— Ana golpea a Rubén para que no pregunte eso— ¿Por qué me pegas? Que mal hice
—Eso no se pregunta Rubén, donde están tus modales— dice Ana regañando a Rubén— Lo sentimos abuela, mi amigo es muy maleducado
—No se preocupe, es un chico muy divertido, me gusta tu actitud me recuerdas a mi hijo, puedes llamarme Diana
Ana voltea rápidamente por instinto y mira a la abuela>Piensa Ana y la abuela solo le sonríe a leer su mente, Rubén se da cuenta que Ana no puede dejar de ver a la seora y le mueve para que reaccione
— ¿Estas bien Ana?— ella vuelve a la realidad y asiente— Es un lindo nombre, señora Diana
—Gracias joven, pero yo no sé cuáles son su nombre
—Disculpe tiene razón— dice Rubén— Ella es Ana y Alicia, y yo soy Rubén
—Que lindos nombren tienen, ustedes se parecen mucho físicamente— dice Diana refiriéndose a Ana y Alicia y ella se miran— Casualmente tengo dos nietas que se llaman así, me recuerdan a ella
— ¿Por qué suena tan desanimada señora Diana?— pregunta Rubén preocupado
—Por nada, solo las extraño un poco, pero no es nada porque preocuparse
— ¿No la has visitado?—pregunta Rubén
—Dejaras de ser tan curioso Rubén, quieres saber toda su vida— dice Ana y el solo sonríe avergonzado
La abuela ríe por el comentario de Ana y ella sonríe incómodamente por la vergüenza
—Digamos que no he tenido la oportunidad de verlas apropiadamente, también debo hablar primero con mi hijo— la abuela suspira— Pero nosotros aquí estamos hablando y no he traido las medicinas, lo siento Ana por mi descuido ya la busco
—No se preocupe señora, más bien no quería ser una molestia
—De ningún modo, son una bendición para mí, Alicia ¿Te parece ayudarme?— Alicia se señala y la abuela asiente
—Supongo que lo tengo que hacer
La abuela le entrega una canasta con varios medicamentos, mientras que la abuela busca un vaso de agua para que Ana pueda tomar las pastilla, llegan hacia donde Ana y saca una crema, ella mira a Rubén para que se voltea y el rápidamente entiende la señal, procede a bajar un poco el vestido para colocarle la crema, ella hace una mueca de dolor, luego busca la pastilla y se lo entrega
—Te entregare estas pastillas, tómala dos veces al día, una en la noche y una en la mañana ¿De acuerdo?
Ana asiente pero nota que las pastilla son muy grandes y ella odia tomar medicamentos, Alicia a notar que Ana piensa mucho para el medicamento lo agarra y con sus manos la rompe y se la entrega, pero lo que Alicia no sabe es que en el pasado ella siempre hacia eso para Ana, su intuición sigue ahí a pesar de no tener los recuerdos, Ana no puede dejar de sonríe y Alicia levanta una ceja sin entender el motivo porque Ana se siente tan feliz
—Tu siempre hacia esto por mí, porque sabias que no puedo tragar las pastillas grandes, a pesar que no tienes tus recuerdos tus sentimientos parecen volver— dice Ana con los ojos cristalizado
—No te hagas ilusiones— dice Alicia cruzando sus brazos
Ana procede a tomar el primer pedazo de pastilla y arruga la cara, luego toma la segunda, la abuela Diana aplaude porque fue valiente para tomar el medicamento
—Que valiente la niña, ya sabes entonces, no dejes de tomarla por los próximos tres días y estarás mejor
—Gracias abuela, espero no seguir molestando
—No te preocupes ¿Ya comieron?— ellos niegan—Entonces han llegado mi momento, vamos Alicia, ayuda a esta anciana a preparar la cena
— ¿Otra vez yo? Por qué…— dice Ana quejándose
—Bueno… Rubén es hombre y los hombres suelen ser malos en la cocina, y Ana esta lastimada, eres la única que puede ayudarme
—Deja de quejarte Alicia, si quieres comer al menos ayuda a la abuela— dice Ana
Alicia enojada sigue a la abuela para ayudarla, la abuela le entrega una bolsa de pan mientras ella busca las mermeladas y elige una de fresa y otra de manzana, Alicia a ver la mermelada de manzana se le hace agua a la boca>Piensa la abuela mientras mira a Alicia
—Supongo que te puede gustar la mermelada de manzana en el pan ¿O me equivoco?— dice con una sonrisa y Alicia solo asiente obedientemente— entonces dame un pedazo de pan para ponerle mermelada de manzana a la tuya
La abuela le pone la mermelada y le da de probar a Alicia y ella come el bocado y sonríe a probar
— ¿Te gusto?— pregunta y Alicia asiente