Tercer encuentro

681 Palabras
La tercera vez que Jena volvió a encontrarse con Liam Sanders, dudó de que fuera una coincidencia, pero no parecía ser otra cosa tampoco. Supuso que solo era su mala suerte atacando de nuevo. Era viernes, pasaban de las seis y ya comenzaba a obscurecer. Jena se había quedado después de clases para avanzar un trabajo que debía entregar la próxima semana, por lo que ya no se veía mucha gente en los alrededores. Lo vio recargado contra el muro de la entrada, a unos metros de la parada de autobús donde ella tomaba el que la llevaba a su departamento. Así que por mucho que le hubiera gustado rodearlo, no pudo hacerlo, sujetó su mochila con un suspiro y caminó con la cabeza gacha, desearía no haber olvidado sus audífonos en la mañana. Liam Sanders iba completamente de n***o ese día, mostrando un tatuaje que ella no alcanzó a detallar, pero que supuso era reciente, porque ella no recordaba haberlo visto antes. Entre sus labios había un cigarrillo, el olor llegaba hasta donde ella estaba, haciéndose cada vez más intenso conforme se acercaba a él. Jena pensó que solo tendría que pasar por un lado, como si no fuera nada importante, así no llamaría su atención, y tal vez ella solo estaba exagerando la situación, no creía siquiera que él la recordara. "Hey.", Jena se detuvo justo a su lado, Liam Sanders dejó escapar humo de su boca, el cual la rodeó por completo, seguramente ahora su ropa apestaba por completo a cigarro. "Jena, ¿cierto?", levantó la mirada, se encontró una vez más con esos ojos negros que, podía jurar, brillaron cuando se encontraron con los suyos cafés. "¿Qué, no saludas?", preguntó sorprendiéndola. Jena tartamudeó sin saber bien qué es lo que debía contestar, "¿B-buenas... tardes?", lo escuchó reír antes de que, tomándola desprevenida, la jalara del brazo. Dejó ir un pequeño grito justo en el momento en que unos labios secos se posaron en su mejilla, tan cerca de su boca que su corazón se agitó dentro de su pecho, retumbando en sus oídos. Aun presa de la sorpresa, se alejó de golpe, sus ojos se centraron levemente en la sonrisa burlona que pintaba el rostro masculino, no supo que decir, así que solo se quedó muda, observándole, buscando desesperada la oportunidad de irse. "Pareces un poco asustada, ratoncita.", Jena frunció el ceño ante el apodo. "¿Le temes a la oscuridad... o al león?", se burló, la chica sonrió a pesar de todo, negándose a dejar que se riera a su costa. "Yo no veo a ningún león, pero tal vez un gatito con moño sí que veo." En su mente, Jena pensó más en un puma, uno de ojos negros y mente peligrosa. "Incluso un gatito puede clavarte los colmillos, guapa." El hombre se llevó de nuevo a la boca el cigarrillo y la chica pensó que ese era su momento, así que encogiendo los hombros desinteresada, intentó retomar su camino. "¿Te vas? ¿Quieres un aventón? Mi auto está cerca." "No, gracias, así estoy bien.", aseguró sin dejar de caminar. Lo escuchó reír a sus espaldas. "De verdad pareces asustada." "Y tú innecesariamente insistente.", contraatacó mirándolo levemente por sobre su hombro. "Sí, algo de eso me han dicho.", lo escuchó débilmente, estando ahora más lejos. "Hasta luego, ratoncita." El autobús llegó justo en el momento preciso, pero aun estando arriba del transporte, Jena no dejó de sentir la pesada mirada sobre su espalda, y realmente deseó que ese ´hasta luego´, fuese un ´adiós´. Sin embargo, supo que eso no sería posible cuando a los tres días de haberse encontrado con Liam Sanders, un mensaje llegó a su celular desde un número desconocido. Y podía apostar sus dedos a que sabía quien era, después de todo, quién más sería capaz de conseguir su número? Jena leyó con amargura el mensaje una y otra vez, realmente se sentía como una presa. Número desconocido Hola ratoncita, ansiosa de verme otra vez? visto a las 18:40
Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR