Capítulo 2“Mango, podrías... Por favor, ve a casa primero. Hablaré contigo sobre esto más tarde”
Nathaniel colgó el teléfono y frunció el ceño con fuerza. Era evidente que estaba preocupado, pero no por su esposa.
Mango lo apartó con frialdad.
“Adelante. Después de todo, ella es lo más importante para ti”
Sin embargo, por dentro su corazón sangraba.
Nathaniel tenía la intención de decirle algo; sin embargo, se mantuvo en silencio. Simplemente paró un taxi, la embarcó y se marchó a toda prisa.
Mango no pudo evitar sonreír con amargura.
¿Qué clase de esposo se preocupa por otra mujer mientras está con su esposa? ¿Qué sentido tenía aguantar un matrimonio así?
Cuando llegó a casa, Mango estaba tan aturdida que ignoró el saludo de la criada.
Al llegar al dormitorio, observó la decoración tétrica que no era para nada de su gusto. De repente, Mango se sintió ridícula, su matrimonio era una farsa, y ahora, realmente se había acabado.
Mango esperó a Nathaniel durante toda la noche.
Sin embargo, él nunca la llamó o se preocupó por su estado, aquella indiferencia era como agujas clavándose en su corazón.
“Cariño, lo siento mucho. Mami no puedo darte una familia. Pero no te preocupes, mami te amaré mucho y te protegeré”.
El rostro de Mango estaba lleno de lágrimas y dolor; luego, firmó el acuerdo de divorcio que había preparado la noche anterior.
Cada trazo era como si le destruyeran el corazón.
Mango firmó el documento y se quitó el anillo de bodas que le dio Nathaniel, dejándolo junto con los papeles de divorcio.
Ella solía tratar a este anillo como un tesoro. En los últimos tres años, el anillo había dejado huella entre sus dedos; ahora que se lo había quitado, aquellas huellas no desaparecían, al igual que el amor que sentía por él. No importa cuánto lo intentaba, no se podían borrar.
Mango sintió que era inútil. Con el temor de poder arrepentirse de su decisión, tomó su equipaje y se marchó de casa.
“Señora, la señorita Cho no se siente bien, el señor Ye se quedará con ella. Nos ha pedido que la enviáramos al extranjero. Así que, tenemos que partir ahora”.
En cuanto Mango salió, vio al guardaespaldas de Nathaniel en medio camino, y al escuchar lo que le dijo la enojaron muchísimo.
“¿Por qué debería ir al extranjero? ¡No me iré!”
“Lo siento, señora ¡El señor Ye dijo que eso no dependía de usted!”
Después de escuchar aquella respuesta, el guardaespaldas rápidamente dio un paso adelante, golpeó a Mango dejándola inconsciente, y la arrastró directamente al auto.
Mango fue llevada a un almacén abandonado, luego la desnudaron y la acostaron en una cama.
En aquel sitio se encontraba un hombre, quien se acostó a su lado acariciándola; mientras la otra persona les tomaba fotos íntimas con una cámara.
Después de terminar la sesión, el hombre llamó a Macy.
“Señorita Cho, todo está listo”.
Macy le contestó con una carcajada: “Muy bien. Sube las fotos a Internet más tarde. Veamos si Nathan puede soportar el engaño de su esposa. No olvides limpiar la escena”.
“Sí”
El hombre colgó el teléfono; luego, vertió gasolina directamente alrededor del almacén y prendió fuego.
De repente, las llamas se elevaron hasta las nubes y la temperatura aumentó, provocando que el humo y el calor fueran asfixiantes.
De repente, Mango se despertó de su estado de inconciencia, encontrándose sumergida dentro de las llamas del fuego. El espeso humo le impedía respirar, y las llamas inmediatamente la rodearon sin piedad.
“¡Ayuda! ¡Ayuda!”
Gritaba Mango, sin importarle que estuviera desnuda. Agarró un palo y golpeó la puerta del almacén con desesperación; de inmediato, escuchó la voz del guardaespaldas que provenía de afuera.
“Lo siento, señora. Son órdenes directas del Sr. Ye. No se preocupe, el señor escogerá un buen cementerio para usted”.
De repente, Mango se paralizó.
¿Nathaniel la quería muerta?
¿Por qué?
¿Era porque estaba embarazada al igual que Macy? ¿Quería que Macy se convirtiera en la Sra. Ye, para que su hijo fuera el heredero legítimo?
“¡Nathaniel, eres tan cruel!”
“¡Eres capaz de hacerle daño a tu propio hijo!”
Mango se sumió en una profunda tristeza y lanzó un grito desgarrador.
“¡Nathaniel, te odio! Soy tan tonta por amarte tanto, como pude fijarme en un hombre tan desalmado y sin corazón. Si Dios me diera otra oportunidad, ¡Juro que pagarás tu traición!”
Las enfurecidas llamas hicieron que sus palabras desaparecieran en el humo. En ese momento, tenía mucha dificultad para respirar y le pesaban sus párpados. Sin poder aguantar más, cayó al suelo inconsciente dejando que el fuego le quemara la piel y le consumiera su alma...
Cinco años después.
Thomas, el asistente de Nathaniel, le entregó algunos documentos.
“Sr. Ye, esta es la información sobre la nueva diseñadora enviada por el Grupo H`J en los Estados Unidos. Se dice que ha llegado hoy a Ocean City. ¿Debemos enviar a alguien para que la recoja? He escuchado que es muy famosa en el extranjero, en especial por los preciosos autos deportivos que diseña. Si no fueran por los acuerdos con el Grupo H`J, no hubieran permitido que ella venga a apoyarnos”.
“¿Katherine?”
Nathaniel entrecerró los ojos ligeramente.
“Sí, su nombre Katherine”
Asintió Thomas rápidamente.
Katherine, era una diseñadora de autos deportivos que se hizo muy exitosa en los últimos dos años. Se decía que su primer trabajo, un automóvil deportivo llamado “Wings of Love”, había ganado el primer premio en el concurso internacional de diseño. Todos los Magnates del mundo ya anhelaban conseguir este auto, incluso lo reservaron antes de que saliera al mercado. Sin embargo, solo se fabricaban dos modelos exclusivos, pues eran demasiado costosos. Esto hacia que los coleccionistas más ricos del mundo lucharán para obtenerlos, incluso pagando grandes sumas de dinero en efectivo.
Como a Nathaniel le gustaban los autos deportivos, gracias a los convenios con el Grupo H `J, Katherine había llegado a Ocean City en persona. Thomas le recordó quién era ella, y el motivo de su llegada al Grupo Infiniverse. Entonces...
Nathaniel volvió a entrecerrar los ojos.
Al leer la biografía de Katherine, se quedó sorprendido al ver su nombre c***o.