Capítulo 47. Una noche sin permiso. A las últimas horas del día en el Departamento de Paulina. Las chicas habían escuchado el comunicado de Antonio y Sebastian, y no sabían que decir. -- ¿Y ahora qué vas a hacer? -- le preguntó Diana mientras le alcanzaba una copa con vino. Paulina miró por la ventana. La ciudad ya tenía luces encendidas. Su celular había sonado por enésima vez, ella no respondió. Ni siquiera se fijó quien era, se imaginaba que podrían ser más periodistas, o quizás Estefanía lista para molestar, o, pero aun su padre. Pero era Sebastián. -- ¿Qué voy a hacer? No lo sé. Pero si sé una cosa – les dijo, girándose hacia ellas. -- No voy a dejar que una cláusula escrita con letras pequeñas defina mi vida, supongo que mamá quería verme bien casada y... -- ¿Sonrió al recor

