Capítulo Ocho

1728 Palabras
⏤Dylan ⏤dije con la mano en el pecho, nos había dado un susto enorme. ⏤¡Dios Dylan! Por poco y me mandas a la otra vida. Mira que si lo hacías venía a estirarte las patas en las noches. ¡Estás loco hombre! ⏤y ahí estaba de nuevo exagerando, Zoey no era Zoey si no exageraba o dramatizaba absolutamente todo… aunque, claro, ella lo niega siempre. ⏤Lo siento mucho señoritas, no quise asustarlas. ⏤No te preocup... ⏤Zoey me interrumpe y me aparta un poco. ⏤No te perdono como dije casi me mandas a la otra vida ⏤esta vez soy yo quien la aparta para que no diga más tonterías. Dylan y yo reímos de verdad que con esta mujer no se puede. ⏤No le hagas caso. Como dije no te preocupes, ya tenemos que irnos, ¿verdad Zoey? ⏤le miro de forma amenazante. ⏤Oh, si, claro. Nos vemos, pero me debes una Dylan. ⏤Claro. Y como disculpa, las llevo a sus casas. ¿Qué me dicen?. ⏤¿Cómo crees? ¿Piensas matarme por segunda vez?. ⏤Zoey, ya superarlo mujer ⏤ruedo los ojos ⏤. Dylan, gracias pero no, está bien así ,no tienes por qué molestarte. ⏤No es molestía, de verdad. ¿Las llevo?. ⏤Bell, está bien, vete tú con él. Yo tengo algunas cosas que hacer antes de ir a casa. Nos vemos ¿Ok? ⏤Se despide con dos besos en la mejilla⏤. Y tú, cuídala ⏤Le señala con el dedo índice. ⏤Pero Zoey… ⏤¡Pero nada vete! ⏤En eso Dylan baja del automóvil y me abre la puerta del copiloto. Yo sólo lanzo una mirada fulminante a Zoey, quien se divierte con la situación. Traidora… ¿Para qué quiero enemigos?. ⏤Gracias ⏤Agradezco a Dylan y él vuelve al asiento del conductor. ⏤¡Adiós, mi amor! ⏤Grita Zoey mientras que el automóvil parte, y yo me despido con el dedo corazón. ⏤No sabía que Zoey era tan intensa ⏤comenta Dylan riendo⏤. Por cierto, ¿Cuál es la dirección de tu casa?. ⏤Eso no es nada comparando con lo que suele ser en otras ocasiones ⏤le indico donde debe ir para llegar a mi casa. ⏤¿De verdad? ⏤Sí, está algo loquita… ya sabes ⏤reímos⏤. Por cierto gracias por el capuchino y la dona, me alegró la mañana y no pude agradecértelo. ⏤No te preocupes. Qué bueno que te gustaron y que no fué una broma de mal gusto de tu amiga ⏤bromea. —Realmente la creo capaz de hacer algo así. Deberías de estar preparado para cualquier cosa, y más viniendo de ella —digo bromeando también. ⏤Tomaré en cuenta tu consejo ⏤me guiña el ojo. Eso hizo que me diera un vuelco a mi corazón. Dylan era un hombre muy guapo y tenía sus encantos, debía de admitirlo. Además de que era muy atento y amable. En un momento determinado ya habíamos llegado a mi casa. Dylan iba a bajar de nuevo para abrirme la puerta. Iba a detenerlo, pero ya había cerrado su puerta. ⏤Gracias por traerme ⏤le digo una vez fuera del automóvil. ⏤De nada. Espero que hayas disfrutado su viaje señorita ⏤dice haciendo una reverencia. Lanzo una risita. ⏤Si, gracias ⏤digo divertida con la situación, él se queda mirándome unos segundos e iba a mencionar algo cuando Alex hace su aparición. ⏤¡Mami! ⏤corre hacia mí y se abraza fuerte a mis piernas. ⏤¡Mi amor! ¿Cómo estás mi niño?. ⏤¡Súper Mami!, te extrañé mucho. ⏤Y yo a ti cariño. ⏤Hola Campeón ⏤lo saluda Dylan. ⏤¡Hola Señor del McDonald's! ⏤reímos ante su saludo. ⏤¿Qué tal tu día campeón? ⏤se agacha a su altura. ⏤¡Muy bien! Hoy jugué muchísimo. ¿Y tuyo señor McDonald's?. ⏤Se llama Dylan, cariño ⏤le digo sonriendo. ⏤Pero me gusta “señor McDonald” ⏤dice haciendo ojitos. ⏤No hay problema con el nuevo apodo, Anabell ⏤ríe y vuelve a la conversación con Alex⏤. Entonces, te divertiste un montón. El mío estuvo bien, gracias ⏤dice incorporándose y despeinando un poco el cabello de Alex⏤. Bueno me debo de retirar, buenas noches. ⏤Ok. Adiós y gracias una vez más ⏤me despido. ⏤De nada. Nos vemos Anabell ⏤se despide y el auto parte. En ese momento Alex y yo entramos a la casa. ⏤Hola Mónica, ¿qué tal? ⏤la saludo, ella se encuentra haciendo la cena. ⏤Hola Anabell, todo bien ¿y tú?. ⏤Bien Gracias ⏤voy por un vaso de agua al refrigerador. ⏤¿Mami? ⏤¿Si, cariño? ⏤respondo mientras tomo un gran sorbo. ⏤¿El Señor McDonald's es tu novio? ⏤la pregunta me toma tan de sorpresa que escupo toda el agua. Mónica ríe a carcajadas. ⏤No cariño, ¿Por qué lo preguntas?. ⏤Por nada Mami, sólo preguntaba. ⏤Está bien cariño, ve a ver un poco la televisión mientras me cambio, ¿Está bien?. ⏤Si Mami ⏤se retira de la cocina. Me quedo pensando, sin escuchar nada de lo que Mónica me decía. ⏤Bell, Bell, Bell, ¿me oyes?. ⏤¿Eh? Perdón, ¿qué decías? ⏤respondo y ella tiene una sonrisa burlona en su rostro a lo cual frunzo el ceño⏤. ¿Qué te es divertido?. ⏤Nada ⏤ríe y apaga el fuego de la cocina. ⏤Ya dime, no andes con misterios. ⏤Se ve que el "Señor McDonald's" te trae algo distraída eh! ⏤lo dice con una mirada pícara. Frunzo aún más el ceño. ¿Era en serio?, ¿qué le sucedían a estas chicas?, primero Zoey, ahora Mónica, solo faltaba Lexi⏤. Y deja de fruncir tanto el ceño te saldrán arrugas mujer. ⏤¿Es en serio? Claro que no. Es sólo un compañero de trabajo que me trajo como disculpa por darnos un susto a Zoey y a mí. ⏤Lo que digas chica ⏤me guiña el ojo. ⏤Pues sí, lo digo —me voy a darme una ducha que ya lo estaba buscando y desde luego mi cama también. Luego de ducharme, Mónica ya había preparado la mesa y nos sentamos a cenar mientras charlábamos sobre nuestro día. Después de una jornada tan cansada, era agradable compartir un momento tranquilo en familia. Si, Mónica ya formaba parte de la nuestra, a pesar del poco tiempo que llevábamos conociéndonos. La quería como una hermana menor y ella había demostrado lo mismo. Además de eso amaba a Alex como si fuera su sobrino y eso para mí era invaluable. No es fácil encontrar a alguien en quien confiar para que cuiden de tu hijo, pero ella lo hacía con tanto cariño que me sentía más tranquila al irme a trabajar. Después de cenar, Mónica se retiró. Alex y yo nos quedamos a ver un poco de televisión en la sala antes de dormir. Poco a poco mis párpados empezaban a cerrarse y entre parpadeos pesados, me quedé dormida. ⏤¿Mami? ⏤oí su vocecita a lo lejos⏤. ¿Mami? ¡Mami! ⏤el grito me sobresaltó por completo. ⏤¿Qué sucede cariño? ¿Estás bien?. ⏤Estoy bien mami ⏤Entonces ¿qué sucede pequeño?. ⏤Quería hacerte una pregunta… ¿puedo?. ⏤Claro que si mi amor. Pregunta lo que quieras. ⏤¿Quién es mi papi? —me miraba con sus ojitos llenos de curiosidad y ternura. Me quedé atónita y un frío repentino recorrió mi espalda. Esa pregunta no me la esperaba. Sabía que algún día me preguntaría por él, pero esperaba que fuera más adelante cuando fuera un poco mayor y no ahora pero es un niño y era obvio que tendría curiosidad de saber quién era su padre… no estaba preparada para responderle ahora, no sabía ni qué decirle ni como explicarle sobre ello. Apenas tiene cuatro añitos. Ojalá mi madre estuviera aquí seguro ella sabría qué hacer. ⏤¡Mami! ⏤¿Si cariño? ⏤¿Sabes quién es mi papi? ⏤Cariño… ¿por qué preguntas eso? ⏤Por que la mami de Goldie de la televisión dijo que una familia está formada por Mamá, Papá y los hijos. Maldita televisión… pensé por un momento que sería mejor restringir lo que ve. Pero no, no podía culpar a la televisión. Tarde o temprano me lo iba a preguntar pero creo que no tenía caso nombrar a alguien que ha decidido desconocer totalmente su paternidad. Al menos no por el momento. Cerré los ojos un instante, buscando las palabras, algo, cualquier cosa que no lo hiciera sentir incompleto ⏤Bueno, eso es cierto cariño. Pero la nuestra es diferente… está formada por una mamá, por dos abuelos que te aman muchísimo y un niño hermoso que eres tú —toco su naricita con el dedo índice y el me sonríe. ⏤Entonces no necesitamos un papá? —pregunta aún curioso. ⏤Creo que no. ¿Eres feliz mi amor? ⏤Si Mami. Entonces se lanzó sobre mí dándome un fuerte abrazo y sentí como mi corazón se calentaba al tenerlo así de cerca lo amaba muchísimo, esperaba ser lo suficiente para él. Escondí el rostro en su cabello, tenía mucho miedo de fallarle. ⏤Entonces todo está bien cariño —susurré, aún abrazándolo—. ¿Vamos a dormir?. ⏤Si… ⏤Bien, ve a acostarte mientras yo llevo las sábanas ¿de acuerdo?. ⏤Bueno Mami —asintió y fue corriendo a la habitación. Me quedé unos segundos sentada en el sofá, mirando al vacío, sintiendo que algo dentro de mí se había movido. Luego apagué la televisión y tomé las sábanas. Al entrar en mi habitación, ví que Alex ya se había quedado dormido. Se veía como un angelito con la respiración suave y tranquila. No sé cómo logré desviar su pregunta principal, pero lo hice. Solo espero que, cuando vuelva a surgir la misma pregunta, yo esté más preparada para responderle con la verdad que se merece. Lo arropé con cuidado y le di un beso en la frente. Fuí a la cocina por un vaso de agua y pensé en Dylan había sido amable, respetuoso… Incluso divertido hoy. Me sorprendía lo fácil que era sonreír a su lado. Pensé en Alex y recordé la forma en que Dylan le habló, cómo se puso a su altura, cómo se rió sin incomodarse por el apodo del "señor McDonald's". Sacudí la cabeza como si pudiera despejar esos pensamientos con un simple gesto. No podía darme el lujo de confiar tan rápido en alguien, no después de lo que viví, era mejor que me fuera a dormir suficientes emociones por hoy…
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