Después del hallazgo que Amy hizo, intentó sacarle información a Susan. No era correcto que siguiera buscando información sobre esa persona, pero la poco respuesta que le había dado su esposo no la dejaba descansar. Además, no sabía como pero había adquirido un malestar estomacal que la tenía postrada en cama. No podía soportar el olor de la comida que la señora encargada de la comida le traía. — Haré que el médico venga a la casa. — habló Kellan, pasándole una mano por la frente a la chica. Esta se veía muy pálida.—No tardará. Ahora que podía estar en calma con su esposa, comenzaban a ocurrir incidentes que lo dejaban inquieto. — Está bien. La llegada del doctor no se hizo esperar. Este le pidió a Kellan que saliera de la habitación en lo que atendía a la mujer, pedido que este rech

