Ian
Sabíamos que pasaría.
Desde que los ángeles dejaron de tener contacto con el mundo terrícola los vampiros y la magia oscura creció y se fortaleció. Sabíamos que llegaría el momento en que los demonios salieran del infierno rompiendo así la primera capa protectora, por eso estábamos preparados y no tardamos en acudir al llamado.
Mi manada, la manada Luna Llena, es la más fuertes de la tierra, y yo como el Alpha de los Alpha me convertí en protector de la humanidad; liberamos almas, derrotamos vampiros y mantenemos un equilibrio entre preservar la r**a humana y los licántropos, aunque yo aún no pueda tener crías al no tener a mi luna conmigo, porque sí, solo quiero tener cachorros con mi luna.
Mi lobo Max tiene alrededor de 180 años, pero yo en edad terrícola tengo 26. Mi lobo es impulsivo, posesivo y cruel cuando se enoja pero también es bastante sabio. Yo por el contrario soy noble y compasivo, pero brutal cuando debo serlo, soy fiel y maduro, me gusta cuidar lo que amo y soy líder por naturaleza, ¡Ah! … y soy dominante en el sexo, algo normal en los Alpha (aunque intento solo tener sexo en la época de celo, ya saben, me estoy guardando a mi luna).
Al recibir el llamado de ayuda nos pusimos en marcha. Los humanos se asustaban al ver un montón de lobos corriendo y más al verme a mí, que soy el triple de grande que un lobo normal, pero a dónde vamos nos acompaña una maga blanca, que borra de la mente de las personas los últimos minutos que nos vieron y así el balance sigue intacto.
Cuando nos estamos acercando siento un olor extraño, me gusta pero está mezclado con el horrible olor de los demonios Cambiones, un ser mixto entre demonio y humano, son los demonios más débiles pero al no saber cuántos saldrán decido llevar gran parte del ejército de la manada.
Cuando llegamos diviso que la fuerza policial ya hizo retén impidiendo la entrada de más personas a la estación de tren.
Yo soy el primero en entrar, hay mucho caos pero veo a … ¿una chica humana? De cabello largo caer al piso y esperar que una lanza la traspase. No lo pienso dos veces y me lanzó a salvarla, allí es donde alcanzo a percibir ese olor entre chocolate y cerezas, me giro a verla y gruño al ver su aura, no es el aura de un humano, es una mezcla de humano, ángel de luz y ángel oscuro.
* ¿Pero qué carajos? * Exclama Max desde el link.
—¿Qué eres? —le pregunto a la chica.
Pero ella lo único que hace es un intento de golpearme con la lanza que acabo de partir.
* Si será pendeja —Max se ríe extrañándome —, ¿o es que acaso no ve nuestro tamaño? *
—Debes aceptar que golpea duro para tener un poco de aura humana y tiene los cojones para golpear un Alpha —al verla correr conecto a todos mis soldados y les doy la orden que la protejan y le abran paso.
Arremeto contra otros Cambiones y dejo a cargo a Brandon, mi Beta, mientras salgo en dirección a la chica.
Me transformo en humano y gracias al hechizo de la maga no quedo desnudo. Al salir no me gusta la escena que veo, ella está siendo jalada por un oficial, inmediatamente lo detengo y la miro a los ojos, esos hermosos ojos cafés oscuro con sus pupilas dilatadas por la situación que acabó de vivir, la tomo en brazos y la llevo a un auto que prepararon para mí, un Jeep Wrangler n***o, subo al asiento del piloto y la miro.
—Espere, hay que regresar, algo está pasando en la estación, ¿Por qué nadie me escucha?
* ¡Oh Diosa de la Luna, pero que voz! *
—Cálmate Max —reprendo a mi lobo.
Por su olor sé que es mi mate y en otra situación me hubiese lanzado a ella sin preguntar nada pero ahora estoy más intrigado por su aura y estoy haciendo un esfuerzo sobrehumano por no marcarla en este preciso momento, si yo siento que esperé una eternidad no quiero imaginar cómo debe estar Max.
—¿Qué eres?
—¡¿Pero qué putas le pasa a la gente hoy que solo me preguntan eso?!
¿Gente?
Bueno, esta chica no tiene ni idea de lo que está pasando, y por la conversación que tenemos percibo que tiene un genio de los mil cojones, aunque una voz muy dulce que dan ganas de …
* Cálmate Ian, y si no paras el coche mi luna se va a tirar * ahí es donde caigo en cuenta de las palabras que acaba de decir.
—Si no detiene el auto ahora me voy a lanzar —me amenaza aparentando los dientes con tanta furia que se le nota por todo su rostro.
Si, definitivamente tiene una personalidad que me encanta, así que decido detener el coche para dormirla y llevarla a un lugar seguro, la golpeo justo en la nuca dónde se encuentra un punto de presión y ella cae en mis brazos, la vuelvo a acomodar en el asiento con su cinturón y es ahí donde la puedo observar mejor.
Es hermosa, a pesar de que está llena de líquido infernal, es delgada pero percibo que entrena, tiene un cabello largo, sus pestañas gruesas y onduladas, no tiene maquillaje y tiene una piel de porcelana, su brazo izquierdo tatuado le da un toque de chica mala, sus manos son delicadas y su tono de piel es medio.
* Es espléndida nuestra luna *
—Lo es, pero debemos ir despacio con ella, se acaba de enfrentar a una situación para nada bonita y yo la estoy secuestrando.
* No es secuestro, simplemente tomamos lo que nos pertenece *
—Es secuestro Max, y ahora déjame aviso a la manada que voy en camino con su luna —corto la conexión con mi lobo y me conecto con la manada, en especial las Omegas que se encuentran en casa, así tendrán todo preparado para asear y curar a la chica, la cual no sé su nombre y eso me tiene ansioso.
Después de una hora de viaje en auto llegamos a la manada la cual se encuentra en Ciudad de Oro, la ciudad vecina de Ciudad Azul, al llegar me recibe Adam, mi Gamma y el tercero al mando.
—¡Por la Diosa! Alpha esa chica huele horrible.
—Respeta a tu futura Luna —no puedo evitar gruñir aunque es cierto lo que dice.
Ante la noticia Adam se sorprende mirándome con sus ojos bien abiertos con un brillo de alivio al tener nueva líder y malicia porque sabe que la estuve esperando por mucho tiempo.
—¡Por fin! Ya era hora de que domen al lobito.
Vuelvo a gruñir. Brandon y Adam son mis mejores amigos y por eso les tengo tanta paciencia a sus chistecitos, aunque me lo esperaba, de los tres el único que no había encontrado a su mate era yo y por eso siempre me burlaba cuando ponían cara de pendejos frente a su pareja destinada por la Diosa Luna.
Llevo a la chica al segundo piso donde se encuentran las habitaciones, me adentro a la mía y voy directo al baño dónde María la líder de las Omegas me está esperando con la tina llena, la bajo con sumo cuidado y la dejo en manos de María.
—Sabes que hacer, te la encargo mucho, es la futura Luna de la manada y no es una chica común, estaré en la oficina pero apenas despierte me informas.
—Si Alpha.
Salgo directo al despacho pero antes vuelvo a mirarla.
« Ya quiero aspirar todo su olor, su verdadero olor ».
Han pasado dos horas durante las cuales tuve varias reuniones con Brandon, Adam y otros líderes; informé a todas las manadas lo sucedido, tengo varios soldados rondando tanto Ciudad de Oro como Ciudad Azul, ¡Ah! y obviamente mandé a vigilar a la madre de la chica que tiene un olor parecido al de ella. Al terminar María me informa que la Luna ha despertado así que decido salir de mi despacho.
Al cerrar la puerta me encuentro con la escena más graciosa y tierna que he visto, la chica, MI Luna está bajando las escalas como si hubiese acabado de robar, baja despacio y en silencio, y se pega un susto de muerte cuando carraspeó para que me vea.