Capítulo 4.

1794 Palabras
 Quería irme; el ambiente se había vuelto incomodo desde que decidí hacer una aparición en el salón. O por lo menos yo lo sentía así. Rubius y «Abril», charlaban animadamente, tal y como lo estaban haciendo anteriormente, solo que nos habíamos trasladado hacia la mesa para desayunar, pero realmente no tenía hambre, un nudo se había formado en mi estomago. No me consideraba una persona celosa realmente, en mi relación con Jackson tenía que soportar que al menos cinco chicas por día se acercaran a pedir su numero de teléfono; y si, eso me solía poner un poco nerviosa, sin embargo nunca sentí lo que me estaba pasando ahora. Era como si mi cuerpo estuviera hecho de gelatina, y un nudo se había instalado en mi estomago, generando un malestar horrible. Mi celular sonó indicando un mensaje y casi suspiro aliviada al ver que Vicky necesitaba que la llamara. -Ya regreso.-murmuré y me levante, aunque ninguno lo notó. Camine hacia el pasillo y marque a mi amiga, necesitaba enfocar mi mente en otro lado. ¿Por qué carajos me ponía celosa si sabía lo mucho que Rubén me quería? Era estúpida. -¡Laila!-mi amiga gritándome del otro lado del celular me saco de mis pensamientos. -Hey, ¿qué paso? ¿Por qué tanta urgencia? -¿Esta tarde estas libre? Necesito tu ayuda.-Victoria sonaba muy nerviosa. -¿Está bien el bebé?-pregunté asustada. Mi amiga estaba embarazada de varios meses ya, y cada vez que me llamaba alterada o preocupada me asustaba. -Si si, el pequeño Tommy esta bien, pero necesito tu ayuda en otra cosa.-respondió y escuche una puerta cerrándose de su lado. Rodé los ojos y me apoye en la pared que había a mi lado. -No me dirás, ¿verdad?-deduje. -Mm mm.-escuché como negaba- Tendrás que confiar en mi. -Okeey.-murmuré- ¿A qué hora quieres que vaya? -Mmm... ¿a las cinco te viene bien? -A las cinco me viene perfecto. -Entonces a las cinco ven.-dijo y antes de poder saludarla, cortó. Solté una pequeña risita y aleje el celular de mi oreja; nunca saludaba, era algo normal en ella. No quería volver a la sala. Si, lo sé, iba a parecer muy descortés, pero realmente no me sentía con ganas. Camine arrastrando los pies hacia la habitación; estaba cansada. Mi cuerpo se sentía pesado y tenía ganas de llorar. Cerré la puerta detrás de mi y me lance a la cama. Necesitaba distraer mi cabeza, por lo que decidí mirar videos; sabía que iba a continuar sobre pensando las cosas, por lo que necesitaba una distracción directa, sin embargo, en mi inicio, encontré un video de uno de los canales fans de justamente mi novio que se titulaba «¿Elrubius y su novia?». Eso me sorprendió y no pude evitar darle click. Con Rubén habíamos hablado sobre salir y mostrar nuestra relación; él era un youtuber lo suficientemente famoso como para que cada vez que salíamos a comprar algo o a tomar un simple helado, por lo menos un par de fans se acercaran a nosotros. Y no molestaba para nada, sin embargo él estaba un poco asustado por la repercusión que nuestra relación podía llegar a tener con algunas de sus fans; así que todavía no habíamos aclarado nada. Pero era obvio de que nos habían visto juntos, y no se podía evitar que comenzaran a sacar conclusiones. En el video claramente se nos mostraba a él y a mi, en el súper, en el cine, incluso alguien había tomado una foto de un desayuno que tuvimos junto a todos antes de que él y yo fuéramos pareja. Pero luego me sorprendió que pusieran uno de los lives de Rubén, uno que no había visto. Mi novio estaba reaccionando a un video que le habían mandado sus suscriptores, y al terminarlo, dice «Esto le gustaría a Lai», pero se da cuenta y un leve sonrojo cubre sus mejillas y rápidamente suelta un «Necesito recargar agua» y escapa. Ya luego cuando vuelve cambia de tema a pesar de que el chat esta petado de preguntas. No pude evitar que una pequeña sonrisa se formara en mi cara. Me emocionaba saber que a él le pasaba lo mismo que a mi cada vez que encontraba algo que le podría gustar; solo que él lo había soltado en un mal momento. El video continuo, y el chico que lo narraba, mostraba mi canal, comentando sobre mis videos. Sin embargo hacía ya un tiempo que no publicaba nada, me habían contratado como editora y me pagaban bien, por lo que ya no tenía tiempo de editar mis propios videos. El chico hablaba muy bien de mi, y los comentarios que había también decían cosas buenas; eso me alegraba. Salí de la aplicación y decidí entrar a Twitter, ahí realmente era lo serio. Y si, había un hashtag entero sobre mi relación con Rubius. Había gente que lo tomaba bien, gente que lo tomaba mal, y gente que ni siquiera le importaba. Me causaba gracia porque todavía no habíamos salido a confirmar nada, ni siquiera hacíamos videos juntos; sin embargo los fans ya estaban pendientes de todo. Suspire y decidí luego hablarlo con Rubén. Al fin y al cabo eran sus fans y en este caso él tenía la palabra final. Sin pensar mucho más en nada, puse un drama coreano para pasar el rato. Algo se tiro encima de mi despertándome rápidamente. No sabía en que momento me había dormido, pero lo había hecho; ahí estaba yo, toda babeada y despeinada. Abrí los ojos y me encontré con Rubén, quien luego de tirarse sobre mi, había decidido tumbarse a mi lado. -Hola.-murmuró sonriendo. Le di una pequeña sonrisa, y me gire dándole la espalda. Tenía sentimientos encontrados, quería hablar con él, pero a la vez no; quería decirle todo lo que me pasaba, pero no quería sonar intensa o algo así. Por lo que decidí no decir nada e «ignorarlo», aunque no estaba realmente haciéndolo, solo necesitaba aclarar mi mente... no hablándole por un rato. Su brazo rodeo mi cintura y me pegó a él. -¿Estas cansada?-preguntó posando su nariz entre mi cuello y mi hombro. Contuve mi respiración. Si, lo había estado hasta antes de que comenzara a repartir besos por todo mi cuello. Sin embargo, no respondí. Necesitaba mantenerme firme, no iba a olvidar tan fácil como me había ignorado y olvidado. Su mano comenzó a acariciarme levemente el abdomen, y no dejo de besarme, a pesar de que no había obtenido ninguna respuesta por mi parte. Acomodó mejor su cuerpo quedando casi encima de mi; ya sus manos habían dejado de acariciarme con sutileza, ahora recorrían todo mi cuerpo sin vergüenza. -¿Quieres que continuemos lo de anoche?-preguntó en un susurro, provocando un escalofrío en mi. A pesar de que mi cuerpo estaba más que dispuesto a esa propuesta, mi yo no; me sentía desganada y un poco triste, y me molestaba que él no se diera cuenta de lo mal que la había pasado. -No quiero.-respondí, y como pude me escape de sus brazos, dejándolo confundido. Camine hacia el baño y quise llorar. Así no era yo, me gustaba decir las cosas de frente, siempre decía las cosas de frente; pero en este momento no podía, no me sentía segura de nada. Y mis miedos e inseguridades se iban sumando. Respire y trate de dispersar mi mente. Mire la hora en mi teléfono, «16:24»; mierda, ¿cuanto había dormido? A las cinco tenía que estar en lo de mi amiga, sino estaba segura que moría mañana. Sin gastar mucho tiempo más, me duche con rapidez, tratando de que el agua se llevara todo lo que pasaba por mi mente. Cuando terminé de secarme noté que no había entrado con ropa, y claro, si no sabía que iba a bañarme. Suspire, y sosteniendo la toalla a mi alrededor salí. Rubén no estaba en la habitación, y claro ¿qué esperaba? Luego de cambiarme con rapidez y muy sencillamente ya que solo iba a ir a la casa de mi amiga, salí hacia la sala, encontrándome con Rubius sentado en el sofá jugando con su celular. Noté que se había cambiado la ropa. Estaba muy lindo. -Estas muy lindo.-admití tomándolo por sorpresa, ya que soltó el celular y me miro. -¿Estas enojada conmigo?-preguntó, sorprendiéndome también. -Te dije que estabas lindo, ¿en donde eso te hace sentir que estoy enojada contigo?-me hice la tonta. Sabía el porqué de su pregunta, pero no quería decirle, todavía no quería hablar de eso; necesitaba enfriar mi cabeza del todo. Rubén suspiro y se levanto. -Me voy, no me esperes para cenar.-declaró y agarro las llaves del auto. Lo mire confundida. -No sabía que hoy te juntabas con los chicos.-dije. Siempre que Rubius salía era para verse con alguno de nuestros amigos, iban a cenar a algún lugar o directamente iban al departamento de alguno para jugar o ver alguna película. -No me junto con ellos.-respondió frío. Oh, mierda, se había enojado conmigo. -Ah.-murmuré mirando el piso. -Voy a cenar con Abril.-declaró e inmediatamente lo mire; él ya lo estaba haciendo; había una pequeña tensión entre nosotros- Mmm, con que eso es, ¿verdad?-dijo sonriendo, sorprendiéndome por su cambió de actitud; y ahí fue cuando me di cuenta. Me reprendí mentalmente por reaccionar tan rápido. -¿Qué cosa?-pregunté con la voz baja. -Estas celosa.-concluyó y comenzó a acercarse, haciendo que instintivamente mi cuerpo fuera hacia atrás. -¿Por qué asumes que estoy celosa?-pregunté, y mi espalda choco contra la pared detrás de mi; dejándome casi sin escapatoria. Me sentía muy chiquita atrapada, y me hizo acordar a las películas, era como si todo lo cliché que podía pasar en una escena de una película adolescente romántica, me estuviera pasando con Rubén. -Porque lo estas, apenas digo su nombre, tu cara se transforma.-murmuró. Estábamos muy cerca, su aliento se mezclaba con el mío y podía ver la profundidad de sus ojos. Me estaba mareando, no podía pensar con claridad. Mi cuerpo estaba tenso, y necesitaba aire, espacio. -No es verdad.-susurré. Si lo era, dentro de mi, gritaba, quería preguntarle millones de cosas, quería sincerarme y quitarme todo el peso que venía cargando. Pero no podía. -Si lo es.-habló y quise llorar. Mis emociones me estaban superando, necesitaba salir de ahí. Con un poco de valor, puse mis manos en su pecho y empuje suavemente, alejándolo lo suficiente para salir de su atrape. -Necesito irme, le prometí a Vicky que iba a ayudarla... te veo luego.-susurré con la cabeza gacha. No quería mirarlo. Me sentía una estúpida por desconfiar de él, por ponerme celosa de su amiga; me sentía estúpida por no poderle decir un simple «te amo».
Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR