Verdades Ocultas

Capitulo 03

Eduardo

-Y bien, ¿ya elegiste a la nueva candidata? - pregunta Esteban mirándome pícaro.

-Así es y cada año llegan mejores - aseguro abotonando la camisa.

Y justo hoy se muda al departamento con su madre, según me dijo la hermana no quiso.

No pretendo nada serio con ella es solo sexo.

-Y tú no has encontrado algo bueno, aparte de estar en los medios cada media hora - hablo serio arreglando mi corbata.

-Exageras hermanito cada dos horas sacan algo nuevo pero no es mi culpa - dice y ruedo los ojos.

No hay remedio para Esteban.

-Y si,hay una chica de ojos color miel que no da su brazo a torcer , pero es hermosa - asegura risueño y lo miro burlón.

-Hace semanas la conozco pero es muy cerrada conmigo.- bufa con cansancio y rio.

-Oh, así que ya hay una candidata que te ha flechado -hablo burlón.

-Pero haré lo que sea para que me de una oportunidad , no creo que dure tanto haciéndose la dura, osea mirame quien se puede resistir a este bombón - habla mirándose al espejo.

-Ella dará su brazo a torcer por las buenas o las malas - asegura sombrío y lo examinó con la mirada, solo espero que no se meta en problemas.

-No te metas en líos recuerda que nuestro apellido es muy importante, no le busques más problemas a nuestro padre. - sentencio serio.

-Si como digas - rueda los ojos,me acomodo el reloj de oro con incrustaciones de diamantes.

-En fin,¿ ¿el plan de hoy si va o no? - pregunta girando para mirarme.

-Si ¿por qué no? - hablo restándole importancia.

-Por ahí a las cuatro me mandas la dirección - hablo y tomo mi celular.

-Claro me hace falta visitar mi amado club - habla y se levanta para salir.

-Bien adiós- hablo serio.

-Adiós hermanote- dice.

Bufo y salgo de mi habitación.

Hace dos semanas que no veo a la pelinegra y no es que quiera involucrar me con ella no parece ser de mi estilo, solo que esas veces que choque con ella me pareció muy divertido ver como se enoja.

Es algo que ella tiene que no lo he visto en las demás mujeres, quizás solo sean ganas de molestarla.

-Hola guapo - saluda Catherine la encargada del lugar.

-Estoy ocupado ahora no - hablo serio y ella bufa.

-Voy de salida - informo y ella me suelta.

-Bien - rueda los ojos y me deja pasar.

No porque hayamos tenido sexo una que otra vez signifique que ella sea mi centro de atracción.

Aún no ha llegado la mujer que ponga mi mundo al revés y no creo que la encuentre tampoco,prefiero no involucrarme en una relación amorosa, pienso que es perder el tiempo.

-Buenos días señor - saludó el de seguridad y me abre la puerta solo asiento con la cabeza levemente y salgo de ahí.

Subo a mi auto y arranco hacia mi agencia.

Esa chiquilla es toda una fierecilla en la cama, creo que e hecho una buena elección al elegir la, no solo por el buen sexo que me brinda si no que se luce muy bien en las pasarelas.

Ya en poco tiempo está en varios catálogos.

Tengo la intriga de saber quién es su hermana, pero creo que eso pronto se sabrá además de que algún día la tendrá que ir a visitar la y para eso están los de seguridad del lugar para avisarme quien entra y quien sale del lugar.

Llego a la agencia y veo a todas en fila, hoy se hará la sesión de fotos para la nueva cara de las empresas de ropa y asesoría más importantes.

Hablo con Fiorella sobre los contratos de las modelos y todo los beneficios que obtendrán.

-¿Y qué harás con la nueva?- pregunta mirándome.

-Ella será la new face de la empresa, con ese rostro se que le sacaremos provecho.- aseguro mirándola.

-Ya veo que te dejo encantado - asegura pícara y sonrió malicioso.

-Mmm, digamos que no es tan mala - digo y ella se va acercando peligrosamente.

-Pero tu eres la mejor - aseguró y la siento en mi regazo.

-Fuiste la primera en la agencia - aseguro y ella va quitando me la corbata.

-Pero me reemplazantes - dice mientras beso su cuello.

-Siempre serás mi favorita.- susurro y ella sonríe

-Demuéstralo - pide juguetona y sonríe.

-Con gusto - hablo divertido.

Nada de lo que hago es obligado si ellas aceptan bien, aunque jamás me han rechazado y se que nunca lo harán.

Nunca me he molestado por obtener lo que quiero cuando lo quiero,mi vida es así y no la cambiaría por nada ni nadie.

Maya

-¡Maya! - grita la vieja amargada entrando al lugar de lavado.

-Señora - respondo neutral.

-Quiero que limpies las últimas habitaciones que faltan y de último pasa por la habitación 320 quiero que esté impecable ese lugar - ordena molesta.

-Si señor - hablo cansada y ella se marcha.

Que vieja tan amargada, en fin desde que se fue mi hermana y madre he estado más sola que nunca las extraño mucho, cada vez que llego a casa se siente más sola y vacía.

Por lo menos ya he pagado unas deudas aunque ahora la deuda que me importa es la casa, hace dos días me enteré que mi madre hipoteco la casa,también tengo que pagar unos libros que necesitaré en la universidad y claro pagarle al instituto ya que tomó clases privadas para no atrasarme como solo son dos días de clases que veo.

Ayer con un poco de dinero que tenía decidí comprarle unas cositas a los niños que cuida la señora Amelia, ella a recibido esos niños que estaban desamparados en la calle, poco es lo que ella les puede brindar y por eso quiero ayudarlos , esas criaturas no tiene la culpa de estar así,nadie pide venir al mundo y menos para sufrir.

-Carla, ¿sabes el por que esta hoy amargada Catherine? - pregunto y niega con la cabeza.

-No se, quizás la dejaron - ríe suave y niego con la cabeza diferida.

-No siempre un hombre es el problema -aseguró tomando unos utensilios.

-Eso lo dices tú que nunca tienes a nadie a tu lado - asegura.

-No necesito a nadie a mi lado - aseguro y ella rueda los ojos.

-Maya uno siempre necesita a un amor, siempre se necesita uno - asegura y tuerce el labio.

Tal vez tenga razón pero mi mente solo está concentrada en poder terminar el último semestre que falta para graduarme y poder pagar esas deudas que mágicamente aparecieron a mi nombre, y que creen, fue mi madre , no se para que sacaba tanto dinero emprestado quizás solo no me decía para que no me preocupara,o ¿ quien sabe? .

Limpio, ordeno y acomodo cada habitación que me han asignado, gracias al cielo hoy no tendré turno en el restaurante, aunque sea hoy podré descansar y la mejor manera de hacerlo es ir a visitar a esos hermosos niños , me encanta estar rodeada de niños escuchar sus risas ver que son tan felices la sonrisa de un niño es la más sincera de este mundo para ellos todo es felicidad y alegría, ojalá yo pudiera ver el mundo a mi alrededor así.

Llegó a la habitación 320 y entró, al parecer no había nadie aquí y mucho mejor.

La habitación es muy amplia y parece que es de alguien muy importante para el hotel, un socio quizás.

No pasa mucho tiempo cuando escucho como alguien carraspeó su garganta, me incorporo y miro al responsable.

-Oh, así que te han enviado a ti- habla sonriendo pero rápido desaparece.

-Disculpe, no sabía que estaba aquí - hablo sonrojada.

Por los dioses se encuentra con sólo una toalla alrededor de su cintura está recién bañado y sus cabellos gotean haciendo que se vea tan sexy.

-Oh, tranquila solo has de cuenta que no estoy - habla restándole importancia.

-No, ya me voy - aseguro tomando los utensilios de limpieza.

No doy dos pasos cuando él sujeta mi mano.

-No lo creo - asegura.

Me va a dar un colapso está muy ,muy cerca de mi.

¿Por qué estoy nerviosa?

-Po… Por qué no…no.-balbuceó nerviosa.

Y me suelto,veo como frunce el ceño.

-Es que aún no terminas - dice y señala la cama aún desatendida.

-Oh - es lo único que digo.

Hago espacio entre él y yo, paso rápido hacia la cama y la tiendo lo más rápido possible, siento como su mirada está clavada en mi espalda.

Después de terminar y dejarla tendida me giro y chocó con el.

¿por qué no se viste ya este hombre?

Esto es muy incómodo.

-Permiso, ya está listo - aseguro y el se hace a un lado.

No lo miro y me hago a un lado para pasar hacia la salida.

-Espera - dice ante que salga.

Me giro y lo miro a los ojos.

-¿Cómo te llamas? - pregunta serio.

-Maya - menciono y él sonríe rápidamente

-Adiós Maya - se despide y hace algo que no creí que haría.

Deja caer su toalla y oh dios mío, está a mi vista tal y como dios lo trajo al mundo.

Rápido me giro y salgo de ahí tan roja como un tomate.

Al alejarme puedo escuchar se risa.

-Estúpido - susurro y entro al ascensor.

-Es un idiota un idiota muy sexy pero igual no se le quita lo idiota - aseguró llegando al cuarto de lavado.

-¿Quien es idiota? - habla Carla a mis espaldas.

Doy un grito al aire y suelto lo que tengo en mis manos.

-Por dios mujer casi me matas del susto - hablo colocando mi mano en mi pecho tratando de regular mi reparación.

Ella ríe al ver mi cara de susto.

-Ya relajante - dice y me ayuda a levantar todo.

-¿Quien es idiota? - pregunta nuevamente.

-Nadie - hablo restándole importancia.

-Si claro estabas refunfuñando y se que era de un hombre - asegura sonriendo.

-Nadie importante es solo un cliente estresante nada más - digo restándole importancia.

-Si aja,nadie - dice burlona y ruedo los ojos.

-¿Por lo menos es guapo?- pregunta y la miro.

En ese momento me llega la imagen del hombre desnudo.

-Oh, te sonrojastes - habla con emoción y empieza a reír.

-Carla - hablo fulminando la con la mirada.

-Ya tranquila - dice y ríe suave.

-Me voy - informó metiéndome al vestidor.

-Aún que sea dime como se llama- pide y ruedo los ojos.

Antes de decir algo Carla es llamada por Catherine.

Me cambio para ir me, ya son las 5 de la tarde.

Hoy no tengo que ir al restaurante, hoy podré descansar.

Salgo del lugar y me encaminó hacia la parada de buses mientras espero veo una niña sola.

Miro a su alrededor pero no veo a alguien que la acompañe, la niña va llorando e intenta cruzar la calle, nadie hace nada.

Veo un auto aproximarse a toda velocidad y no se como ni en qué momento tomo a la niña y la empujó hacia la acera, no me dio momento de esquivar el auto cuando escucho las llantas rechinar.

Lo único que siento es un empujón haciendo que mi cuerpo caiga bruscamente al duro concreto.

Intento levantarme cuando derrepente veo una figura grande enfrente de mi.

-Acaso te has vuelto loca, cómo pudiste atravesar te - habla duro mientras hago muecas de dolor al ayudarme levantar.

Dios ¿por qué otra vez el? .

-¿Acaso no ves por donde vas? - hablo seca sin mirarlo.

-Tu fuiste la que se atravesó - asegura serio.

Me suelto de su agarre y lo miro.

-Si no hubiera sido yo podrías haber matado a esa niña- hablo molesta señalando a la niña que al parecer está con sus padres.

-Señorita gracias al cielo que no le paso nada, mil gracias por salvar a mi pequeña - habla la señora con lágrimas en los ojos.

-Tranquila no se preocupe solo cuide la bien, hay mucho peligro. - digo con una sonrisa.

Siento que todo me da vuelta y me toco la cabeza.

Sangre

-Maya - escucho que me llaman a lo lejos.

-Maya ven.- hablan y siento que toman mi mano.

-No me dejes - susurro aturdida y caigo desmayada perdiendo totalmente mi conciencia.

Eduardo

-¡Maya, Maya!- la llamo sosteniendo su rostro.

-Por dios señor por favor ayude la - habla con miedo la señora.

-Puede estar tranquila me encargaré - aseguró serio.

Tomo a Maya en mis brazos y la dejó en el asiento del copiloto.

No se como se le ocurre hacer semejante tontería poner en riesgo su vida por el descuido de otros.

Se que debí ver la pero no iba excediendo velocidad ni nada, sé manejar bien.

Todo es culpa del descuido de ellos como van a despegar la mirada de una niña.

Y Maya se le dio por jugar a la heroína, acaso perdido la cabeza como pudo hacer eso, estoy molesto con ella por ponerse en riesgo así.

Giro mi cabeza a un lado para mirar a Maya aún está inconsciente y con una pequeña herida en su cabeza.

-Llegamos Maya - susurro para luego bajarme y llevarla a dentro del hospital.

Por dios esta mujer está loca definitivamente,como se es que prefiere poner en peligro su propia vida por alguien más..