INTRODUCCIÓN / CAPITULO 1
¿Cuál sería lo peor que le puede pasar a alguien? Pues ver algo que nadie más puede ver, y más cuando quien lo ve es un niño pequeño, no es fácil para nadie sentir que algo más está contigo cuando comienzas a percibir algo paranormal. Para nadie es un secreto que la malo existe y ataca al más vulnerable o algunas veces al más fuerte volviéndolo débil.
Al principio da miedo ya que no sabes cómo lidiar con eso, pero siempre habrá alguien que te pueda ayudar.
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La historia que se va a contar a continuación no es la típica historia de, espíritus, miedo, gritos o más. Esta historia es diferente ya que será diferente en el aspecto de la protagonista, ya que en vez de sentir miedo buscara la solución o una explicación del porque ella puede ver más allá de la muerte.
Recuerda ver más allá de la muerte no solo es un don sino también una maldición.
INTRODUCCIÓN
La historia que voy a contar no es para nada normal, algunos creerán que es una locura todo lo que contaré, pero en realidad no es así, todo esto es real, que ustedes no quieran creer no significa que nada de esto no exista.
Puede que suene loco pero en realidad todo lo que veo y siento es real, mis padres intentaron ayudarme y me llevaron con un psicólogo luego con psiquiatra y nada, al parecer ellos pensaban que al mandarme con unos profesionales mi vida cambiaría, pero al contrario empeoro, ya no puedo distinguir que es real y que no. No me asusta porque ya aprendí a vivir con eso, pero me molesta porque cada vez que alguien se me acerca comienzo a ver cosas que nadie más ve.
No sé qué es lo que tengo, lo único que sé es que viviré con esto siempre, no importa lo que haga nada ni nadie podrá ayudarme.
Unos me critican, me señala hasta incluso se apartan de mí porque según ellos estoy "loca", si solo pudieran ver lo que yo veo nadie me juzgaría ni se burlaría, al contrario me entenderían y ayudarían.
Mis padres ya no saben qué hacer conmigo, ellos ya no pueden ayudarme, piensan que en algún momento les haré daño y no lo haré, nunca lo haría, son mis padres.
Sé que mis padres me aman a pesar de ser rara, a pesar de ser... Diferente.
CAPITULO 1
Flashback
Estaba en la sala dibujando sobre la mesa del centro, comencé a escuchar pasos en la cocina pero no le tome importancia ya que sabía que ocurriría otra vez, vi una sombre de reojo y que no quería voltear, pero el miedo me gano y me senté por completo en el suelo y vi hacia la puerta de la cocina, estaba cerrada vi hacia debajo de a puerta y había una sombra detrás de la puerta, se movía de lado a lado como si estuviera bailando, sabía que era una mujer porque vi su vestido, estaba descansa, luego comenzó a cantar una canción, de repente todo quedo en silencia y la puerta se comenzó a abrir lentamente, tape mis ojos con mis manos por unos segundos, al destaparlos ya había nadie, solo yo. Suspire y volví a ver hacia mi dibujo y enfrente de mi estaba una mujer sentada, tenía las manos sobre la mesita y me veía directamente. Cerré los ojos con fuerza e imagine cualquier lugar, al abrirlos... La mujer estaba parada a mi lado, lo note porque vi e reojo sus pies. Grite con fuerza y ella coloco sus manos sobre mi boca y me susurro al oído: “Esto es solo el comienzo de tu infierno” y después desapareció, la sala estaba demasiado fría y me fui al cuarto con mi mama.
Miré a mí alrededor, con el corazón todavía acelerado casi se me salía del pecho. Mi mamá solo me abrazaba intento preguntarme que había paso, pro no podía decir ni una palabra. Lo que había visto en la sala me asusto demasiado.
Fin Del Flashback
“No quiero que me dejes”
Año: 2008
9 años
¿Por qué esto me está pasando? ¿Qué es todo esto? ¿Por qué solo yo puedo ver estas cosas? No estoy loca, sé que no lo estoy. No entiendo qué me pasa, intento borrar esas imágenes de mi mente pero no puedo, ya no sé qué hacer. Cada vez más siento que las voces toman vida por si sola y ya no puedo controlar eso. Es difícil poder explicarlo porque nadie logra comprenderme.
- Mamá! .- Grité con fuerza desde mi habitación -. MAMÁ!! Por favor ayúdame.
Escuche los pasos de mamá por el pasillo, entró corriendo a mi cuarto y se acercó a mí tratando de tranquilizarme. Ella intentaba entender lo que me pasaba pero no podía aun así no me dejaba sola porque sabe lo que siento y lo que sufro. Sé que todo lo que ellos están pasando conmigo es muy duro y difícil para ellos y sobre todo para mí, yo la verdad no entiendo nada de esto, lo único que puedo pensar es que alguien nos hizo algo malo por maldad o que se yo, lo único que quiero es que todo acabe o por lo menos que alguien aparezca para que me ayude.
- Ya paso mi amor .- Intenta hacer que respire con calma -. Cálmate mi niña, ya estoy aquí .- Me abraza -. Tranquila mi amor, sabes que no te dejare sola.
Mi mamá es la que más sufre por mí, ya que cuando algo está pasando lo puedo notar en su mirada. Mi papá intenta consolarla y hacer que se calme un poco pero a veces no lo loga, yo por mi parte intento concentrarme en otras cosas para no pensar en nada y es en ese momento que comienza lo horrible para mí. Yo sé y siento que alguien va a parecer y me va a ayudar pero eso será más adelante por ahora yo lo tengo que controlar, tengo que intentar hacer amigos aunque sea uno, pero sé que será difícil. Muchos me dicen loca y otros me tienen miedo, porque piensan que eso es contagiosos o que les hare algún daño, pero no es así, yo solo quiero ser aceptada.
- Haz que se vayan, mamá .- Comencé a llorar en su hombro -. Haz que se vayan. Ya no quiero escuchar esas voces, cada vez son más fuerte y no puedo hacer que se callen, intentan decirme algo pero simplemente no puedo escuchar y tengo miedo .- La abrace con fuerza, no quería soltarla -. No estoy loca mama, de verdad que no lo estoy.
- Tranquila mi amor .- Acaricio lentamente mi cabello -. Ya pasó. Sabes que haría lo que fuera para poder ayudarte mi niña, no me gusta verte de esa manera y yo sé que tú no estás loca.
Me aleje de ella y vi a mi alrededor todo estaba tranquilo, ya no había nada en mi habitación, solo mi mamá y yo. Mi mamá acaricio mi mejilla y secó las lágrimas, me miró atentamente y una cálida sonrisa apareció en su rostro. La abrace fuerte, no quería soltarla nunca.
- No quiero que me dejes .- Me aferre a ella -.
- Nunca lo haré, mi niña .- Contesta -. Siempre estaré para ti.
Sé que ella intenta entenderme y ayudarme, pro al decirme eso sé que está mintiendo pero finjo creerle para que piense que estoy tranquila y que ya no tengo miedo. Esto es algo con lo que debo aprender a vivir aunque sea difícil, ni siquiera conozco a alguien que tengo lo que yo o que por lo menos si pueda ayudarme de verdad, es tan complicado todo esto que solo quiero dormir para no pensar ni sentir nada de esto. Solo quiero poder estar un día sin ver nada esas cosas feas ni escuchar esos sonidos que por más que pueda no logro entender lo que intentan decirme.
Año: 2010
11 años
- Papá! .- Llame su atención -. ¿Qué hacemos aquí? .- Pregunté con curiosidad -.
Se agacha, hasta quedar a mi altura.
- Aquí te van a ayudar, princesa .- Acaricia mi mejilla -. Aquí te quitaran esas voces de tu cabeza.
¿Ayudarme? Pensé que nadie podía ayudarme. Muchas persona solo se van cuando mis padres les dicen lo que me pasa, algunos no creen y se burlan otros simplemente se van. Es raro para mí que mis padres hayan conseguido ayuda, ya que lo que me pasa no es un enfermedad sino algo más y eso lo tengo claro, yo los entiendo y sé que no ya no saben qué hacer o a donde ir y pues buscan ayuda con doctores aun ellos sabiendo que de nada servirá porque no me podrán ayudar en nada. Es dinero perdido pero no lo quieren entender. Me tienen que llevar con alguien que sepa de lo paranormal pero no quieren, creo que eso les asusta más que a mí, pensar que puedo tener algo pegado a mí.
Tome la mano de papá y entramos a la clínica, mamá iba adelante ya que ella hablaría primero.
Mamá terminó de hablar con la enfermera, nos sentamos y esperamos a que me llamaran.
- ¿Si podrán ayudarme, papá? .- Pregunté mirándolo -. Espero que sí porque las voces son cada vez más fuertes.
- Si, princesa .- Me sonríe -. Aquí te ayudaran.
Mamá lo miro y suspiro.
Espero que puedan ayudarme, ya no puedo ni dormir, antes lo hacía, pero esas imágenes se hicieron cada vez más grande y las voces más fuertes impidiendo que duerma.
Annie Morgan, escuchamos a la enfermera llamarme, nos levantamos de nuestros asientos y nos acercamos a ella.
- El doctor ya puede atenderla .- Mamá asintió sonriendo y entramos -.
Papá, no quiso entrar con nosotras. Y sabía el porqué.
- Hola, Annie .- Me saluda el doctor -. ¿Cómo estás?
- Estoy muy bien .- Sonreí -. ¿Usted me ayudará? Papá me dijo que si me podrán ayudar. Dígame que si por favor, ya no quiero escuchar esas feas voces ni ver esas feas imágenes, ya no quiero. Yo solo quiero poder jugar sin asustar a mis amigos ni a nadie. Es que ya casi amigos no tengo.
Vio a mi mamá y luego a mí.
- Claro que sí, pequeña .- Sonreí feliz -. Yo te ayudare ya lo veras.
- Mamá, ¿escuchaste? El doctor podrá ayudarme .- Estaba feliz -. No sabes lo mucho que espero que alguien me pudiera ayudar.
- Si lo escuche, mi amor .- Me sonríe -.
Que ingenua fui al creer que el doctor podría ayudarme, ese día algo me atormentó toda la noche al tal punto de salir corriendo de mi casa.
Estaba en mi habitación, mamá estaba a mi lado acariciando mi cabello para hacerme dormir, siempre lo hacía. Al estar dormida, mamá beso mi frente y salió de la habitación.
1:00am / 2:30am /3:00am
No podía dormir, me incorporé en mi cama y observe toda la habitación oscuridad total y completo silencio. Comencé a escuchar susurros por todas partes, intentaba buscar pero nada, tapaba mis oídos y cerraba los ojos fuerte intentando ya no escuchar más. Los susurros se volvieron más fuertes volviéndose gritos, gritos fuertes. Esto ya no es normal, intente levantarme de la cama pero no podía, era como si algo tratara de que no me levantara. Algo me jalo del cabello haciendo que quedara acostada, no tenía la sabana sobre mí ya que esta cayó al suelo, estaba asustada por lo que podía pasar en cualquier momento.
Comencé a llamar a mi mamá pero no venía.
Segundos después los gritos desaparecieron, comencé a respirar con dificultad el sudor cubría mi frente, me senté en la orilla de la cama, hasta que siento una brisa fría pasar por mis hombros, sentía que ya no podía tener control de mi cuerpo.
Me levanté de la cama y salí de la habitación.
Lo último que recuerdo fue que mamá intentó detenerme pero salí corriendo no sé a donde. Lo único que me dijo mi papa fue que me encontraron sentada enfrente de un árbol y hablando pero no había nadie más ahí.
Todo estaba oscuro.
Año: 2012
13 años
Me encontraba en otra clínica junto a mí, mamá. Esta vez no era un psicólogo era un psiquiatra, si, mis padres ya creían que estaba loca. Pero no los culpa, ya ni se si ellos son real, porque lo que me atormenta se disfraza e mis padres para poder atorméntame más, es por eso que estoy alejada de ellos, ya que no se si son reales o no, es muy difícil para mí todo esto, siento que ya no puedo más.
- Mamá, sabes que no servirá de nada venir .- Le comente mientras entrabamos a la clínica -. Nadie podrá ayudarme, ya no gasten dinero en doctores. Aprenderé a vivir con esto.
- Si te ayudaran, vamos .- Me dice -.
Una enfermera se nos había acercado y nos pregunta a qué doctor veníamos a ver, solo la observaba hasta que de la nada le hable.
- Las dos personas que más amas hoy morirán, solo tienes una oportunidad de despedirte de ellos .- Fue lo único que le dije -.
- ¿Cómo dijiste? .- Me pregunta confundida -.
- Es una niña no sabe lo que dice .- Interviene mi mamá mirándola -.
- Esta bien, el doctor Anders, ya las puede atender .- Nos indicó y entramos al consultorio -.
Ese día apareció en las noticias un terrible accidente, un joven y una señora mayor iban en un auto por la carretera a las 8:30 pm, un camión apareció de la nada provocando que el auto se estrellara contra un muro y las dos personas murieran al instante, lo que más miedo da es que era el hermano y la mamá de la enfermera.
- Cariño, ¿Cómo supiste que iba a morir el hermano y la mamá de la enfermera? .- Me pregunta mi mamá -.
Me encogí de hombros. Una voz me lo dijo y una imagen de eso apareció en mi mente, por eso lo supe.
- No lo sé, solo aparece esa escena en mi mente .- Le dije -. Sé que no me creerás, pero no importa. Por lo menos la enferma se pudo despedir de ellos una hora antes de que ocurriera el accidente. Si tienes el número de la clínica a la que fuimos llama y si te atiende la enferme dile que ellos están en un mejor lugar, solo quieren que ella entienda que los perdió para que ya puedan ir a la luz, si ella sigue llamándolos ellos quedaran vagando en la oscuridad hasta el día del juicio final.
- Cariño...- Dice mi papá -. ¿Cómo sabes eso?
- La señora me lo está diciendo, ella está enfrente de mi .- Le dije sin verlo y señalando el mueble que está enfrente de mi -. No tengan miedo, ella se ira en cuanto le digan lo que les dije a la enfermera. Si no la llaman yo tendré que ayudarlos a los dos a cruzar la luz y para eso tengo que ir a casa de la enfermera para que me pueda dar algo que pertenecía al chico y a la señora. Mi papa hizo lo que le pedí y a los segundo la señora ya se había ido, una sonrisa apareció en mis labios.
- ¿Por qué sonríes linda? .- Me pregunta mi mamá -.
- Ellos ya están en paz, ya fueron a la luz .- Le dije viéndola mientras sonreía -.
- Amor ven una momento .- Papá llamo a mi mamá a la cocina -.
Ellos piensan que no puedo escuchar lo que hablan, hasta el más mínimo susurro lo puedo escuchar. Mis padres salieron de la cocina, se dirigen a la sala pero los detuve sin siquiera mirarlos.
- Sé que no me van a creer y piensan que estoy loca, pero las cosas que veo y escucho son real tan real como ustedes y como yo. No les voy a pedir que me crean solo que me comprendan y me ayudan, no es bonito ver cosas que nadie más ve .- Les dije -.
De un momento a otro, sentí como algo tomaba el control de mí. Cuando eso sucedía era como si me sacaran de mi cuerpo y me encerraran en una caja pequeña era imposible tomar el control hasta que lo que sea que me tomaba se iba.
- ¿Princesa? .- Me habló mi papá -.
- ¿Quieres saber cómo morirá tu niña? .- Esa no era mi voz -. Ella nunca podrá controlar lo que tiene, y cuando ella se dé por vencida la vendremos a buscar todos.
- Mi amor, ¿Por qué hablas así? .- Habla mi mamá -.
De repente volví a la normalidad y seguí dibujando.
- Oh! Hola papá .- Le sonreí -. ¿Jugamos? Tengo juegos nuevos.
Ellos se vieron y luego a mí.
- Claro cariño, juguemos .- Me sonríe y se acerca a mí -.
Nada de esto es normal, sé que necesito ayuda pero no sé a quién acudir. Solo sé que si sigo así nunca podre ser feliz.
Por más que intente llevar esto todo se vuelve más difícil, ya no quiero continuar con esto, solo quiero que mi vida sea normal, no quiero seguir con miedo ni nada de todo esto. Quiero ser normal tener muchos amigos por primera vez, ya nadie ni siquiera la hora me da porque me conocen como la niña rara o la niña enferma, y lo que no saben es que todos los días lucho con lo que sea que me atormenta dese hace mucho tiempo.
Mis padres intentan que mi vida sea “normal” pero todo lo que hacen se arruina y pues es difícil seguir intentándolo y más cuando ya o hay opines para buscar.