CAPÍTULO VII —Entonces, amiga, ¿en qué te puedo ayudar? —preguntó Oliver fijando su mirada verdosa en ella. —Son tantas cosas. —murmuró Selene más para ella misma que para Oliver. — ¿Cómo sucedió?—preguntó ella. En su mirada, Oliver podía detectar temor, ¿de qué?, tal vez de la verdad. —¿Por qué se creyó que había sido un s******o?—Quiso saber. —Tu padre vivía solo, bueno, estaban las personas de servicio; pero ellos se encuentran en una casa alejada de la principal, así que aseguran no haber escuchado nada, recuerdan haber notado a tu padre un poco extraño días antes de su muerte, lo mismo dijo tu primo. El comportamiento de tu padre fue distante. —Explicó Oliver. —Aidán, ¿qué dijo?—Inquirió Selene, desesperada por saber. —Un día antes él habló con tu padre, fue el último en verlo,

