Capítulo 5
— ¡¿Había tarea?!
Pregunta Tyler, dejándose caer sobre la mesa, siempre se sienta delante de mí y Minnie.
— Sí… — contesto — Veinte ejercicios de matemáticas… — abro mi cuaderno — ¡Conejo!
— ¿Qué…?
Pregunta ella sonriente.
— ¡Deja de hacer corazoncitos en los puntos! — la miro con el entrecejo fruncido — Se supone que es mi tarea… además… — tomo el borrador rosa de Minnie — Este ejercicio lo hiciste mal
— Si eres tan listo… ¿Por qué yo tengo que hacer tu tarea?
— Porque es la forma en la que me pagas el alquiler de mi brazo
— ¡Ey!
Agito el brazo.
— Perdiste tus derechos por hoy día
— ¿Desde cuándo tengo que pagar alquiler? — Minnie intenta atrapar mi brazo — ¡Es mío!
— Que yo recuerde, nací pegado a este brazo…
— Pues no — Minnie sonríe, tomando un rotulador n***o — “Propiedad de Minnie”
— ¡Ey! — miro mi brazo — ¡Conejo!
— ¡Minerva! — miro a un lado, es Blair ¡Demonios! ¡Y yo con el nombre de Minnie tatuado en el brazo! — ¡Oh Dios…!
— ¿Hola…?
Minnie la mira, abrazando mi brazo izquierdo.
— Me… encantan tus… ¡Gafas! — Blair sonríe ampliamente — Dios… eres toda una fashionista… — Minnie la mira con una ceja alzada — Son tan rosadas y llenas de diamantes…
— Son Kawaii…
Blair la mira, no sabe que significa “Kawaii”.
— ¿Dónde las compraste?
— Mi papá me las trajo cuando regresó de j***n… — Minnie se las saca y acomoda su lacio cabello detrás de sus orejas — ¿Recuerdas Dany…?
— ¿Eh…? — me le quedo viendo — Sí… — miro a Blair, ella sigue sonriendo — A mí me trajo un Game Boy…
— Oh… — hace un puchero — A mí me hubiese gustado tener unas… es que son realmente bonitas…
— Oh pues… — Minnie se vuelve a colocar sus gafas — Puedo traerte otras que tengo, pero tienen medida… tengo miopía…
— ¿Entonces no ves nada?
Blair la mira con los ojos bien abiertos.
— Veo borroso…
Le corrige Minnie.
— Bueno… gracias Minnie — Blair sonríe aún más — Deberías venir con mis amigas, jugaremos a la cuerda…
— Gracias…
— Adiós Dany… hoy te ves lindo…
— Gracias…
Blair va a su sitio.
— ¡Ey!
Minnie intenta tomar mi brazo, me aparto.
— No hagas eso aquí — le regaño — Estamos en la escuela…
— Claro… como siempre — Minnie deja caer su cabeza en la mesa — Aparece Blair Hopkins y me dejas de lado…
— No digas tonterías, Conejo…
Ruedo los ojos.
— Incluso eres capaz de dejar que se burlen de mí… — me mira — Eres un mal amigo…
— Pues entonces cámbiame…
Me cruzo de brazos.
— Tal vez debería — infla las mejillas — Así no te aprovecharías de mi buen corazón…
— No digas ridiculeces… — ruedo de nuevo los ojos — Mejor termina de corregir mi tarea…
— No, me conseguiré otro amigo…
Me devuelve mi cuaderno.
— Conejo, no tienes otros amigos…
— Los conseguiré
— Como quieras…
— ¿Eso significa que me puedo sentar con Daniel?
Pregunta Tyler, ambos lo miramos.
— Sí — contesta ella — Yo iré a sentarme con… Abby
— Claro…
Ruedo los ojos.
— Me iré…
Infla las mejillas.
— Chau…
— Chau… — me mira fijamente — ¿En serio quieres que me vaya…?
La miro, suelto un suspiro y de nuevo ruedo los ojos ¿En serio quiero que se vaya? Así no habría nadie a mi lado que espante a Blair, Tyler ya no me molestaría, las maestras ya no me emparejarían con Minnie… Sería muy beneficioso alejarme de ella de una buena vez…
— Cierra la boca y siéntate…
Le ordeno, ella obedece.
— ¿Por qué creí que Daniel podría pelearse con su amada Conejo?
Pregunta Tyler, Minnie sonríe abrazando mi brazo izquierdo.
— Tú también cállate…
— Daniel nunca podría enojarse conmigo… — Minnie sonríe — Me quiere mucho…
— Tú tienes suerte que te tenga mucha consideración… — poso mi dedo sobre su frente y la aparto — Pero algún día me vas a terminar de hartar…
— Malo…
Minnie hace un puchero, yo solo sonrío. Minnie me desespera, pero… alejarme de ella… aunque sea lo que más me gustaría… creo que me sentiría raro sin mi mejor amiga. Ella es la persona con la que más tiempo paso, sabe todo de mí y yo sé todo de ella ¡Dormimos juntos! ¡Nos bañamos juntos! Una amistad de años como la nuestra no creo que sea posible de romper, menos por una pequeña discusión… miro a Minnie, comienza a dibujar corazones alrededor de nuestros nombres… Sí Minerva, tienes toda la razón, no soy capaz de enojarme contigo…
— No quiero que lo olvides…
Ella me mira.
— ¿Qué cosa?
— Que tienes suerte de que te quiera como mi amiga…
— Soy muy afortunada… — sonríe — ¿Siempre amigos?
— Siempre…
Entrelazamos nuestros meñiques, ella sonríe aún más y abraza mi brazo izquierdo. Miro lo que me rodea, algunos alumnos nos miran, somos como una película para ellos. Miro a Joseph, él ha regresado su mirada a un libro que tiene entre manos, sonrío. Mi mirada choca con la de Blair, ella también me mira… siento una presión en el pecho. Blair me sonríe, baja la mirada y se da media vuelta…
— Dany…
Miro a Minnie.
— ¿Qué…?
Blair mira fijamente su mesa.
— Te quiero mucho Dany…
Minnie de nuevo se abraza a mi brazo.
— Sí…
Las clases terminan ¡Se me ha ido volando el día! Blair no volvió a hablarnos en todo el día, pero la vi de lejos y ella también a mí, por unos segundos pude captar su sonrisa, ella es muy bonita. Quisiera poder ser más amigos, acercarme más a ella y poder entablar una conversación real, una donde Minnie no esté en medio ¡Pero es que ella siempre está en medio! ¡Siempre! Y lo peor es que no le agrada Blair y creo que a ella tampoco ¡¿Pero a quien le agradaría el chicle que está pegado al chico que te gusta?! Si Minnie no estuviera en medio podría ser amigo de Blair y quizá podría algún día ser mi novia ¡Por los Conejos! Estoy condenado a estar encadenado a Minnie. Debo de ser fuerte, la próxima vez que se me ofrezca la oportunidad de pelearme con ella la tomaré ¡Solo así podré por fin ser libre de ella! Lo sé… hace unas horas dije que una amistad como la nuestra no se puede quebrar ¡Y no quiero quebrarla! Pero tener mi espacio por el tiempo suficiente para acercarme a Blair Hopkins, no sería malo…
— Caminas muy rápido…
Se queja Minnie.
— No tendrías ningún problema si tan solo caminases sola… — agito mi brazo izquierdo — Pero tú quieres caminar enganchada a mí
— Es que es la forma en la que caminan los mejores amigos — Minnie sonríe — Y hemos caminado de esta forma desde los cuatro años…
— ¿No crees que es tiempo de modificar las cosas?
Pregunto, entrando en mi casa.
— Si no está roto, no lo repares…
Minnie se encoge de hombros, ruedo los ojos.
— Ya no estamos en edad de andar del brazo…
Subimos las escaleras.
— Lo dice el chico que aún ve “Rugrats”
Entramos en mi habitación.
— Hablo en serio Conejo… — me dejo caer en mi cama — ¿No te incomoda que nos molesten al respecto?
— No… — Minnie se recuesta a mi lado — Porque ambos sabemos cuánto nos queremos… — ruedo los ojos, ella se abraza a mi brazo — Y además… nos conocemos desde pequeños… — la miro, sus ojos quedan ocultos tras su flequillo y esas enormes gafas llenas de adornos brillantes y rosados — Y siempre hemos estado juntos…
— Pero…
— No me agradan las personas que se quieren interponer en nuestra amistad… — la miro fijamente — Porque… — mira a otro lado — Yo te quiero mucho…
— Yo también Conejo…
Sonríe.
— Blair no me agrada, no es buena conmigo…
Cierra los ojos.
— Sí… no sé por qué…
— Porque soy tu amiga y eso le da envidia… — suelta un bostezo — Prométeme que no me olvidarás a pesar de tener novia… — alza el meñique — No quiero que me olvides…
— Nunca lo haré… — entrelazo mi dedo, sonríe — ¿Te da cuenta que siempre juramos no olvidarnos?
— Sí…
Suelta otro bostezo.
— Juremos otra cosa…
Abre los ojos.
— ¿Qué cosa?
— Que… — la miro fijamente — Pase lo que pase… incluso si llegamos a alejarnos algún día… — Minnie me mira con miedo — No dejaremos nunca de ser amigos…
— Prometido…
Minnie sonríe, alzando su meñique.
— Prometido…
Entrelazo mi meñique, ella suelta una risita.
— Ahora durmamos, aprovechemos que aún no quieres alejarme…
Se acurruca contra mi cuerpo.
— No… digas… — suelto un bostezo — Tontería… Conejo…