Fadwa y Jaeden [Identidad Entrelazada]

¿Enserio? ¿De verdad el destino estaba tan empeñado en encontrarme con ella? Sinceramente no tengo la menor idea, pero he venido a parar al lugar equivocado, y si, eso si me permite quedarme, porque viéndolo bien y detenidamente este es mi primer día de pasante y realmente no me sorprendería que me echará sin depender de mis resultados de práctica, el cual serán evaluados en un lapso de tres largos días. Lo peor de todo es que si así siento estos días, no tengo la menor idea de como serán los restantes. Creo conocer un poco su actitud, así que ya veo venir todas esas indirectas hacia mi persona. De otro modo, no sé si se vaya a comportar diferente, ya han pasado dos años y dudo que estos años hayan pasado sin tener algún cambio de actitud. Pues bien, yo lo tuve, o eso creo. Al menos aquí es donde debo de mostrar mi profesionalismo y no actuar como aquella niña dieciocho años que no sabia que hacer con su vida y que además, era una inútil. Cabe mencionar y recalcar que todo este tiempo, si, todos estos dos años me mantuve alejada de ella, no guarde su numero telefónico, no le envié cartas y tampoco me acerque a su familia, por una simple razón, no tenia un solo motivo para hacerlo, además no quería meterme en problemas por más de que quisiera pedirle disculpas y por más que intenté empezar de cero, así que, en conclusión, me odia, eso es seguro.   Un pesado silencio inundo la oficina por completo. Y eso que yo estoy tratando de actuar con profesionalismo. Ella debe de hacer lo mismo, no hay razón para agredirme delante del presidente. — “Al menos en este momento Fadwa” — Pensé mientras observé a mi jefe y sonreí con la intención de relajar el ambiente. Mi jefe es una persona que se ve amable, relax y no tan pesado, de hecho, parece que es un buen líder, pero como es de esperarse, siempre terminan por ser todo lo contrario, quizás ahora esta así porque le debe de faltar alguna pasante para tratar como esclava; tal vez no, pero ya veré con el tiempo. Físicamente se ve que tiene aproximadamente treinta años; un poco más quizás por el puesto que desempeña, es peli castaño, ojos verdes, piel de tono blanca pero casi casi parece ser color rosa, supongo que debe de estar quemado por el sol, no se, sinceramente, su nombre es Markus Fischer. — Parece ser que encontramos a la señorita LeBlanc tan concentrada que ha ignorado nuestra presencia — El tono amable de mi contrario se escucho un poco más autoritario. Pero es quizás pasable, sinceramente ese silencio se lo ha tomado como si Fadwa nos hubiese ignorado por completo.   — Una disculpa Markus, sabes que estar aquí a veces me desconcentra un poco. Y no estoy diciendo que es la empresa, si no la vista de este edificio. — Soltó un suspiro y volteó a vernos, mientras caminaba directamente hacia su escritorio, no obstante se quedo detrás de su silla — Entonces ella estará con nosotros. Perfecto. ¿Viene mandada directamente por la universidad o es que ella ha tomado este lugar? —   — ¿En que influiría si es que ella lo tomo? — Cuestionó mientras caminaba hacia el escritorio de Fadwa, donde dejó mis papeles sobre la mesa — Puedes revisarlos si tienes alguna duda sobre ella —   — No es que influya en algo, simplemente quería asegurarme y así saber a que departamento la mandaremos. ¿Tienes alguna idea? —   Seguí observando sin decir nada al respecto. Ella ni siquiera se tomo la molestia de “presentarse”. Si, ya se que nos conocemos desde hace un largo tiempo pero al menos debería de tratar de que las cosas no empezaran mal; no por segunda vez.   — Por su experiencia y calificaciones estaba pensando en mandarla a una oficina particular, no veo el motivo de enviarla a un departamento en especifico, además con el tema que estamos tratando veo muy complicado que ahora entre a un grupo, les complicará mas el trabajo, al menos ese es mi punto de vista, por ahora se puede dedicar en redacciones de artículos particulares y no grupales, tu entiendes —   — Probablemente nos sorprenda y mejore, veo que se puede adaptar fácilmente a las situaciones, ese es el aire que ella me da en este momento — Exclamó la peli negra.   — “Vaya Fadwa, realmente los detalles y las indirectas no se te van y tampoco las has cambiado” — Pensé nuevamente mientras trataba de prestar atención en todo lo que decía. Sinceramente me da igual en que oficina o departamento me envíen, lo importante es ser aceptada como pasante y terminar mi universidad. Si llego a perder esta oportunidad tendré que esperar un año completo para volver a intentarlo. Y si estoy lejos de ella, mucho mejor, no sea que de repente me llegue la milicia y terminen por encerrarme todo por estar cerca de ella.   — Sinceramente no creo que sea conveniente. Pero es la primera vez que opinas acerca de un pasante, por lo que creo puede ser conveniente. Pero mandarla desde este momento se me hace muy rápido, prefiero que se adapte a la oficina, al ambiente laboral, horarios y demás para después ingresarla a un departamento. Aun le resta casi un año para estar con nosotros — El peli castaño volteó a verme y sonrió amablemente.   — Bueno, al final decidiste por ti mismo, te pareció buena la idea pero terminaste por decidir tu las cosas. Pero, en fin, espero ese año pase rápido y se adapte a la empresa. — Me miró fijamente para expresar con un tono serio — Bueno Romanov, cualquier duda que tengas te diriges con Markus, perdón, con Fischer — Volteó la mirada nuevamente hacia el jefe.   — No fue eso, si estoy tomando tu opinión en cuenta y creo que tienes razón, se puede adaptar rápido y como no, si puede aprender de la mejor. Fadwa…   —“Ni si quiera te atrevas a decirlo” — Pensé mientras el continuaba hablando.   … Jaeden Romanov quedará a tu cargo, fuiste una persona que se adapto rápido y que además, bueno, tu ya sabes la historia — Pausó — Lee su expediente para que puedas visualizar los trabajos que les encargaras, ella se presenta a partir de mañana. —   Fadwa se quedo en completo silencio, solo para dejar ver una risa fingida y demostrar entusiasmo en todo aquello que Markus le había dicho.   — Claro, yo le ayudo en su proceso, mañana le ayudaré en todas las cosas en las que tenga dudas y demás pero veo que es una chica inteligente, pero en fin, ya no le quitamos mas tiempo, señorita Romanov. — Sonrió amablemente y camino hasta quedar frente a su silla y tomar asiento. — Nos vemos mañana —   Ambos se despidieron de mi.   Por lo que respondí amablemente — Muchas gracias, realmente estoy emocionada por trabajar con ustedes. — Tras decir esto me despedí y salí de la oficina.   Pero que demonios ha sido todo esto. Antes de salir por completo de la empresa pase por mi tarjeta de acceso y a dejar unos cuantos detalles que pedían de mi. Ahora lo único que quiero hacer es llegara casa, tomar el teléfono y llamarle a Gretchen, ella debe de saber de esto. Al menos así alguien más sabrá que nuevamente me he topado con la familia LeBlanc, para ser mas exacta, con su hija.   Pasé a comprar un poco de comida. La casa donde ahora estoy rentando cuenta con lo indispensable, pero no lo necesario, es decir, me falta una pequeña parrilla en donde preparar mi comida, así que en lo que me da oportunidad de ir a comprar una; que no pienso comprarla con el dinero de mi ahorro; si, tengo miedo de quedarme en ceros y regresarme por culpa de ello. Así que solventaré mis gastos lo mas económico posible y así trataré de tener mi parrilla en mi primer pago; eso si sobrevivo en la empresa, pero si todo sale bien, así será. Pero bueno, volviendo al tema principal.   No he comentado el gran cambio que ha dado Fadwa. Es raro verla vestida de manera formal y no de manera ruda, no con sus chaquetas de cuero y su uniforme de biker, si no, ahora más responsable; no digo que no lo fuera, pero su vestimenta formal le hace ver responsable, madura y tan “empoderada” que es grandioso saber que ella toma decisiones no solo para ella, si no para una empresa de talla grande. Eso de manejar a la milicia le ayudo demasiado. En cuanto a lo físico, lo mas notable es su cabello n***o, aquellas mechas californianas han desaparecido por completo; esto hasta donde yo visualice. Otra cosa que también se nota es su cuerpo, no sé si en algún tiempo si se unió a la milicia, pero ese cuerpo se ve trabajado y marcado. Y si, a pesar de que traté de visualizar mi mirada tanto en mi jefe como en la de Fadwa, si, lo acepto, la observe de vez en cuando. No sabía si era mi ultima vez frente a ella, porque estaba claro que todo lo que decía hacia mi, era como un — “Aléjate, hay demasiados departamentos, oficinas y cargos, no necesariamente debe de estar conmigo” —       Después de llegar a mi departamento, comí un poco y le envié un mensaje de texto a Gretchen, el cual decía — “En cuanto te desocupes, llámame, me urge” —   Y así fue.   — ¡Jaeden! Casi me da un paro pensando que te habías perdido, me alegra escuchar que ya estas sana y salva, sobre todo que te adaptaste a la empresa, pero ¿Qué es eso tan urgente? Sabes ni siquiera con mi novio he tenido tanto comunicación el día de hoy, como para que me extrañes más que él — Dijo tras el teléfono.   — Si te dijera que es porque te extraño ¿Me creerías? — Dejé un silencio tras la llamada.   — La verdad es que no. Ya lo sé, nunca extrañas a tu mejor amiga. Pero, en fin, cuéntame que te ha pasado —   — En si, si te extraño, pero eso no es algo que debas saber del todo, pero para no hacerte de tanta emoción, sabes, me he encontrado con Fadwa — Tras decir esto grite tras el teléfono pero aun nivel en que solo mi contraria escuchara.   — ¡¿Fadwa? ¿Esa Fadwa? O sea ¿Tu Fadwa?! ¿Qué rayos te emociona? Jaeden, tienes que volver ya, no quiero que te metas en problemas y termines por perder tu pasantía, además aun estas a tiempo de que te vinculen a otra empresa, otros chicos no asistieron —   — No creo que sea capaz de eso, hasta ahora se ha comportado bien, además, cree que me vine a esta empresa porque sabía que se encontraba ella aquí, cree que vengo especialmente porque esta aquí. Ya le iba a decir, eso quisieras Fadwa LeBlanc, eso quisieras — Solté una risa. — Te creo eso, pero también te creo tan capaz de decirle, ¡Si, he venido por ti! Así que Jaeden, no sé, pero te mantienes lejos de ella durante el tiempo que vas a estar ahí o te arriesgas a que mande a la milicia por ti o simplemente en perder este año. Así de fácil te lo dejo —   — ¿Cómo te explico que me dejaron a su cargo? —   — Jaeden… ya no se que decirte al respecto… Solo que ahí podemos visualizar una gran línea de el “no te quiero aquí pero ahora seré tu jefa” lo cual te pone todavía entre la espada y la pared. —   — Tranquila, que yo no le diré nada, ella me ha dejado en claro las cosas, se que es una chica heterosexual, no esta interesada en las chicas y además, yo no sé realmente que es lo que quiero. Hasta el momento no me ha interesado alguien. —   — Claro que no, porque estas enamorada de ella —   — No debe de ser exactamente eso, aunque estaba generalizando, me han interesado los chicos antes de ella y tampoco un chico me ha llamado la atención —   Gretchen repitió lo anterior.   — No sé, pero quizás ha llegado el momento de darme cuenta que ella no es para mi y que debo de respetar su decisión, ahora será mi jefa y con más razón debo de hacer caso —   — Espero que si Jaeden, tu trata de mantenerte en el margen y no meterte en problemas. Jash no tarda en salir de prisión y sería demasiado irónico que al salir tu entres —   — Si, trataré de hacerlo… confía en mi, me he cuidado de peores situaciones —   La platica continuo, pero esto ya fue acerca de nuestro viaje, el lugar en donde ahora estamos rentando y claro, no podía faltar el drama de Gretchen tras extrañas a su novio. Y la entiendo, es una relación casi recién; de un año, pero supongo aun se encuentra en la fase enamoramiento he inicio de una relación, por lo que entiendo que lo extrañe tanto.   Sigo sin creer que Gretchen se ha convertido en mi mejor amiga, por un momento creí que Stephanie sería, pero ser tan contrarias nos llevo a una amistad de solo decir “Hola y adiós”, y eso lo noté porque al final no salí de fiesta con ella; cosa que hace regularmente, pero al menos me alegra el seguir hablando con ella. Por otro lado, no me imagino a Gretchen como mi cuñada, claro, si su relación con Jash hubiese funcionado. Lo importante es que estará para mi cuando me lleguen a romper el corazón y yo lo estaré para ella; esperemos que esto no suceda pronto. Su novio no me agrada del todo, pero si la hace feliz lo acepto y lo querré; un cinco porciento, pero lo haré.   Mi tarde se fue en el teléfono y tratando de arreglar mi ropa para mañana, por suerte he comprado este ultimo año ropa formal, así que tengo varios conjuntos que combinar y llevar al trabajo. Me hubiese servido más que tuviesen uniforme pero era ya exigir demasiado.   Mañana por ser mi primer día pienso ir más arreglada de lo que hoy fui, conoceré a mis compañeros de trabajo y quiero que se lleven una buena impresión de mi, entre mas aliados genere las cosas aquí serán relajantes y los días se me pasaran rápido. Aclarando que a “aliados” me refiero a compañeros de trabajo, no pienso llegar y contarles que estuve saliendo con la vice presidenta cuando me hice pasar por mi hermano.   He terminado de arreglas todas mis cosas, deje la ropa planchada y lista para mañana, cerca de ella también he dejado un par de zapatillas; si, aunque no crean he aprendido a vivir con ellas, desde hace como medio año he estado presentando proyectos finales, así que no me quedo otra opción mas que usarlas. Aunque hubiese deseado con toda el alma ir con un traje similar al que llevo Fadwa el día de su cumpleaños, pero ya era demasiado pedir; justo como en este momento, que llevaré una falda, y la usaré hasta que mi nueva jefa me permita llevar pantalón largo. Aunque eso sería decisión de mi jefe, porque el uniforme es básico, los hombres llevan pantalón y saco, mientras nosotras falda y una blusa de manga larga, lo mas raro de aquí es que Fadwa llevaba pantalón. Tal vez por ser la jefa tiene ciertas excepciones. Sería mucho soñar el que me dejará llevar algo así.   Dejé todo listo, mi bolso, mi tarjeta de acceso, dinero y la ropa que usaré, por lo que solo me quedaba ir a dormir. Ayer fue un día pesado para mi, viaje tras viaje, el no conciliar el sueño todo por estar pensando en que mi alarma no sonará y llegaría tarde a mi presentación, además de que la adrenalina no me dejaba dormir, pues bien, tenia pensado tener una nueva vida, nuevos comienzos, nueva ciudad y sobre todo, nuevos recuerdos, pero ahora, todo ha colapsado y esa adrenalina que tenia ayer, para el día de hoy se ha convertido en ansiedad, preocupación y si, estrés. Jamás pensé en encontrarme con Fadwa, no al menos en este lugar, en este tiempo. Por lo mucho, creí que la volvería a ver el día en que Jagdesh saliera de la cárcel, pero de pensar en verla en otro lugar se me hacia imposible.   He estado dando vueltas por entre toda la cama; la cual es una pequeña cama individual, mirando a la ventana, al techo, fijando mi mirada en el reloj que esta sobre la mesita aun lado de la cama y la hora sigue sin cambiar…apenas son las doce. He dado un par de vueltas, me que quedado viendo un largo tiempo la ventana y apenas son las doce con dos minutos.   — ¡Por favor Jaeden, duermeteee! — Me dije a mi misma mientras abrazaba la almohada. No sé que me tenia tan preocupada, si ver a Fadwa o que mañana estaré seguramente despedida o quizás ambos.   — A ver cerebro, piensa, las cosas no deben de ser así, no, hagamos un plan — Tras decir esto me levanté y me senté sobre la cama. Encendí la lámpara de escritorio, tomé una libreta y anoté lo siguiente, empezando con un titulo grande que dice lo siguiente:   COSAS QUE NO DEBO DE HACER FRENTE A FADWA + No te sonrojes, ella no debe de notar que su presencia te pone nerviosa + Piensa detalladamente las cosas y trata de no decirlas *NO LAS DIGAS + Mírala con seguridad, demuestra que no le tienes miedo + No respondas sus indirectas -tachado- con indirectas -tachado- responde, no te dejes + No menciones nada que tenga que ver con el pasado + -tachado- No le des detalles de tu vida -tachado- — Como si esto le interesara— + No te muestres obsesionada con ella *Jaeden no estas enamorada* * LO MAS IMPORTANTE * + Evitarla si es posible + Mantenerte alejada y triunfaras en tu trabajo   Agarré la libreta y la guardé dentro de mi bolso. Esto me deberá de servir ahora que este en la empresa, no se me deben de olvidar estos pasos importantes y todo estará bien. Todo estará bien Jaeden. No te preocupes, solo sigue esto y de que sobrevives, sobrevives.   Dejé las cosas, regrese a la cama y cerré los ojos, me quede pensando en mi nuevo día de trabajo que ni siquiera noté cuando es que me quede dormida.