El bosque de los deseos

Encuentro inesperado parte 2

NARRADO POR ANDY

Han pasado varios días desde nuestra partida, una vez salimos de la ciudad en camino a Xeginia, se siente sumamente extraño estar tan lejos de casa, me pregunto ¿si ya llegaremos? Pues es un largo camino, recorrerlo a pie no fue una de las mejores ideas que he tenido, debo admitirlo, sin embargo, el agua y la comida no han sido un problema, pues nuestras habilidades de caza y tener un río alado han sido de gran ayuda, por otro lado, lo que me preocupa es ver como Luisa y Pamela, parecen ir perdiendo los ánimos, tal vez piensen que no las escucho, pero en la noche mientras vamos a dormir, se quedan esperando a que me “duerma” obviamente no lo hago y las escucho, la otra noche escuche lo siguiente:

— ¿Andy? ¿Estas despierto? – dijo Luisa, yo estaba muy cansado como para contestar, por lo que simplemente me hice el dormido, pero jamás pensé en que iba a escuchar lo siguiente

— Pamela… ¿Tú estás despierta? – ella susurrando le respondió

— ¿Qué sucede? –

— bueno, en realidad, nada importante, perdón por molestar –

— vamos, dime ¿qué sucede? Anda, puedes confiar en mí, ¿cierto? –

— hmm… está bien, realmente me siento muy asustada… - ¿asustada? De que podría estar asustada Luisa, la conozco y ella es de las personas más valientes que conozco ¿Qué podría asustarla?

— ¿asustada de que Luisa? – ella dudando un poco finalmente le respondió

— no sé en qué estado pueda estar Jake, me preocupa mucho y siendo sincera me aterra el solo pensar, en que para cuando lleguemos sea tarde, realmente eso me partiría el corazón en mil pedazos – Pamela se quedó en silencio por unos instantes, pero respondió un tanto temerosa

— n-no te preocupes, realmente yo me siento igual, no lo había querido decir o siquiera pensar, pero también tengo miedo de que lleguemos y Jake, ya no esté en este mundo, me aterra que esta búsqueda sea en vano y solo estamos yendo… a ver un c*****r –

Todo se quedó en completo silencio, mientras dentro de mí lo único que podía pensar, es en que me debía mantener fuerte y con esperanzas, no debo doblegarme ante nada, debo seguir y seguir hasta encontrar a Jake, no me daré por vencido hasta encontrarlo, ese es mi único deseo, no me importa nada, más que volver a tener a mi único amigo, a mi único, hermano. Jake, donde estés presiento que estás bien, lo puedo sentir, puedo sentir que sigues con vida y nada ni nadie te hará daño, te encontraré y volveremos a divertirnos haciendo las locuras en el bosque, haciendo campamentos al aire libre, construyendo toboganes para el oasis, estudiando a los animales del bosque, dibujando, haremos lo que más quieras, jugaremos ajedrez, jugaré ajedrez contigo, aunque no tenga menor idea del juego, lo intentaré, pero por favor… vuelve o al menos dime dónde estás, dime donde te puedo encontrar

Eso fue hace unos días, no han vuelto hablar al respecto, espero no lo hagan realmente me dolió saber que soy el único que mantiene sus esperanzas elevadas, sé que las dos lo aman, pero no lo aman lo suficiente como para mantener aun la esperanza, yo, por otro lado, estos días me he esmerado en avanzar, hace unos cuantos kilómetros vi un letrero, este decía “Xigina 80 km” lo que significa que aún falta y mucho, pero si no te esfuerzas, no hay recompensa ¿cierto? Así que mirando a las chicas les sonreí y les dije

— vamos, vamos, ya estamos cada vez más cerca, lo presiento – Pamela más que agotada, se sentó a un lado de la carretera y dijo

— Andy, en serio quiero ver a Jake tanto como tú créeme, pero mis pies ya no soportan caminar ni un segundo más, te lo prometo, estoy demasiado agotada, creo que hemos estado caminando por tres días seguidos, ¿Por qué no pedimos un aventón? Es decir, con suerte si no va Xiginia, al menos nos podrá acercar ¿no? –

Luisa sentándose junto con ella asintió, pues también estaba igual o más cansada, yo por mi parte no sentía el cansancio era eso o tal vez los granos de café que encontré antes, comiéndomelos están acelerando mi sistema demasiado, en cualquier caso, a mi parecer, se están quejando por pequeñeces, mientras pensaba esto, sentí como el efecto del café se me paso y mis piernas se desplomaron sin más, no las sentía y no tenía fuerzas para volverlas a parar, genial estaba muerto, asintiendo dije

— está bien, está bien, cogeremos un pequeño aventón, esperemos que tengamos suerte y este nos acerque lo suficiente a Xiginia – mientras terminaba de decir esto

Un tráiler enorme se venía acercando a gran velocidad, de inmediato, Pamela sonriente junto a Luisa se miraron entre ellas y levantándose comenzaron hacerle señas al conductor, aunque estaba muy lejos aún, considero que no se va a detener, es decir. Viene a una gran velocidad y para frenar pienso que debería ir reduciendo la velocidad desde allá, pero no se venía acercando más y más rápido, yo viéndolo me levante, parecía un tanto sospechoso, abriendo mis ojos de inmediato grite

— ¡chicas! ¡Apártense! – mientras me alejaba del camino, ellas me miraron confundidas y viendo como me escondía, hicieron lo mismo que yo, pues aquel tráiler, no iba a frenar, ya que este venía tan velozmente que había levantado una nube de polvo tras él y al vernos, era su oportunidad para burlarse de un par de viajeros, acelerando más para que nos traguemos todo el polvo que ha venido recogiendo

Y justo como lo predije, este paso a una gran velocidad, dejando tanto polvo como para que quedemos bañados en él, mientras tosíamos, vimos como una camioneta se iba acercando, esta, por otro lado, no iba tan rápido, mirándola dije

— bueno… achís, creo que trague mucho polvo… ¡Achís! ¿Ahora qué? ¿También le harán señales a esa camioneta? Digo, para que me prepare para otra nube de polvo – ellas mirándome cansadas, negaron y recogiendo nuestras cosas estábamos dispuestos a seguir caminando

Mientras recogía mi mochila, escuche como la camioneta freno detrás de mí, regresando a ver de inmediato, vi como las chicas se quedaban igual de sorprendidas ¿acaso nos daría un aventón? Acercándonos de inmediato a la ventana, esperamos con ansias, para saber ¿Quién se detuvo a vernos? Y aún más ¿nos dejara cerca de nuestro destino? Sorpresa para todos fue, cuando esta al abrirse por completo, vimos cómo era una anciana roquera, vestida con una chaqueta de cuero, guantes y gafas, j***r era la mejor anciana que había visto en años, ósea la que ha tenido más estilo me refiero. Al verla nos quedamos boquiabiertos, viendo como una anciana, mientras masticaba un chicle dijo

— ¿y qué? ¿A dónde van muchachos? – yo mirando a las chicas, agité mi cabeza, volviendo en sí le dije

— nos dirigimos a Xiginia, si es tan amable o si pasa al menos un poco cerca ¿nos podría ayudar? Llevamos varios días caminando, estamos exhaustos, no sabe cuánto nos ayudaría señora –

Ella de inmediato escupiendo el chicle por la ventana dijo con un tono molesto

— primero, no me digas señora, para ti hijo soy señorita Chloe o simplemente pueden llamarme Chloe, como gusten, segundo punto, suban, voy directo a Xiginia, pero límpiense un poco antes de subir, no quiero que queden tan manchados los asientos con toda esa tierra que traen encima… - sin más, los tres de inmediato nos sacudimos bien y también traté de limpiar a Pelusa, aunque bueno él se sacudió solo de hecho, una vez terminamos todos entramos de inmediato

En la parte de atrás, estábamos sentados un poco apretados con Pelusa moviéndose inquietamente, ahora que lo pienso es la primera vez que se sube a un auto en toda su vida, la anciana al verlo dijo

— alguien que venga aquí al frente si están apretados allí atrás… - Pelusa mirándola dio un pequeño ladrido y paso al asiento del copiloto y sentándose más tranquilo miro por la ventana — vaya, este si es un perro, ey chico ¿es tuyo? – yo asintiendo un poco nervioso mire a Pelusa, la anciana viéndolo dijo — perros como este ya no existen ¡veamos que tal rocanrolea! – dijo mientras bajo la ventana de Pelusa y poniendo la música a máximo volumen este saco la cabeza por la ventana junto a su lengua, disfrutando del viento, del aire golpeando su rostro realmente era tierno y épico verlo así y más aún acompañado de un buen rock

Mientras viajábamos, nos relajamos, pues en auto no nos íbamos a demorar nada, en menos de un parpadeo nos encontraremos en Xiginia, lo cual iba a ser grandioso, mientras íbamos Luisa iba sonriente en la mitad y Pamela miraba hacia la ventana con des anhelo, Luisa de inmediato al verla así le pregunto

— ¿Pamela, te encuentras bien? – ella reaccionando de inmediato miro alrededor y contesto un tanto confundida

— sí, solo estoy distraída el cansancio me tiene así, debería dormir un poco, jeje – yo un tanto indiferente, mire igualmente por la ventana

Supongo que la tensión entre nosotros era tan grande, que la anciana lo noto al instante o tal vez solo era una anciana sabia, la cual nos dijo

— ¿Por qué van a Xiginia? En especial ustedes tres… - yo respondiendo dije

— estamos buscando, algo que se nos perdió… - ella mirando por el retrovisor dijo

— ¿ah sí? ¿Y qué puede ser tan especial como para caminar días por la carretera sin transporte? ¿Vale la pena acaso? – Luisa asintiendo dijo

— realmente vale la pena y mucho, es algo muy especial para los tres… por eso salimos en busca de él – ella al escuchar la palabra “él” miro más confundida y dijo

— ¿él? – yo de inmediato para no levantar sospechas dije

— ello, quiso decir… ello – mientras le daba un leve pellizco ella levantando un poco la voz rectifico de inmediato

— si… ello, quise decir ello, es el cansancio, creo que yo también debo descansar un poco, en fin, buenas noches… - y sin decir más palabra, se recostó junto a Pamela y fingió quedarse dormida

La anciana para nada tonta, bajo un poco el volumen, mirándome dijo

— ¿Cómo te llamas hijo? – yo mirando por la ventana conteste

— me llamo Andy –

— ¿Andy? Bonito nombre, ¿te lo puso tu madre o tu padre? – yo mirándola voltee los ojos

— fue… mi padre –

— ¿y dónde está él? –

— papá… realmente no lo sé –

— ¿y tu madre cariño? –

— no tengo a ninguno de los dos, soy huérfano desde que recuerdo ¿de acuerdo? Jamás supe que es tener padre o madre –

Ella quitando la vista del retrovisor comenzó hablar

— ¿entonces mentiste al respecto de tu nombre? ¿Quién te lo puso realmente? – mirando por la ventana le conteste

— mi… hermano –

— y ¿Dónde está? –

— murió… - ella entregándome una botella de agua, continuó haciendo más preguntas

— entiendo, básicamente eran solo tú y tu hermano, este murió, tras varios años conociste a un chico al cual comparaste con tu hermano, ahora lo consideras como tal y estás buscándolo porque posiblemente desapareció y estas chicas están enamoradas de él, pero la peli negra es más cercana, sin embargo, la de en medio es la mejor amiga a la cual le gano la peli negra ¿o me equivoco? –

Yo más que sorprendido la miré y confundido asentí levemente, mientras ella sonriente dijo

— tranquilo, en realidad soy adivina y tus amigas están despiertas y sé que escucharon todo lo que dije así que dejen de fingir, chicos no sé cómo, no sé cuándo, pero de algo estoy segura, mis instintos y sextos sentidos dicen que su hermano, amigo o novio, en un caso en particular. Sigue con vida, pero algo no me gusta, no lo veo bien, ósea de salud se encuentra perfecto, pero no siento que sea el mismo, algo debió cambiar, por favor chicos tengan cuidado, este viaje representa más peligro del que ustedes creen, tal vez deban ir al distrito comercial, a lo mejor encuentran algo allí –

Yo de inmediato le pregunté

— pero ¿está segura de ello? – sonriente, saco otro chicle y dijo

— estoy tan segura como que a tu perro le quedan geniales estas gafas – sacándose las de ella se las puso a Pelusa, este quedo enormemente hermoso y fenomenal, si antes se veía con estilo ahora era diez veces más estilo, pero mirando a la anciana, me dio más confianza y las esperanzas de encontrar a Jake se alimentaron todavía más y creciendo como fuego, me sentí de nuevo con energías…

Tras unos cuantos minutos al fin habíamos llegado, ella se detuvo justo en el distrito comercial y abriendo la puerta, bajó a Pelusa mientras todos se terminaban de bajar me acerque a la ventana, le agradecí por el aventón y le pregunte

— ¿está segura de que buscando aquí lo encontraré? – ella sonriente negó

— jaja estoy segura de que aquí, él te encontrara a ti, lo que significara un gran paso, si lo logras ver, entenderás que va a hacer más complicado de lo que crees… -

Sin decir más palabras se despidió con la mano y arranco su auto, marchándose, mientras Pamela y Luisa tomaron sus cosas, al parecer nadie quería hablar al respecto de la señora, como sea caminos un poco y llegamos a un gran almacén de algo que parecía ¿trajes costosos? Supongo que esta es la parte de clase alta de la ciudad, ¿Por qué Jake estaría aquí? Es totalmente absurdo, jaja. Mientras pensaba en esto, vi una limusina estacionada, mientras se subían dos personas con un traje muy elegante, parecía que me faltaba dinero de solo verlo, mientras se terminaba de subir el último chico, sentí una sensación rara ¿Qué fue eso? Fue como haber visto alguien que conozco

…