POV ELIZABETH
El sonido de mis tacones resonaba con firmeza sobre el suelo de mármol de Blackwell Innovations. Cada paso era una declaración. Cada mirada que se alzaba para verme cruzar el pasillo sabía exactamente quién era yo: la mujer que casi fue destruida, pero que había regresado más fuerte que nunca.
Mi empresa, mi reino. Y hoy, más que nunca, tenía que demostrar que seguía en pie.
—Señorita Blackwell, los abogados ya están en la sala de juntas —anunció mi asistente en cuanto crucé la puerta de mi oficina.
—Perfecto. —Coloqué mi bolso sobre el escritorio y tomé un respiro. Miré mi reflejo en la ventana: impecable, con un traje n***o ceñido que irradiaba poder, el cabello recogido en una coleta alta y mi maquillaje en su punto exacto. Fría. Intocable. Exactamente como debía ser.
