—¿Elena? – pregunta, maldición es ella. La observo, seguía siendo tal y como la recordaba. Cabello rubio, perfecto perfil… Ann Grey. —Hola, Ann – respondo son leve asentimiento de cabeza, está de pie frente al departamento de Brian, me acerco y ella me observa con atención. —¿Cuándo volviste? – pregunta, su voz irritante y cantarina en mis oídos, no lo soporto. —Cuando una estúpida chica le destrozó el corazón a una de las personas más importantes de mi vida – digo y clavo mi mirada con la suya por un par de segundos ella es la primera en apartarla y sonrío. —¿Has escuchado algo de eso Ann? – pregunto mientras me reclino contra el marco de la puerta de madera, Ann traga notoriamente. —Sé que estás hablando de mí, ¿porque demonios no lo dices y ya? —Pretendía darte una oportunidad, l

