Ambición y Envidia
Lord Edward Blackwood estaba sentado en el lujoso estudio de su villa privada, rodeado de estanterías de caoba repletas de libros antiguos y arte de un valor incalculable. La luz de la lámpara de su escritorio proyectaba sombras sobre su rostro severo mientras deslizaba los dedos sobre la pantalla de su tablet, absorbiendo cada noticia, cada imagen filtrada, cada maldito titular sobre su sobrino.
"Alexander Blackwood, el heredero más codiciado, cae rendido ante una abogada de hierro."
"Helena Thorne, la mujer que conquistó al magnate: una diosa en la sala de audiencias y en la alcoba."
Edward dejó escapar una risa seca, sin humor, mientras presionaba la sien con los dedos.
- ¿Cómo demonios lograste esto, muchacho? - murmuró, con la mandíbula apretada.
Conocía a su
