Una copa o dos, ¿quieres?

para ti soy gay

Hace bastante tiempo que no camino sin que sea correr de manera obligatoria por que mi padre me persigue, no hay necesidad de que haga nada mas que correr tras de mí para que sienta el verdadero horror y empezar a correr lejos, así es que hacemos ejercicio mis hermanos mayores y yo, al que alcance primero el horror de satán será el que limpie los autos.

Es bastante agradable esto, digo el lugar esta medio nublado, hay algo de tráfico pero, carajo se ve mejlr que mirarlo desde un auto blindado en dónde el peligro esta es dentro.

Me gusta.

pasamos por varias tiendas antes de siquiera darme cuanta que habia una dulceria.

—Oh, Mira pastel.

dijo Andras señalando un monumento de pastel con forma de pirámide.

—Eso es un pastel muy grande.

Me quedé mirando con el mientras no nos dimos cuenta que los demás se fueron caminando, estábamos los dos al final del grupo de todos modos.

Miro alrededor y noto a Hefesto caminando de regreso a grandes zancadas.

—Si se pierden no podremos seguir viviendo.

el mira interesado también dentro de la dulceria, pero estoy consciente de que no veía dulces.

Es Hefesto finalmente.

los demas vuelven corriendo por obvias razones.

—¿Y si compramos algo?.

pregunta entrando sin más.

Yo camino instintivamente tras él y luego unas hermosas paletas de caramelo me llaman como cantos de sirenas y no me voy resistir, rara vez podemos comer dulces mis hermanos mayores y yo, cuando mucho es porque viktor roba la mayor parte de lo que está en la cocina en medio de la noche, solo para que los gemelos y la menor de nosotros no se den cuenta y le digan a satanás

Tomo algunas y miro el precio, apenas son unos centavos... que raro...

Miro a Andras que está más pendiente de unas galletas de maní.

Supongo que preguntarle a Peter si me las puedo llevar no seria mala idea... Pienso unos segundos.

No me se el número de Peter.

carajo.

Solo agarro dos y voy a ver qué otras cosas hay, finalmente Hefesto nunca me dice que no... ni ninguno de ellos en general... Tienen algún límite pero no sé cuál es.

Me quedé en silencio, había batidos y cosas de ese tipo.

alguna de las chicas estaba hablando con Hefesto, como cosa rara, no se cansa.

dejo las paletas en el mostrador y de la nada siento algo en mi espalda.

—¿Seguirás mirando los malvaviscos con galleta o solo sentirás vergüenza de pedir algo?.

Solo Bastián.

¿Y luego yo soy inmadura?.

—¿sabes el número de Peter?.

pregunto poniendo mi mano en su cabello.

—Sep, a propósito de eso, Hefesto hizo que Peter le sacará un buen tajo a Alexander ya que está de odioso y le debia gran plata a Peter por no se que, así que técnicamente Evan tendría que tener tu parte o Hefesto, mejor ve y le preguntas a Hefesto.

...¿que?.

—Bastian, por favor habla bien.

—Hefesto tiene un buen billete que sería parte de lo tuyo.

Miro a la nada unos segundos...

¿¡por qué?!, ¿quien es lo suficientemente masoquista como para intentar sacarle dinero a Alexander?.

—¿Y quién le quitó eso?... Hay mi incógnitas que no entiendo... dijiste que Peter lo hizo, ¿no?.

se para a mi lado y asiente mientras mira unas galletas de maní salado.

—¿por qué?.

—No se, pregúntale a Peter o a Hefesto, es casi lo mismo que Giorgio, y sabes que Peter y Giorgio son más unidos que nada en este mundo.

Toma varios y pasa de largo hasta el mostrador con un paquete de galletas de mani salado y otras dulces.

yo camino tras él con algunas paletas en mi mano.

— Son de galleta... ¿será de chocolate?...

pregunto para mi misma viendo el color marrón oscuro casi n***o de la galleta, pero en el papelito junto al precio no decia si son de chocolate o no.

—Fes... ¿me las puedo llevar?.

pregunté antes de que Bastián hablara.

Hefesto me mira pasando de largo de lo qie sea que decia la chica del mostrador y asiente.

—¿solo eso?, creo que hay chocolate amargo en algún lado también dulces de almendra y avellanas.

Oh avellanas.

las dejo junto a lo de Bastian y voy a ver si encuentro chocolate amargo con avellanas.

Este lugar el grande yo creo que sí.

—¿que haces?.

Andras esta de cuclillas con cesta que ya se desbordó de dulces únicamente de nueces con varias mezclas, tambiennesta con un paquete de dulces de macadamia con caramelo o de nuez de navidad con chocolate.

—Tratando De elegir, ya llevo nuez de macadamia pero solo con chocolate, y la nuez de navidad tambien pero en una mezcla de galletas con varias otras nueces... ¿que deberia escoger?.

Le quite la nuez de macadamia y puse en su mano un paquete de galletas de maní con mantequilla de maní sobre ellas.

luego cambie el de nuez de navidad por un paquete de almendras con chocolate.

—Ve por lo seguro.

Parece satisfecho.

yo un par de paquetes de palitos de chocolate y un pequeño frasco de mantequilla de maní crocante... supongo que debe saber bien.

veo a Evan con muchos bombones rellenos de jalea de cereza, más atrás llegan Gian Lucas y Marcelo con helados.

yo paso al final con unas cuantas bolsitas de almendras con chocolate.

—¿ya?.

Hefesto se nos queda mirando.

respira hondo y suelta un suspiro algo dramático.

—Solo no digo nada porque son niños... solo por eso...

ya lo dijo todo, yo me río entre dientes..

—Bueno... si...

este paso su tarjeta con completa naturalidad y nosotros empezamos a salir con algunas bolsas y la mayoría quedaron dentro de la mochila de Evan.

—¿Y ahora que?.

pregunta Evan mirando a Hefesto.

—¿al cine?

dice Hefesto mirándonos.

—Si, parece buena idea.

—Si es así mas les vale esconder sus dulces dentro de su ropa para que no haya que gastar otra cien dólares en comida, por dios compren agua... les dará diabetes.

Hefesto a pesar de estar comiendo nubes de azúcar sale con eso.

Yo mostré mi botella de agua.

—¿ven?, sean así, sean como Vicky.

Dice señalando me mientras aún tiene unas cuantas de esas bombas de azúcar en el paquete.

seguimos caminando como patos tras Hefesto entre la gente por las amplias aceras.

—¿y que pelicula vamos a ver?.

preguntó.

Hefesto se queda parando mirando a la nada y todos los demás se detienen pensando.

—Que tal, Lo que todo gato quiere o La película de Infinite.

parecen un juzgado y un juez que están deliberando en un idioma que no entiendo... osea, se miran y asienten en un orden tan aleatorio que no se que quieren decir... y también de distintas formas... Son una sociedad secreta de hombres y nada me dirá lo contrario.

—Tienes una obsesión con Infinite que nos empezará a preocupar cuando te vea experimentar con babosas. así que no lo hagas.

Es la única afirmación que suelta Bastián mientras efecto aún está pensando.

—Entonces... ¿Lo que todo gato quiere?.

pregunto.

Y vuelven a repetir el ciclo de asentir...

—Si.

responde finalmente Evan.

— bueno, hay mas película oero tienes 12 y es complicado de nos dejen entrar ya que el mayor es Hefesto, luego Andras luego yo y los demas quedan fuera del rango.

Hefesto nos mira detenidamente luego de poner su mano en la cara de evan para que se calle.

—Ninguno parece menor de edad... Podemos intentarlo... Hay una película muy buena que se llama, Overdose.

deja la cara de Evan tranquila y seguimos caminando tras de él. Pero al menos ahora sabemos que queremos ver.

—¿no se supo que somos tu responsabilidad?.

—Tengo que evitar que se lastimen o mueran, si son mi responsabilidad, pero no les pudo poner un arnés a cada uno y llevarlos como perros la ley no me deja hacer eso. Por desgracia.

Dejo la caja de nubes de azúcar dentro de un tacho de basura y en orden cada uno fue botando su basura yo solo tire uno de los papelillos transparentes envolvía mi paleta de galleta.

—Pero no damos problemas.

— Si dan problemas pero, tenemos un sistema que funciona y así no dejan desastres en mi departamento.

dice Hefesto con una botella de agua.

—Eres de lo peor a veces.

—Lo mismo digo.

yo continuo en silencio comiendo mientras ellos discuten, "discuten".

pasamos por una plaza que daba una linda vista de algunos arbustos altos con flores.

me quedé mirando, de la nada algo golpea mi rodilla, caigo al suelo y mi paleta se va al carajo, Levante la mirada mientras apoyo mis manos en el suelo, y veo como la pisa un auto desparramando la galleta el chocolate y el malvavisco por la carretera... Que dolor...

—¿estás bien?.

pregunta Andras ayudándome a levantarme.

—Si, solo me distraje y no se con que tropecé.

—Fue con un hidrante.

señalan el bulto rojo brillante y tras levantarme seguimos nuestro camino como Patos tras Hefesto.

En la plaza hay bastante gente...

Debe ser divertido.

Sigo con mi paleta de galleta.

—Es un bonito lugar, ¿no?.

dice Bastián que está frente a mi con su mani.

—Si, bastante.

—Te diría que fuéramos pero sería jodido ir, es la plaza de las mujeres, solo mujeres pues... ya sabes, luego del movimiento feminista, ya sabes... te diera que fueras a pasar un rato alla pero no seria agradable para ti.

¿El que?.

le miro incrédula sin saber de que me habla, ¿cómo que hay lugares solo para mujeres?.

—Ah disculpa, se me olvida que pasaban tu y tu hermanos más tiempo encerrados de lo normal... bueno... no importa, más tarde te explico, solo no creo que sea posible que vayamos allá... Lo siento, se que está muy lindo y se ve agradable pero para nosotros seis es un campo minado.

Sigo mirando el lugar y vuelvo a mirar al frente, finalmente no es que yo sea muy distinta a un hombre en apariencia...

— Bueno, yo no soy muy femenina que se diga así que tampoco creo poder pasar por allí. De todos modos no quiero hacer nada si no es con ustedes así que estoy mejor así.

Seguimos caminando al cine.

Si,me gusta estar con ellos, no se que haria si estuviera sola.

—Padre santo, pero que enorme es eso.

miro muy asombrada el gran edificio.

—Ok, ya llegamos así que, hay algo que hacer primero.—ellos me miran y yo miro a todos lados... pero me miran a mi.—Necesitas ropa.

me señaló a mi misma con el dedo índice.

—¿yo?.

—Si, tú.

dice Andras.

—Por la hora el envío por servifast debe estar algo lento así que no es mala idea hacer que la lleven luego de que veamos algunas cosas por aquí y la película.

me los quedo mirando sin saber de que hablan.

—Delivery pero de paquetes o bolsas como ropa, electrónico y eso, tambien comí pero es más de cosas materiales como esas, no vivo muy lejos.—Seguimos caminado dentro del inmensamente masivo y colosal centro comercial.—ServiFast se caracteriza por usar el bloqueo de Paypal a su favor para mantener la fiabilidad, ellos guardan los paquetes hasta que se les notifica que estás en el punto de destino y así te los entregan directamente así, fácil, y luego de que tú resivas todo completo y lo notifiques así, el pago de Paypal se libera y ellos lo reciben, fácil.

miro a la nada sin entender mucho pero, supongo que tiene sentido, la mayor parte del tiempo estoy tras unos muros de catorce metros de alto electrificados y aislada del universo normal.

—Oh claro... no te entiendo pero supondré que no te robaran las cosas.

—En escencia es eso.

Supongo que sí.

pase por varias tiendas y veo un suéter de capucha negra y con una abertura por dónde podría pasar una cola de caballo...Seria bastante cómodo.

—¿Sabes que es una tienda de hombres?.

Me quedo en silencio procesando lo que me dijo Evan.

—Uh... es la ropa que mejor me acomoda...—Me fijo en los carteles, hay descuentos para compras de más de cincuenta artículos... a matoe cantidad hay descuentos de 10%, 15%, 20%, 25%, 30%, 40%, 50%, 60% hasta 75% de descuento a mayor cantidad de articulos.—Hay descuentos de varias formas...

contestó finalmente encogiendome de hombros.

—Buen punto.— como buenos extraños en grupito entramos juntos a la gran tienda, hay tantas cosas que podría comprar que son ansiedad las cantidades de conflictos mentales que tengo para decidir... oh dios, botas.—¿y porque de pronto les interesa tanto esto?.

—Vas a vivir con nosotros el 80% del tiempo, además de eso, te hace falta salir, ver mundo, disfrutar la vida, ver algo agradable, también ropa nueva que no sea de viktor o sobras del mismo Alexander, así que cállate, vas a entrar y te va a gustar.

Andras me tira unas cuantas franelas manga larga.

—Tienes el mismo cuerpo que Evan pero más delgado, así que estás debería quedarte bien, Hefesto haz algo y ve por unos jeans clásicos, Evan ve por unos suéteres que te lleguen por medio muslo, negros si es posible dos o tres los demas ya verás tú, también uno blanco y algunas chaquetas, Bastián se útil y muévete, allá hay unas franelas comodas...

deje de escuchar mientras me llevan de un lado a otro, ¿así se siente que se interesen por verte bien?, que agradable y extrañamente penoso es esto.

Es raro ver qué seis, seis adolecentes entre los catorce y los dieciocho años van buscando ropa, se veria peor si fuera una tienda de mujeres, pero, supongo que nadie dice nada por eso.

—Y tú, escoge zapatos.—Me deja sentada frente a una pared de punta a punta colmada de zapatos... ya se que soy talla nueve y medio pero... esto es extremadamente penoso.— recuerda, al menos tres pares de botas, los colores básicos, negros, beige y blanco, es lo que mas verás y ya luego sabras porque, dos de zapatillas y al menos uno de esos debe ser n***o, unos tres pares de zapatillas deportivas, igual alguno debe ser n***o, unas casuales y buscate unas botas de corte alto como las Timberland o algo así.

Santo Dios... ¿que no los hombre solo usan lo primero que ven y ya?.

—Mientras yo exista no van a usar la misma mierda mas de dos veces por mes.

...Eso explica todo este alboroto. y porque todoa ellos parecen que los viste alguien de una revista o algo así.

No me extraña, Andras vive y muere por una buena apariencia y presencia impecable.

aún recuerdo que muchas veces él me peinaba cuando era mas pequeña o se ponía intensamente frustrado cuando no conseguía que me viera bien con un vestido o un outfit, y solía inventarse combinaciones.

Por eso se siente tan familiar esto.

Seguí eligiendo uno tras otro dejándolos en orden por tipo de zapatos, supongo que en cierto modo me parezco a Andras en esto, entiendo su punto de estar preparado para cada ocasión, así que, busco las botas de corte alto y me encuentro con unas a media pierna que si bien no son lo más femenino del mundo no caen en lo masculino tampoco... me gustan.

Son como de un extraño estilo metalero.

Las tomo y sigo.

—Bueno, es hora de que te empieces a probar cosas vik.

Vik... vik vaporu... Dios.

Andras dejo a Evan con el montón de zapatos y yo voy a rastras hasta donde andras me empuja dentro de los probadores y por inercia Hefesto también entra y me deja la cesta de ropa. hay demasiadas cosas aquí.

—Esto tomara un rato, pero la película empieza en unas cuatro horas... Además... Aún te falta la confección del uniforme de la Seven Stars.

Entro en el cubículo y allí empieza el suplicio.

—Deberían comprar algo para ustedes, mientras mayor cantidad de artículos mayor es el descuento, miren los carteles en el vidrio de la tienda.

(....)

Al menos dos horas para ventitantas bolsas de compras que por dios no sabia que habría tantas y más de veinte cajas de zapatos.

No me arrepiento.

—sacamos un 75% de descuento y cosas más...

Andras parece feliz.

— somos divas, ¿sabes?.

Dijo Evan.

—¿ya acabaron?.

pregunta Hefesto que esta hablando fuera del centro comercial con un tipo con un uniforme de color blanco y azul.

—Eso, viktoria, es servifast, todo va a parar dentro de la ban y se mantiene bajo registro hasta que se sepa que nosotros estamos en el edificio para evitar robos o extravíos. Y así lo entregan al dueño... En este caso Hefesto.

asentí mientras solo veía como la ban se llenaba poco a poco hasta que ya no teníamos más que meter allí.

—Ahora, vamos a ver qué otras tontería hacemos hasta que toque ver la película, ya compre los boletos.

Hace acto de presencia Gian Lucas con siete tickets.

—Bueno, a caminar porque falta una cosa muy importante.

miramos a Hefesto.

—El uniforme de la Seven Stars.

—¿no sirve el que ya tengo de la academia femenina?.

pregunto en un tono algo bajo.

—No, ese es azul y el especial es verde, el nuestro es n***o para el diario y blanco para el de presentaciones ceremonias y esas cosas, también tienes que buscar la chaqueta, el cinturón, la gorra y la boina blanca y la negra... también la insignia... ¿y esa cara de cordero?.

me pregunta riendo.

—... Es que es mucho...

Con algo apenada con las manos en los bolsillos.

—Querida, cállate. Solo falta eso, no seas llorona, finalmente, si Alexander no lo hace, ya su dinero es nuestro.

Sigue sonriendo señalando las escaleras.

—Uh,bueno.

Dije y seguimos escaleras arriba mientras seguí con las cosas que ya habíamos comprando horas antes.

No tardamos mucho en encontrar una tienda era de confección de ropa, no era muy grande pero se veía bien...

Hefesto entra pregunta unas cosas y luego vuelve a salir.

—Mañana llegan los rollos de tela de ambos uniformes, ya se habia acabado por qué es el final del año escolar y ahora tu ve dentro para que te saquen las medidas, quedara apartado cierto metros de tela, las insignias las boinas, gorras, medias y toda esa parafernalia, también otras cosas, ahí ve, no tomara mas de quince minutos o media hora cuando mucho. ah y el uniforme de invierno, entrar en la Seven Stars es una decisión sin retorno.

ahora entiendo porque, gastar tanto para luego dejarlo debe ser un dolor fuerte... por eso debe ser que los que entran no salen hasta uno o dos años...

entre con Hefesto y los demás se dispersaron para buscar algunas cosas.

—¿cómo se supone que explique que no soy de pecho plano?

pregunto algo incómoda, el sujeto que anbada con una cinta métrica y una carpeta con un lápiz se quedo mirando.

—No es su problema, en cualquier caso, para eso vengo contigo, hubiera venido Peter pero el está ocupado con algunas cosas y ha sabes cómo es Giorgio.

Es... Es verdad supongo.

—Se que no es mi problema pero, ¿cómo que no eres de pecho plano?.

le dejo mi chaqueta y la franela que tenía.

—supongo que es más... un comienzo de un intento algo vago de pecho, pero allí están, haciendo nada.

Ya sin nada más que un ajustado sueltes n***o lo entendió mas fácilmente.

Es gracioso, pasar tanto tiempo con alguien hace que pierda completa vergüenza de lo que sea.

—Bueno, tienes razón, pero, ya crecerán.

Se encoge de hombros.

—Eso no ayudará en nada.

seguían sacandome las medidas mientras hablábamos.

el hombre se mantuvo en silencio haciendo lo suyo.

—Oh vamos, no te quedarás asi para siempre, ya sabes que tu padre era más feo que un puntapié entre las piernas, ya te acomodaras.

pues si, quizás sea así.

—Oh bueno, ya veremos.

Luego de unos cuantos minutos más si nos pudimos ir.

Seguimos tonteando por el centro comercial, ya faltando media hora o tal vez cuarenta minutos más o menos, para la película subimos para comprar las palomitas y algunas cosas más.

Yo pasé al baño y antes se siquiera pasar cerca me devolví.

—¿no querías ir al baño?.

me pregunta Bastián con una barra de chocolate en la boca.

—Es que si voy al de mujeres será raro si voy al de hombres me sentiría rara...

Bastián se quedó callado bastante sombreado y pensativo por el problema que acaba de surgir.

—Bueno... lo normal seria que fueras al de mujeres pero...pareces más un punto medio... así que... creo que lo más lógico es que vayas al de hombres sin mirar a ningún lado y bastante rápido... creo... Si te hace sentir mejor que Marcelo haga algo y vea si no hay nadie.

Marcelo asintió.

—Sep, asi ningún rarito empezará a joder si estás allí.

dios, pero que mierda es este mundo para mí.

y así hicimos, el plan perfecto supongo.

Debo tener cara de que me he perturbado con algo pero no es eso, es la calante y bestial vergüenza que recorre mi ser.

Pasamos de largo hasta donde están los demás, parece que Hefesto no se decide si las palomitas con caramelo de mantequilla o con dulce de leche...

Saben distinto pero creo que da un poco igual.

—Yo quiero de las de dulce de leche y las de queso.

dije intentado sacar mi mente de lo sucedido con los baños.

— claro,en un segundo, ¿las quieres en un bote grande o juntas?, tienes cara de que las quieres mezcladas.

Me sorprende mucho que la chica si se dirija a mi sin tanto problema.

— pues si, si no es problema te lo agradeceria mucho.

Es un alivio no tener que usar a alguien mas para estas cosas... parece alguien agradable y directa, eso es útil y lo agradezco infinitamente, ya estaba fastidiada de pensar que tendria que decirle a bastian lo que quería para que él lo pidiera... sería una vergüenza constantemente.

Sigo mirando la soda de cereza pero no me decido si esa o un Sprite grande y agua.

—¿Algo más?, estas bastante entretenido al parecer... ¿quieres un consejo?.

Por favoe si, perderé la cabeza con decidir que refresco quiero... quizá solo pida un agua de toronja a este paso.

—¿si?.

—Hay que promoción que por la compra de dos o más refresco de tamaño grande se puede hacer una especie de mezcla, note que van para la película Overdose y ustedes son varios, asi que podrían usar eso para hacer parte de la promoción de el cóctel Overdose, son solo cinco dólares por dos bebidas y la tercera que es una mezcla sale gratis y así no tienes que decidir.

Oh, que bueno.

mire a los otros y ellos la estaban pidiendo sus desgraciados híbridos de bebidas.

—tus amigos ya estaban muy de acuerdo, así que, bueno, ¿que es lo que quieres?.

— uno grande de seven up, Coca-Cola y Soda de cereza.

ella se va tranquilamente a prepararlo y veo el bote tamaño familiar de mi mezcla de palomitas.

Solo empiezo a comerlas.

—Que disfruten las película.

Dice ella amable mientras me entrega los dos vacos grandes y la mezcla en un vaso especial con el decorado del cartel de la película.

—Gracias, bye.

En grupo nos vamos.

Que agradable.

—Bueno, parece que le gustaste.

Seguimos hasta la sala luego entregar nuestros boletos a duras penas porque eran tantas cosas.

Mire a Andras quien seguía delante de mi.

—¿a quien?.

—A esa chica, supongo que creyó que eras un sujeto de cara linda o algo así.

quede en blanco.

Ugh.

—Eso es un poco desagradable, no soy de esas. ¿por eso fue tan amable y me avisó de la promoción?.

Bastián asiente mirándome de reojo.

—Pero ella no lo sabe, es entendible, técnicamente si dices que te gustan los hombres tu seguirías siendo hetero y ella creerá que eres gay.

Odio mi apariencia pero por dios, algún provecho tenía que tener.

—¿Y esa amabilidad siempre la tienen con ustedes?

—Si a veces, pero si eres mujer los hombres también serán así o mas amables,trata de sacarle lo positivo a como te vez no es tan malo, mira la promoción y los descuentos que te sacaste.

Bueno si, pero no me gusta verme así... Espera...

ya dentro de la sala algo paso por mi mente, me quedé sentada esperando,mirando a la pantalla blanca vacía...

—Ella me estaba coqueteado, ¿verdad?

Hefesto solo me da unas palmadas en la espalda.

—Ugh... dios no...

—Si, eso mismo...

Solo siguen dandome palmaditas en la espalda y cabeza.

—Tranquila no ser tan malo, después de todo, descuentos y promociones no son un castigo.

me hundo en mi asiento con algo de incomodidad.

—No es eso, es que es un poco denigrante, desagradable y raro, no me gusta hacer sentir mal a nafie oero tampoco quiero que me andén viendo con esas miradas tan raras... Es... es extraño y no me encanta mucho que se diga, tiene un beneficio potencial, lo admito pero llegará un punto en donde sea incontrolable y eso me hace sentir bastante mal.

—Es entendible, como cuando bastian fue a la playa y creían que era mi por su largo cabello rojo... Muchos hombres querían ponerle protector solar.

comenta Gian Lucas.

oh no...

Dije mentalmente.

—Es algo así de incómodo.

—Solo no lo piensas tanto, saca una buena opción de esto, porque si no te vas a mortificar todo el rato.

se que Hefesto tiene razón pero indistintamente es raro.

—Puedo con eso... creo... solo... intentaré no ser muy obvia supongo.

Me quedo callada ya que esta empezando a llenarse la sala y apagaron las luces para empezar la película.

—Lo puedo intentar...

me dije a mi misma aún bastante incómoda...

No me gustaba para nada la idea de que atraigo mujeres... o atraer la atención de lo que sea.

Salimos de la sala mientras aún estamos llorando por reír tanto yo sigo tosiendo desesperada por haberme reído tanto, tres horas de oelicula y nada se desperdicia en ella, todo es un potencial boom en tu cara para que te rías.

hacemos lo que podemos para recuperar la compostura.

—Eh~ mira quién no ha dejado esa bella sonrisa.

—Si, a Hefesto no se le quitará esa sonrisa en un rato.

lo señaló atrás de mi que esta contra la barandilla tosiendo aún, aferrado a ella, riendo y tosiendo.

—Me refiero a ti, hasta tus ojos resaltan.

señala de nuevo Evan.

—si si, como sea, estoy feliz, hace tiempo que no reía tanto.

me gusta sentirme bien, estoy feliz y tranquila.

Es lindo reir a carcajadas sin que nadie te diga nada por que tidoa se están de lo mismo.

pasamos por dónde están las chicas y siento la mirada de alguien sobre mi pero le ignoro, sigo hablando con bastian sobre unas cuantas escenas que se que lo harán reír de nuevo, solo quiero que se ría, su risa da risa.

Empieza a reírse hasta que se está ahogando y se sostiene el estómago mientras oarece sufrir tosiendo casi de rodillas en el suelo.

bajamos por las escaleras normales y seguimos hasta una zona donde hay muchos puestoa de comida de todo tipo.

—A ver hagan un grupito aquí—Señala un punto cerca de él. No agtupamos como tontos allí.—Bueno, como estoy de buen humor, elijan lo que comerán, y solo un postres, por estoy bastante feliz y no quiero comprar doce pizzas.

—Yo quiero ramen picante.

Dije de inmediato, quiero probarlo bajo cualquier consecuencia.

—Te comprar una hamburguesa por si te arrepientes.

dice Andras precavido por la vida.

y cada uno empezó a decir lo que quería.

—Una pizza familiar con bordes de queso.

Hefesto mira a Bastian con cierta frustración.

—Quiero probar las albondigas con puré que hacen al horno.

no dijo nada a lo quería Evan.

—Nosotros vamos por uno perfecto arroz chino.

Gian Lucas y Marcelo se la van mejor así.

—Yo voy por un combo de McDonald's.

el cual esta junto al pequeño puesto de comida asiática, curiosamente solo dice oriental food, solo eso...

—Yo ire al KFC

cafa quien se va a dónde te que y el que regrese primero aparta una mesa.

Nos dejó un billete a cada uno.

Cada quien vino con lo suyo y yo regrese con un tazón hirviendo en mis manos con huevo y creo que esos son pedacitos de pollo

Decia porción mega, era muy encerio... Huele bien.

Lo más positivo es que si se comer con palillos.

me siento con ellos y se quedan mirando cómo carajos me quedaron de rojas las manos.

parecia que todos habíamos pedido las cosas más grandes sin saber que grandes eran.

Genial.

pero, bueno, es un dia que ha merecido todo un año de espera.

El ramen me gusta.

También saber que no voy a estar esta noche temiendo que mi padre me despierte con un grito, al fin.