—Luisana, ¿dónde estás? —escucho la voz de Carlos al otro lado de la línea. Apenas vengo saliendo de la ducha, me quedé dormida. —Disculpa se me pasó la hora, me visto y salgo en seguida para el Ministerio —le digo dirigiéndome al closet para buscar algo que vestir. —Te estamos esperando para que el experto comience a hacer su trabajo, no iniciaremos hasta que estes presente, primero porque eres la jefa de la Fiscalía y segundo porque eres la directora de este caso en particular —me informa con formalidad, supongo que ha de tener a otras personas al frente. —Pierde cuidado en media hora estaré allí —prometo y dejo el móvil sobre el buró que tengo en la pequeña habitación que fuge de closet. Por espacio de cinco minutos miré a mi alrededor pensando que atuendo usar. Opté por un pantalón