Las lapidas

544 Words

Corría. Corría como si el mismísimo infierno me hubiese gritado "¡Te toca!", como si las sombras hubiesen cobrado vida y estuvieran especialmente hambrientas de mi. De mi, sí. ¿Por qué yo y no puede ser otro pobre infeliz que esté pasando por aquí en el campo santo? Vaya uno a saber. Zigzagueo entre lápidas viejas, lápidas torcidas, lápidas que parecían mirarme de reojo como diciendo “aquí vas a caer tú también, mija”. Algunas estaban cubiertas de musgo, otras partidas en dos, como si hubiesen escuchado demasiados secretos y ya no pudieran sostener tanto chisme. ¿Quién rompió las lápidas? ¿Quién plantó musgo aquí? ¿Es esto importante ahora? No, pero mi mente no quiere cooperar conmigo como lo están haciendo mis piernas ahora. Sin ni siquiera pensarlo mis piernas responde por si sola. S

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD