No, es imposible. No han estado separados ni un solo instante desde que todo comenzó. Sus pasos han sido sincronizados, sus decisiones tomadas en conjunto. No hay brechas entre ellos, no hay momentos aislados. Ni siquiera cuando apareció el grillo, ya que Allen estaba en la misma sala que él, solo que del otro extremo. Son dos piezas de un mecanismo perfectamente engranado, moviéndose al unísono, sin margen para la duda. Y, sin embargo, la incertidumbre se desliza en su mente como un eco persistente, como un susurro que no debería existir. ¿Será que trama algo? No es propio de él actuar sin corroborar, sin sopesar cada posibilidad, sin asegurar que lo que hace tiene sentido. Siempre busca una segunda opinión antes de dar un paso decisivo, siempre analiza los riesgos con una precis

