La verdad no dicha pero si entendida

989 Words

Aidan no podía detener el temblor. Las lágrimas caían sin control, trazando líneas silenciosas por sus mejillas mientras una respiración entrecortada le robaba el aire en espasmos violentos. Sus dedos apretaban los lados de su cabeza como si intentara sostener los pensamientos antes de que se fragmentaran por completo, antes de que el dolor se le escurriera por los poros. La noche estaba espesa, cargada de una tensión invisible que parecía condensarse sobre la arena abrasada que lo rodeaba. Las estrellas, usualmente indiferentes, ahora lo observaban con una especie de solemnidad. Y Aidan, perdido entre los escombros de lo vivido, alzó apenas la mirada, lo suficiente para clavar el rabillo del ojo en el hombre frente a él. Jean Pierre lo vio. Y con una sorpresa sincera en el rostro, incli

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD