Megan
Volví tarde esa noche solo me dispuse a dormir y tratar de olvidar cada parte de mi historia, quería olvidar todo maldita sea la hora en que lo conocí.
...
-Meg me gustas mucho- menciono poniéndose de pie, un ramo de flores apareció a sus espaldas, mi prima llevaba el ramo en sus manos y yo no pude evitar emocionarme, jamás alguien había hecho algo así por mi- Por eso quiero que me des la oportunidad de ser tu novio, que seas mi compañera de vida- jadee y sonreí con emoción
-Por Dios claro que quiero ser tu novia- mencione abrazándolo
-Felicidades prima, serán muy felices- me abrazo y sonreí.
Pero tan pronto como abrí los ojos todo había acabado, me desperté de un salto y toque mi pecho me sentía agitada y dolía cada parte de mi pecho, los recuerdos eran dagas directo a mi corazón, ella había ayudado en todo, todas las sorpresas que él me daba ella era su cómplice pero solo fui una tonta, una maldita tonta.
Mire mi celular y tenía varias llamadas perdidas de Mario y muchos más mensajes donde me pedía que lo escuchara pero no quería ni siquiera verlo.
Me puse de pie y lave mi rostro antes de bajar a desayunar con mi familia, al llegar al comedor sentí como mi estómago se revolvió, ver a esa persona a la que mi familia le había abierto las puertas de nuestra casa me enfermaba.
-Hija anoche no te escuchamos llegar, ¿Qué tal fue? - pregunto mi madre sirviendo la comida y yo suspiré, pude sentir la mirada y sonrisa de satisfacción de Karen
-No quiero hablar del tema mamá- mencione tomando mi plato y los cubiertos para comenzar a comer.
-Hacen una hermosa pareja primita- menciono Karen con esa voz tan irritable
-Tu callate- hable con odio ocasionando que las miradas de mis padres se posaran en mi
-Megan se más educada- menciono mi padre un poco frustrado
-¿Yo debo ser educada? - pregunte molesta
-Karen no ha dicho nada malo, no seas descortés hija- menciono mi madre mirando hacia la televisión
-Si primita no he dicho nada malo- su comentario terminó de sacarme de mis casillas y me puse de pie molesta
-Claro la Karen perfecta nunca dice nada malo- grite furiosa atrayendo de nuevo las miradas de mis padres
-Ya basta Megan, no te he educado asi- menciono mi padre poniendose de pie pero en ese momento yo estaba a mi punto máximo
-Estoy arta de ser la educada, la cortés y obediente, estoy arta de que defiendan a esta zorra más que a su propia hija- la mano de mi madre chocó contra mi mejilla haciendo que las lágrimas cayeran por mis mejillas
-Disculpate- ordenó señalando a mi prima quien me miraba con burla
-¿Disculparme yo? - me reí con amargura- Ella es la que debería disculparse, es una zorra, una arpía venenosa y una completa ofrecida- grite- se ha metido en la cama de mi novio durante 4 años y aún así la defienden como si ella fuera su propia hija- estaba fuera de mi misma
-¿Qué dices?- menciono mi padre mirando a Karen completamente enojado
-Eso es mentira tío, yo no he hecho eso- sus ojos se llenaron de lágrimas
-Claro que lo hiciste, los encontré en su departamento, yo misma los vi- grite molesta, la quería lejos, lejos de mi vida y de mi familia
-No voy a permitir que trates así a tu prima- mi madre me miro molesta
-Karen he sido considerado contigo porque eres la hija de mi cuñada pero no voy a permitir ese comportamiento en mi casa, te hemos criado como una hija y no puedo creer que hicieras algo asi- menciono molesto
-Pero tío no he hecho nada, Megan me odia siempre lo ha hecho- sollozo sobre el hombro de mi madre y yo sentí una opresión en mi pecho
-Disculpate Megan- amenazó mi madre y yo negué
-No pienso hacerlo, he dicho lo que se merece, es una cualquiera y eso no se lo voy a perdonar nunca, me voy de aquí- me aleje de ahí completamente molesta y subí a mi habitación, tomé mis maletas y comencé a meter mi ropa ahí, la puerta se abrió y mi padre entró, por un momento creí que me regañaria o diría algo pero no fue así solo toco mis manos para que dejara las cosas y poder abrazarme.
Sus brazos me rodearon y solo eso basto para que mi cuerpo se relajará y soltara todo, las lágrimas caían sin parar, mi papá siempre había sido mi principal apoyo y por el ende la persona que más amaba.
-Ya esta cielo, no pasa nada mi pequeña el es un idiota que no te merece- menciono con ternura
-Me voy papá- mencione alejandome un poco de el- No puedo seguir aquí, no donde mi madre le cree más a ella que a mi, no cuando estará viviendo en el mismo techo que yo- mencione metiendo las cosas en mi maleta y el suspiro
-Siempre contarás con mi apoyo, siendo sincero no puedo creer que tu madre prefiera creer en la hija de su hermana que en su propia hija- bufo molesto- Pero no puedo dejarte ir, ¿A donde irás hija? - pregunto tomando mis manos y mirándome fijamente.
-¿Recuerdas el intercambio que te conté? - pregunte y el asintio- Bueno lo he aceptado, tengo que llevar la papelería para que me digan el hospital y a donde ire- mencione caminando y tomando las cosas a su paso
-Habías dicho que no lo harías- menciono con pesar y asentí
-Cambie de opinión anoche papá- me deje caer en la cama y el igual, tomo mi mano y sonreí- Comprendeme papá, tengo 5 años en una relación donde creí que todo era color de rosa, luego descubro que no todo fue así y que mi propia familia me traicionó, que mi propia prima se había estado metiendo con mi novio durante 4 años- tome aire reteniendo las lágrimas- Me siento como una estúpida- confesé y el me abrazo
-No lo eres hija, eres un alma pura que sabe amar incondicionalmente pero está vez entregaste ese amor a la persona equivocada- acarició mi cabello.
-Por eso quiero irme papá, quiero alejarme de este lugar, encontrarme a mi misma, crecer en mi carrera y poder olvidarme de todo- mencione y el asintio
-Nunca olvides lo que vales hija, si crees que lo mejor es irte hazlo, dejalo todo atras, sana esas heridas y no olvides que tu corazón es lo primero- toco mis mejillas- Te extrañare mucho pero tienes que prometerme que me dirás donde estas y que podré ir a verte- sonreí y lo abrace
-Siempre estaremos juntos papá, no importa la distancia- le recordé y el sonrio
-Lo se mi princesa, vamos te ayudo y te llevo al hospital a dejar todo y después ya veremos que pasa- menciono poniendose de pie.
Limpie mis lágrimas y termine de meter todo en mi maleta, a excepción de un cambio de ropa.
Después de que terminaramos mi padre salió de mi habitación para darme privacidad y que pudiera arreglarme.
Me puse un pantalón de mezclilla y una blusa casual blanca, me coloque unos tenis del mismo color y dejé mi cabello suelto.
Tomé mi bolso y mis documentos personales antes de tomar mis maletas y bajar.
En total eran dos maletas grandes, las dejé en la puerta y mi padre me miró poniendose de pie.
-¿A donde irás? - pregunto mi madre aún molesta
-Me voy de aquí, has decidido quién es tu hija, así que me ire- mire a mi padre y el asintio
-No te vallas prima yo te perdono- menciono con una voz melosa que me daba asco
-No me vuelvas a dirigir una palabra en tu vida, hipócrita- tome mis maletas pero mi padre me las quito y las llevo al auto.