Narra Domingo “No puedo descifrar exactamente lo que pienso en este momento, mucho menos puedo decir que siento. Entonces lo mejor que puedo hacer es identificar lo que está pasando, ser consciente de la realidad y con ella, entender que no es irreal. Es ella, estaba de pie frente a mí, me veía, me miraba justo a los ojos, o eso creo que hace, teniendo en cuenta la distancia a la que nos encontramos. A veces desvía la mirada y admira el precioso jardín de girasoles, ese que se protegía de manera tan especial en la hacienda, por alguna extraña razón, de la que no se hablaba. Es un tema tan delicado y tan difícil de hablar, como el mismo hecho de tenerla frente a mí, a pocos metros de distancia y no saber si debo saludarla, si puedo hacerlo o si el deber ser de esta situación es mantener