Tomás Williams nunca se había sentido tan infeliz desde que se fue Margarita, ya tenía todo listo para proponerle matrimonio a Julie y venir a suceder esto que vino a acabar con su paz. «Él estaba dispuesto a cuidarla, y amarla, pero era la esposa de su enemigo y él nunca tendría el privilegio de tenerla como mujer, ¿por qué tuvo que suceder ésta desgracia? No podía permitir que nuevamente una mujer arruinara su vida, así que tomó una decisión. Lo mejor era mantenerse al margen de la vida social, tenía una casa en el campo, se retiraría allí con su madre e hija y desde ese lugar manejaría sus negocios, así podría olvidar el desastre que es su vida amorosa. Viviendo así, llamaría menos la atención de los curiosos y chismosos, sería una vida apacible, en la mañana hablaría con las dos

