Pienso que cuando una persona es feliz con otra tiene que cuidar de ella, pero, también tiene que cuidarse a sí mismo. Yo por ahí me olvidaba de ello, y me perdía en mi ensimismamiento, pensaba en ti permanentemente, te idealizaba y proyectaba aun tipo de relación contigo, pero es perjudicial aferrarte a cosas imposibles.
El amor y la felicidad son los dos sentimientos más peligrosos para el ser humano. Se vuelven tan primordiales que cuando te los quitan no sabes cómo seguir adelante.
Te destruyen. Te desarman por completo.
Y es por eso por lo que aquí estoy, sola y herida, porque no quiero a nadie más que a ti.
Y tú, no quieres a nadie más que a ella...